(…) Motel The Lost SinnerLas horas se fueron volando, como polvo ante un huracán, verla allí en la cama postrada, tan agotada por los esfuerzos del cuerpo era una mirada sumamente satisfactoria, sus piernas temblorosas eran reflejo de eso prohibido que nos encantaba, cometer el pecado una y otra vez, eso éramos los humanos, traidores ahogados bajo los debates morales, anclados a una sociedad que no hace más que coartarnos día con día, hasta que decidíamos revelarnos y nos volcábamos en esos placeres, sin embargo, muchos se ahogaban en ellos ¿Se podía acaso ser libre del todo en esta vida? ¿Escapar del yugo de la luz y la oscuridad? No lo sabía y el corazón acelerado me imposibilitaba comprenderlo de una mejor manera.—Eres un semental cariño —Expresó la dama totalmente saciada.—Bueno, hago lo mejor que puedo —Carcajeé con cierta humildad.—Dios ¿Por qué no eres millonario? Quisiera que me mantuvieras a mí y a mis pequeños, que me hicieras tuya todas las mañanas, me da igual si tengo
Como todos los viernes el día fue un mero trámite, esperábamos a que las horas simplemente se acabaran, alargando al máximo las gestiones para no tener que lidiar con tantos clientes el mismo día. Era el final de la semana después de todo, la fatiga se nota y el cansancio mental alcanza su punto más álgido durante ese lapso de tiempo, uno incluso llega a considerar que es infinito, pero en realidad es solo la relatividad temporal, donde sentimos que los minutos no pasan cuando estamos demasiado al pendiente de las mismas.—Cielos, apenas es hora de almuerzo —Bostecé estirándome en el asiento.—Este condenado día tiene como treinta y seis horas —Declaró Franco agotado —Gestiono y gestiono, coordino entregas, converso bastante las ofertas y seguimos aquí, uno con ganas de diversión —Se quejó nuevamente, esta vez más incisivo.—¡Uy! —Gritó con fuerza Shawn, provocando que todos saltáramos de la silla.—¿Qué te pasa loco? —Golpeo con el borde de su mano Sonia al compañero.—Que este chico
(…) Hotel / Siete de la mañana.Espontáneamente me levanté de un letargo que sentí duro muchísimo tiempo, estaba abotargado, amarrado entre las sabanas y con un dolor de cabeza muy fuerte, miré a mi alrededor y en el piso se encontraba Sonia, pensé por un segundo que yacía inerte, pero entonces comprobé que respiraba levemente, me puse de pie y no tenía ropa, me puse el bóxer, para acto seguido correr hasta su ubicación y darle unas palmadas en el rostro.—¿Amor mío? —Insistí dándole una serie de palmadas.—¿Qué pasa? —Dudó con un profundo dolor en todo su cuerpo.—Algo parece que nos afectó más de la cuenta —Repliqué sin saber muy bien el que.—¿Qué hora es? —Consultó ella nerviosa.—Déjame ver —Medité un segundo dirigiéndome a la mesa, donde estaba mi celular con una decena de llamadas perdidas —Lunes en la mañana —Pronuncié asustado.—¿¡Que!? Dios, esto no puede estar pasando —Se levantó la imponente dama y se fue directo al baño para lavarse, por suerte no teníamos marcas en el cu
Nos fuimos directos a sala de ventas, donde también estaba Irina que ingresaba un poco antes y Engel, viendo directamente a Corina, quien se percibía furiosa. Estos nos observaron nada más entrar, ocupamos rápidamente unas sillas y volteamos en varias direcciones, nadie quería aceptar lo que ocurría, unos minutos más tardes llego Sonia, sus cuencas se percibían con lágrimas grandes que intento disimular con un poco de maquillaje, solo que era imposible conseguirlo.Hizo falta otros treinta minutos para que llegaran el trio de muchachos, estaban bien arreglados con su uniforme impecable, como si nada hubiese ocurrido, eso sí, solo basto con percibir el aura densa de la habitación como para notar que de nada les serviría su recién adoptada mascara. Ni bien se dispusieron a sentarse a trabajar la supervisora se puso de pie.—Bueno muchachos, subamos, Olesia nos espera —Declaró con pesadez, caminando hacia la puerta.La acompañamos en silencio, ese momento en el que te das cuenta de que t
