La DOE es abastecida con dos microchips, uno se encarga de definir y perfeccionar tus habilidades, el cual es el que estoy usando yo ahora. El que me pusieron para ir a la misión que acabo de concluir con éxito. Básicamente se encarga de hacerte aprender en cuestión de segundos todo lo necesario para desenvolverte en la misión. Mi hermana, Seyra, sabe español, pero yo no, y como mi encargo era capturar a uno de los cabecillas de los trece cárteles mexicanos y allá hablan español, tuvieron que colocarme el chip, el cual ya el equipo de expertos en el área de cómputo junto con los científicos adecuados habían preparado y estructurado para m; por ende, una vez con él puesto, ya sabía hablar, no solo español, sino que también tenía el típico acento de ese país.
El otro chip tiene la función de adueñarse de tu sistema, de tu consciencia, tu mente, todo tu ser, tú. Te conviertes en alguien que no eres, metiéndote tanto en el personaje que te olvidas de que eres tú. Ya cuando regresas en sí, te das cuenta de que lo recuerdas todo, absolutamente todo, pero no sientes nada. No te afecta lo que sea que haya ocurrido en la misión a la que fuiste debido a que tu cerebro crea una gran capa protectora donde te hace creer que lo vivió alguien más, no tú.
Así es siempre, porque ellos se encargan de que así lo sea antes de partir a cada trabajo que nos toca. La DOE no deja cabos sueltos y es la única organización secreta de las seis que hay en este mundo, que se encarga de separar lo personal con lo laboral. Nos someten a una serie de pruebas antes de enviarnos a hacer algún encargo y luego de haber terminado esa encomienda. Hasta ahora no ha habido fallos, los resultados son complejos y completos, nada se ha salido de control.
Pero, hay que tener en cuenta de que la pérdida de consciencia y el olvidar o no sentir nada cuando acabe la misión solo ocurre si se usa ese segundo chip, con el primer chip eres muy consciente y susceptible a quedar expuesto a todo tipo de emociones que debes controlar por ti mismo. Lo único de lo que se encarga es de ampliar, mejorar y fortalecer tus habilidades, incluso las que no tienes, y es justo el que me habían colocado.
Estos chips son irrastreables, pues su propósito no es con fines expiatorios.
Al entrar al área de laboratorios me acuestan en una camilla y me comienzan a suministrar un suero y a quitar el microchip del centro de la plantilla de mi pie izquierdo donde siempre la colocan.
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—Hace una hora me llamó Erick —es lo primero que dice Seyra en cuanto me ve llegar —. Me contó que se casarían.
—Por lo menos salúdame, dime que me extrañaste —ironizo.
—No estoy para tus mierdas —aclara.
—Eres tan defectuosa, digo afectuosa —bromeo y la veo bufar y removerse en el mueble donde se encuentra sentada con miles de hojas esparcidas a su alrededor mientras busca algo —. ¿Todo bien?
—Mañana debo irme, me asignaron un caso.
—¿Es hombre? ¿Guapo?, porque el imbécil que me asignaron era un viejo intrépido que no paraba de morbosearme.
—Asqueroso —arruga su nariz en repulsión mientras toma una carpeta amarilla y hace anotaciones.
—Últimamente no nos tocan misiones juntas, es como si...
—Como si lo hicieran a propósito —concluye ella por mí, como casi siempre.
—¿De verdad lo crees?
—Hoy mamá me volvió a contar la historia... —ella posa sus ojos azules idénticos a los míos en mí —. Otra vez contó algo que antes no nos habían dicho y cambió algunas cosas del relato.
—Mamá está mal, perdió la memoria en la última misión que tuvo —trato de hacerla entrar en razón —. Es obvio que va a decir incoherencias.
—No son incoherencias y no perdió la memoria, solo desvaría de vez en cuando...
—¿Cómo lo sabes? —ella simplemente traga saliva con fuerza antes de suspirar y volver a lo suyo.
Podrán pasar todos los años del mundo, pero jamás me dejaré de asombrar por el parecido de ambas.
—¿Qué es lo que buscas con exactitud? —pregunto, dejando mis cosas sobre la mesa y acercándome a ella y revisando los archivos que tiene cerca.
—Debilidades, necesito debilidades. El hombre es un maldito al que le gusta ver en vivo y en directo como otras personas tienen sexo, pero él no lo hace con cualquiera. Es muy desconfiado y difícil de impresionar, justo lo que necesito que suceda. Necesito impresionarlo, que se deslumbre conmigo o con alguna cosa que yo haga.
Abro otra carpeta y miro el nombre del país al que mi hermana irá.
—Joder... ¿La Mafia Albanesa? ¿Irás a Albania? —pregunto lo obvio y supongo que por eso no responde —. ¿Por qué no nos asignaron esto a las dos? Es una oportunidad de oro para...
—No te preocupes —ella me mira con complicidad —. Te mantendré al tanto de la misión para que tomes medidas desde aquí si algo me pasa...
Extrañaba tanto sus palabras claves.
