A un día de nuestro matrimonio la locura comenzó a tener mucha más intensidad, temprano recibimos a los periodistas que sentían mucha curiosidad sobre detalles personales lo que me puso bastante nerviosa, pues entre los asistentes hania uno hablaba perfectamente el inglés y otro español porque era corresponsal para un periódico de Madrid, no podía retractarme porque resultaría sospechoso pero no dejaba de pensar en las consecuencias.

—Díganos señorita, ¿Cómo conoció a su prometido?—, una vez escuche que si vas a mentir debe ser lo más cercano a la realidad para que no se te note la falsa así que intente seguir esa línea.

—Estaba tomando una copa con mi amiga en un bar y tropecé con él y lamentablemente se lo tiré encima, estaba muy apenada, primera vez que me sucede algo así.

—¿Y cuando supo que era amor?

—Desde que nos conocimos sentí que era amor a primera vista, pero claro con el tiempo se ha ido fortaleciendo y hoy por hoy estoy tan segura que no se como he podido vivir sin él.

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