Al abrir los ojos estaba cubierto por sabanas, no tenía personas a mi alrededor, me fui al baño, hice mis necesidades, me coloque una bata y llegue a la cocina, donde el desayuno estaba esperando con una figura de lo más preciosa, mi amada con poca ropa, una cara de tranquilidad envidiable y extraños espasmos, degustando sus alimentos.—Buen día amor ¿Arturo se fue temprano? —Cuestioné sin encontrarlo por ningún lado.—Esta abajo —Apunto a su cintura, dándome un indicativo claro de lo que andaría haciendo.—Ya veo, bueno, supongo que no tengo porque quedarme atrás —Pronuncié con cierta rabia de que la diversión iniciara sin mi persona.Fue una situación tan perversa como divertida, al culminar con esos juegos mañaneros, nos saludamos de manera agradable y notamos en el reloj que mi madre, seguro estaría fastidiada de compartir con su familia, nos arreglamos elegantemente, llevaríamos a mi amigo directo a su casa y después buscaríamos a mi mamá.—Oigan quiero decirles algo, en verdad l
Esperar ese momento no fue en absoluto aburrido, especialmente por todo el trabajo que tenía pendiente, cabe destacar que mantener a un equipo por el camino correcto es una odisea complicadísima, demasiadas mentes haciendo sinapsis al mismo tiempo o incluso careciendo de esa importante función y para lograr una efectividad máxima se tiene que vigilarlos de cerca.Por ejemplo, la presencia del personal de atención al cliente era sin duda un factor que distraía notablemente ¿Cómo solucionarlo? Pues siendo más flexible con la hora de almuerzo, la misma ya no tenía por qué ser tomada completa, sino que se podía fraccionar, de esa manera podían aprovechar el auxiliar de mejores maneras para charlar con sus compañeros o en el caso de Fernando, amiga, misma que tenía una pareja, pero me he dado cuenta de que eso es poco importante cuando lo que se busca es diversión. Pensar en soluciones, en eso básicamente se basaba mi trabajo, en otras palabras, en manifestar la verdadera inteligenci
Después de eso me enfoque en mi equipo de ventas, los números estaban de maravilla, apuntaban con una proyección alucinante al cien por ciento de las ventas, pero por alguna razón los mismos se atoraron en el noventa y cinco por ciento, cuando el penúltimo día llego yo estaba muy ofuscado, logre que cerrara en noventa y ocho, pero subir dos puntos estaba complicado, el siguiente día solo la mitad contaría, pues al cortar la hora de las transferencia todo quedaría para el siguiente mes, supe entonces que tenía que hacer algo, me quede hasta tarde, llamando yo mismo a clientes que nunca contestaban sus teléfonos, la mayoría personas ocupadas que en el día no atendían. —¿Qué estás haciendo? —Consultó Olesia confundida —Ya el horario nocturno termino ¿Por qué sigues aquí? —Eso me despertó de mi letargo ¿Qué motivo tenia?—Los chicos, esos que están fuera del país, si no llego al cien serán despedidos —Mencioné con rabia.—Yo soy quien decide eso, si quieres me retracto, estoy cansa
Metido en una patrulla y llevado hasta una comisaria cercana, al mismo tiempo que podía escuchar sus carcajadas contentas, creyendo que se llevarían el beneplácito de ser los primeros en capturarme, eso solo podía significar una cosa, era un pez gordo, de lo contrario sus celebraciones serian nimias, en mi celda contigua estaban unos malhechores, ladrones y conductores ebrios, estos no se veían orgullosos por su captura, conmigo era totalmente distinto.Tras una hora aproximadamente esperando una resolución escuche como llego un investigador al sitio, este se me quedo mirando de manera fija, les consulto si me habían ofrecido mi llamada y estos indicaron que me negué en rotundo a efectuarla, primeramente necesitaba más detalles, ya después pondría toda la carne en el asador, era curioso como pensaba en comunicarme con Olesia en lugar de hacerlo con mi madre, quizás porque sabía que ella traería hasta el ejército, desconocía que tuviera contactos, pero de algún lado lo sacarían. Consci