—¿Cuál es su nombre y tu misión? —cambio de tema, la DOE tiene a todos sus agentes monitoreados y saben todo lo que hablan, hacen o donde se encuentran. Es espeluznante, ya que no sabemos cómo logran infiltrarse en la vida de nosotros.
—Básicamente hacer lo mismo que hiciste tú con Donovo —se encoge de hombros y me pasa la carpeta de color rojo —. Aquí están sus datos.
Al abrirla, lo primera que aparece en grande es la imagen de un hombre que bien podría ser digno de fotografías impresas en las revistas más importantes del mundo.
Datos:
Nombre: Ecain Akerson.
Edad: 29 años.
Nacionalidad: Albanés.
Pareja: Geisha Çela
Me es inevitable no leer la reseña: —Jefe de la Mafia Albanesa especializada principalmente en el tráfico de joyas preciosas y reliquias de todo tipo. Tiene nexos en el Bajo Mundo y es el principal distribuidor de las drogas de otros mafiosos a cualquier rincón del mundo —¿Bajo mundo? frunzo el ceño extrañada, pero no le doy importancia cuando caigo en cuenta de que este es el pez gordo que mi hermana necesita para ser jefe principal. Doy un silbido que llama la atención de Seyra —. Si atrapas a este y lo haces darte el nombre de todos los mafiosos a los que les trafica, tú, querida hermana, serás grande.
—Solo lo encarcelaré y los demás que se encarguen de sacarle los nombres necesarios para que en este mísero mundo dejen de haber escorias..., o que las hayan, pero en pocas cantidades. Son como cucarachas que por más que las extermines siempre aparecen o queda alguna viva y se vuelve a reproducir. Es un círculo que nunca acaba.
—Sí, antes de que lo entregues, solo quería decirte... —hago una pausa dramática —, fóllatelo por mí —ella rueda sus ojos y sigue buscando lo que sea que está buscando en esas carpetas.
—¡Lo tengo! —una sonrisa traviesa y maliciosa se asoma en sus labios —Ecain Akerson, voy por ti.
16 de diciembre de 2020.Monasterio de Tekija - Bosnia y Herzegovina.País capturado por la Mafia Albanesa hace cuatro años.Ecain Akerson—Señor, hemos conseguido una mansión en Albania para su regreso.—¿Dónde?—Villa Garden, tiene todas las características que usted pidió, la señorita Geisha se ha encargado de eso —me avisa —. Ella miró las fotos de cada lugar que le mostré, más no sabe dónde queda cada una.Sinceramente Geisha puede irse a la mierda, no veo la hora de deshacerme de ella.—Perfecto, preparen todo para partir hacia allá, nos quedaremos estas dos semanas mientras ocurren las fiestas, en año nuevo regresaremos aquí —ordeno, pero veo que aún no se mueve y eso me hace irritar —. ¿Qué estás esperando? ¿Un maldito autógrafo?—Es que no sé cómo decirte esto, señor.—Vetëm thuaj atë që ke për të thënë — > le suelto en albanés. Ocurre cuando no puedo controlar mis ganas de mandar a la gente a la mierda.La mayoría de los hombres que dan la v
A mí nadie me va a agradecer por querer seguir con el legado familiar y exterminar a las ratas. Mi familia lleva años haciéndolo y nunca nadie se ha enterado de ello, todo lo contrario, han corrido rumores crueles sobre los Akerson y las personas los han creído. Así es como les pagan a seres que no han hecho más que mantenerlos a salvo.Pero les tocó el peor sucesor. El que ya no le importa una mierda y no hace más que aparentar ante la sociedad. Ese que le dio a su familia una salida, diciéndoles que se haría pasar por narcotraficante para así asesinar a quienes quisieran sin tener que rendir cuenta o tener una razón en específico, pero lo que no saben, es que en realidad si me he vuelto uno. Soy eso que ellos tanto repudian. Solo que aún no me muestro. Estoy usando mi careta porque me va a encantar cuando llegue el momento de que esta verdaderamente caiga y tengan que tragarse sus palabras y rendirse ante mí o simplemente declararse como enemigos y morir por mi mano empuñada en una
17 de diciembre de 2020.Estados Unidos: Los Ángeles, California.Seyra HolmströmLinnette estaba sentada afuera, en el patio trasero, siendo atendida por su sirvienta personal, mientras miraba hacia la nada y solamente abría su boca para recibir las cucharadas con sopas que le daba Stanisa. Yo nunca le hablo, ni siquiera me acerco o la visito. En ocasiones, como ahora, cada vez que estoy a nada de irme a una misión paso por su hogar y me quedo estática en el marco de la puerta intentando algún acercamiento, pero me es realmente difícil hacerlo. No puedo, no quiero. Y es por ello que volteo y luego de haberla visto por tan solo segundos, me voy.Eso es todo. Nuestra relación se fue a la mierda desde que yo era tan solo una niña. Desde que eligió querer a mi hermana y despreciarme a mí. No envidio su relación. Me hubiese conformado con que me hiciera a un lado solamente, pero no fue así. Todo lo que me tocó vivir influyó en el hecho de que en el presente no quiera siquiera mirarla a