Tengo que admitirlo con toda la vergüenza que eso conlleva, nunca he sido un casanova. La única cosa que tengo a mi favor es el hecho de que soy guapo, todo lo demás pierde el sentido cuando me topo con la cruel realidad de la vida, mis habilidades sociales son muy escasas, por eso es que las chicas siempre llegan hacia mí y yo nunca a ellas.Tampoco conocía a nadie que me pudiera orientar al respecto, las estrategias de mi abuelo provenían literalmente de la prehistoria, donde las mujeres eran tan extremadamente sumisas que con un mínimo de actitud ya caían rendidas a tus pies, en los tiempos modernos eso fue completamente erradicado, ahora debes ser alguien multifacético, solo con un trabajito sencillo no te veraz como un buen prospecto, ya que seguramente ellas tengan uno igual de bueno o incluso mejor.Por otra parte, ya éramos amantes ¿Qué tan difícil podía ser que se terminara de enamorar de mi persona? Solo debía demostrar que era mucho más que simplemente un objeto y permitir
La cosa, aunque no lo parezca fue bastante rocambolesca, resulta que Litium estaba haciendo una promoción especial para los clientes, se trataba de un producto que tenía un valor específico dentro de Litium Marked, pues para los Premium este se reducía en un veinte por ciento o al menos esa era la idea. Los supervisores de ese momento, sin embargo, indicaron a los trabajadores que se les reducía era un diez por ciento y que por cada venta efectiva lograda se les daría a los vendedores un tres por ciento de valor neto, esto como un supuesto incentivo de la compañía. La realidad es que esto representaba una estafa en toda regla, especialmente teniendo en cuenta que los supervisores se quedaban con un siete por ciento de las mismas, se sabe que también estuvo involucrado un agente de piso administrativo, solo que guardo de forma tan meticulosa sus pasos que no pudo ser detectado, este ocultaba sus pasos de manera magistral.—Fue algo horrible vieja, porque todos estuvimos en riesgos d
Nada mejor que deleitarse con las pieles de una mujer tan apasionada, en ese aspecto es cuando uno tiene que ser un verdadero hombre, tomar aquella chica que te ha dado su total consentimiento para hacerlo, respetarla y al mismo tiempo aprovecharse de su serenidad, para llevarla por los caminos del disfrute definitivo, no hay nada mejor que eso, ser guiado por las rutas del eros de la mano de un experto.Claro que no me consideraba a mí mismo un absoluto sapiente del tema, sin embargo, era lo suficientemente ávido como para conseguir esos suspiros, esas pausas y esa incomodidad que impedía la comunicación efectiva con el cliente, al final logro hacer la venta, cosa que en semejante punto me pareció incluso espeluznante.—Sus habilidades me sorprenden señorita Sonia —Alegué con una risa depravada, burlándome de sus debilidades carnales.—Eres alguien terrible Liam, por favor no te detengas ahora —Suplicó relamiendo sus labios, anhelaba gozarlo al máximo.Proseguí entonces sin reparo, s
Se trataba de Jordania, ella y su constante capacidad para dejarme sin aliento, lo que para mí era el momento de entregarme completamente a los brazos de Morfeo fue opacado por esa nota que representaba tantísimas cosas, en verdad no supe que responder, desgraciadamente la aplicación ya había registrado que leí el mensaje, por lo que esta me mando una respuesta que se burlaba de mi falta de disposición.—“¿Qué te ocurre lindo? ¿Te comieron los deditos?” —Expresaba esta seguida de caritas sonrientes, las cuales representaban sus carcajadas internas.No solo se trataba de ella, resulta que una segunda también estaba en la mesa, esa era una de las mayores fantasías de cualquier varón poder compartir los brazos de dos hembras a la vez, mi corazón latía tan fuertemente que con toda honestidad pensé que se saldría de mi pecho, con la respiración agitada quise profundizar un poco más en el tema, de esa manera no quedaría en silencio y tampoco confirmaría nada. —“¿Cómo es ella? Es decir, n