La noche fue un asco, solo podía moverme de un lado a otro sin conciliar el sueño, pensando en todo lo que había vivido hasta ese justo punto, donde celebraba con mi equipo un triunfo magnifico ¿Cómo era esto posible? ¿Quién podría haber actuado con tanta crueldad? ¿Qué accionista estaría inmiscuido en esta tremenda patraña? Todo eso rondo por mi mente, mientras cabeceaba sin cesar, hasta que el sueño finalmente me venció, dándome un respiro del estrés y la agonía de unas pocas horas. —Liam… Liam… —Escuchaba una voz que me llamaba resonante —Abran esa cosa, tengo que hablar con él, soy su abogado —Solicitó el tipo con un tono paciente y calmado, ganándose unas risas que este tomo con humor.Me reincorporé todo lo rápido que pude, golpeándome con la parte de arriba de la litera, la cual no estaba ocupada por nadie, tenía un dolor en la espalda y el cuello, sumado a un calambre que se apodero de mis piernas, cuando la fatiga paso finalmente me pude poner de pie, al mismo tiempo qu
Mi abogado venia todos los días a visitarme, por lo que su presencia no era indicativa de nada, poco a poco fue ganándose la confianza de todos los policías, hasta sentarse a comer con ellos, me di cuenta que esa política influyo muchísimo en el camino de la liberación. Recordé siempre eso, sentarse con el enemigo puede ser a veces la vía más fácil para obtener la victoria.Cuando estaba a punto de cumplir una semana en ese sitio, donde era incapaz de acostumbrarme a las duchas compartidas, las comidas precalentadas, las papillas y la cama tan rígida que dormir en ella o en el suelo era indiferente, en ese preciso momento llego Olesia, sus ojos llenos de esperanza y felicidad eran las puertas del Valhala, me acerque a la reja con desesperación, al mismo tiempo que el oficial me solicitaba que me quitara para abrirla.El tacto de su piel en forma de un abrazo, su olor era gloria y mi abogado estrechándome la mano, no sabía a quién amaba más, si a esa mujer o a ese hombre que me daba la
A horas de la madrugada me puse de pie, vi a los lados y me dirigí al baño, al salir me topé con mi madre, quien estaba tomando café en la sala fui a saludarla cuando note que Dante se encontraba a su lado, estaba conversando algo, solo que no entendía muy bien el que, me aproxime un poco para intentar recibir la información de manera más nítida.—Eso que hicimos no puede repetirse —Musitó mi progenitora con un tono de nerviosismo.—¿Acaso no te gusto? —Consultó el informático de manera extraña.—No es cuestión de eso, es que no estuvo bien —Expresó avergonzada.—Bien o mal, esos son términos sociales, más que todo culturales, lo importante es lo que disfrutamos —Incitó este de manera curiosa.—Es solo que si él se llega a enterar… —Antes de que pudiera revelar mayor información una voz corto mi trabajo de investigación.—¡Buenas! —Exclamó a mi lado mi abuelo, causando que todos nos asustáramos.—Hola —Saludé recuperando la compostura.—Liam, papá —Comunicó mi mamá fingiendo que no oc
Volver a las oficinas de Litium fue un golpe duro de realidad para mí, después de que me dejaron en una posición tan débil tenía que asumir la capacidad para liderar una vez más, veía a mis alrededores con un pánico atroz y aferrándome a mi amada conseguía la voluntad que me hacía falta. Ponía un pie seguido del otro, prácticamente movido por el ímpetu de mis compañeros, después de todo no estaba solo, Marjorie, Armando y mi hermano Dante, todos estaban conmigo para fortalecerme en ese aciago camino, donde lo único seguro es que al finalizar el día una persona tendría que irse a la cárcel, ya fuera por poco o largo rato.Se citó una reunión de emergencia con la junta directiva, donde se pondría las evidencias al segundo y se evaluaría la situación, todos los presentes lo sabían, solo que no estaban al tanto de hasta qué grado y Sonia no se lo esperaba para nada, ella yacía conectada en el área de ventas, como si nada ocurriera, mientras que nosotros portábamos toda la evidencia que la