Sigo rumbo a mi oficina, por pertenecer al nivel cinco en todas las categorías te dan una, es pequeña, pero oficina, al fin y al cabo. Ya no deseaba estar en un simple cubículo como lo está mi hermana a quien solo le importa subsistir y no superarse. No es reproche. Si ella se siente bien de esa manera, no hay problema alguno. Es su vida.—Buenos días, estaba esperándote —exclama Lund levantándose del pequeño mueble que está a un costado y guardando su celular con el que se estaba distrayendo mientras esperaba mi aparición.—Buen día, jefe, perdón si estoy llegando tarde —él sonríe y niega con su cabeza.—Podrías llegar tarde las veces que quisieras y serías la única en ser perdonada por eso... —me dice, acercándose a mí. Yo me quedo quieta, esperando a su movimiento, y ocurre: él coloca sus brazos en mis hombros como quien no quiere la cosa y se acerca aspirando el aroma de mi cuello y haciéndome sentir incómoda, pero no me aparto. Deja un pequeño beso como saludo en mi mejilla, pero
20 de diciembre de 2020.Condado de Shkodër, noroeste de Albania.Seyra HolmströmTermino de pintar mis labios de color rojo pasión mientras me miro fijamente al espejo verificando que todo esté en su lugar, mis ojos —ahora de color marrones debido a los lentes de contacto que me han puesto para adentrarme en mi papel— me miran con atención: el maquillaje está intacto, la joyería combina a la perfección con mi piel bronceada, mi cabello suelto y rizado en perfectas ondas caen por delante de mis senos cubiertos por la parte delantera de mi ajustado vestido color vinotinto y también se esparcen por mi espalda llegando casi a mis caderas.Ahora soy rubia, me llamo Carol Bromosa y soy la hija del Glavnyy Glavar' de Rusia.Este es el momento en el que pongo a juego mi intelecto. Han tomado medidas desesperadas y aun no entiendo por qué.Cuando me estaban preparando para mi personaje, todos estaban más silenciosos de lo normal. Antes, cuando me tocaba alguna misión, mientras se encargaban d
—En primer lugar, no se llama Albert, se llama Artyom, y, en segundo lugar, jamás digas que mi padre es ocurrente, es mucho más que eso y los súbditos deben tratarnos como reyes y más respeto, ahora, si me disculpas, debo entrar, porque si no hago los negocios que él me envió a hacer por tu culpa, las pagarás —sin darle tiempo a treguas entro al lugar, moviendo mis caderas de lado a lado con cada paso que doy y acarreando hasta la mirada de las féminas que desean ser como yo.Sonrío.La DOE se encargó de infiltrarse en el sistema y cambiar los datos de la Mafia Rusa. Pudieron incautar la negación a asistir de parte de dicha mafia y fue cuando trazaron este plan donde en vez de negarse, aceptaban. Solo que no era la verdadera Mafia Rusa la que vendría.Voy directo hacia la barra donde un par de chicos se encarga de preparar bebidas y pido que me den lo mejor que tengan, el coqueteo de parte de ellos no puede faltar. Cuando tengo mi bebida conmigo doy un pequeño trago y volteo escaneand
20 de diciembre de 2020.Condado de Shkodër, noroeste de Albania.Mansión Principal a las orillas del lago Shkodra situado en la frontera entre Montenegro y Albania.Seyra HolmströmSu mano derecha viaja hacia mi cuello y me atrae más hacia él, asegurándose de que no quede ningún espacio de por medio. Con su mano izquierda baja las yemas de sus dedos en una sutil caricia hasta posarla en mi barbilla, donde esta no cesa. Sus labios se mueven a la par de los míos. Con tan solo el primer choque de estos ya me había hecho estremecer y ahora que estamos profundizando el beso, me está haciendo arder por dentro.Se siente a adicción.Su lengua toca mi labio inferior y suspiro, la mano que tenía en mi nuca baja con suma lentitud hasta detenerse en mi espalda, donde me toma de manera posesiva, como si fuese suya, como si me declarara suya. Y entonces tantea con sus dedos, hasta apretar un poco mi cadera y eso me prende en seguida.Poso mis manos en sus brazos y suspiro en medio del beso al sen
—Los Soprano incautaron nuestro armamento. Incautaron la droga de los franceses y tus diamantes —le aclaro —. Mi padre tiene a la esposa de su líder, los tenemos agarrados por los huevos y los estamos haciendo pagar todo y con intereses incluidos, pero, así como ellos nos traicionaron a nosotros robándonos nuestras mercancías, a ellos también le hicieron una mala jugada. El Gobierno Albanés se las incautó antes de que pudieron lograr seguirlas trasladando a otros países —al relatar aquello lo veo negar con una pequeña sonrisa ladeada en su rostro, es más que obvio que el mismo tiene toda la mercancía pues toda la policía de este país, e incluso el gobierno y presidencia, le rinden cuentas a él —. Así que, en pocas palabras, tú eres quien tiene todo y eso prueba que nosotros obviamente no te hemos hecho ninguna jugada.—Princesa, sí, es cierto, el Gobierno Albanés incautó todo, así como también es cierto que todo lo tengo yo. Me encantan los finales felices —dice, antes de tomar otro p