La mascarilla en mi cara tiene que ser retirada y por suerte solo fueron treinta minutos de desconexión a la realidad, porque si no, toda la mascarilla fuera sido embarrada en la almohada. Tomo camino al baño y retiro con abundante agua. Ya sin nada en mi rostro seco mi cara y me miro fijo en el espejo.
¿Por qué dije su nombre? ¿Por qué tuve un sueño húmedo? ¿Por qué dije su maldito nombre?
Apago la luz y vuelvo a la cama, apago la tv y me enrollo bajo las sabanas, mi cabeza es un lio y debo espantar toda grosería que tenga que ver con ese hombre.
¿Por qué no dije Chris Evans o Matt Bomer? ¡Dios, Frida!
...
–Ni siquiera me tomare la jodida molestia de preguntar porque llevas esas ojeras de muerte.
–Por favor y gracias, no estoy para explicaciones.
Voy junto a Mark, este vino por mí a la entrada del HH –House Hunther–. No sé dónde m****a tenía que dirigirme y la verdad es que por la jodida falta de sueño no tengo ánimos de lidiar con nadie y mucho menos aprenderme los lugares de este enorme edificio. Me tomo un sorbo de café y continuo caminando a su lado, varias personas nos pasan por los lados, solo espero que Mark no tenga que presentarme a nadie, es lo menos que deseo.
Abre un par de puerta con todo lo dramático que es, allí el sonido de la música fuerte nos golpea durísimo y yo me doy otro sorbo de mi café, porque la cabeza me va a explotar en mil pedazos. Hay un montón de chicas esperando por que las arreglen, la escenografía que ha creado Mark es alucinante, el condenado tiene un bendecida imaginación y lo que más llama mi atención es lo escarchado que se ve todo, es increíble.
– ¡Por Dios! ¡Eres un jodido genio!
– ¡Frida mi amor! –volteo a mi lado, encuentro a Balián venir hasta mi al ritmo de 24k Magic de Bruno Mars, no puedo evitar sonreír ante sus movimientos sexys, bendito Dios, ¿Qué estoy pagando yo? –Bonjour Mademoiselle.
–Bonjour Monsieur –le hago una corta reverencia y sonrió. –Cuanto animo ¿No? –este me da un beso en cada mejilla y al alejarse lo detallo, es tan diferente a Bajhor, su vestimenta es más casual, jeans oscuros y rasgados en su pierna derecha, una camisa tres cuarta color vino y unos deportivos que hacen juego con su camisa.
–Me gusta la música al momento de tomar fotos, me dan buen ánimo y se me pasa muy rápido los minutos, ¿Me sorprenderás hoy?
–Por supuesto que sí.
De pronto me altero un poco al escuchar el gritillo de alguien detrás de mí, Balián oculta sus ganas de reír y al voltear observo venir a una chica de cabello lacio hasta los hombros y con mechones azules, es un poco más baja que yo y sus ojos ambarinos tan expresivos.
– ¡Que placer conocerte cariño! –me da un corto abrazo y se aleja. –Soy Winny, gracias por tu trabajo la otra vez, prometo ser buena compañera.
–Eso espero –escucho la voz de mi primo. –Mataría por Frida, ya lo saben.
Sonrió ante las palabras de mi primo y le sonrió con cariño a Winny, esta lleva aparatos odontológicos y la verdad es que tiene una sonrisa muy bonita, con ellos o sin ellos.
– ¿Qué te parece si nos ponemos manos a la obra?
– ¡Por supuesto!
Mark y Balián nos dicen que es lo que más quieren a la hora del maquillaje y peinados, nada exagerado, pero que sea muy llamativo, las chicas van cambiándose a su vestimenta para las fotografías y debo ser sincera en este momento, ¡Que preciosos cuerpos que se gastan estas chicas! Tampoco tan flacas y mucho menos gordas, tienen cuerpos preciosos y son muy hermosas.
Winny toma a una y yo también, comenzamos hacer lo nuestro y ambas nos ayudamos. Algunas cosas no las sabe Winny y le ayudo y así viceversa, tiene un gran desenvolvimiento a la hora de arreglar sus cabellos, ni ella opina de lo mío y yo mucho lo de ella, está haciendo un gran trabajo y yo también.
Las dos primeras están listas después de unos largos minutos y Mark grita de emoción al ver el resultado, ni yo me detengo y ni Winny tiene pensado hacerlo, cada uno de los que estamos acá en el estudio hace muy bien su trabajo, solo espero que a don jefecito culito sexy le gusten las fotos, eso es otro detalle
_
Gracias al trabajo todo el enojo por mi falta de sueño se esfumo. Hace unos minutos que terminamos con el último par y ya van casi tres horas de sesión, y debo decirlo, Balián da todo de él al igual que Mark. Observo a mi primo tan complacido con su escenografía y Winny y yo estamos satisfechas con el maquillaje y peinado de las chicas.
Las puertas se abren después de un largo rato de trabajo, Balián no se detiene y Mark pasa inmediatamente acercarse a Bajhor, quien va junto a una mujer de vestimenta muy ejecutiva, su cabello platinado y sus labios de un color naranja, escucho a mi compañera bufar y volteo a verla
– ¿Pasa algo?
–Es Fiona, digo, Vahiola, nuestro dolor de culo, nuestras jodidas hemorroides en el trabajo.
– ¿Tan mala es?
–Ja, ya lo veras.
La veo acercarse al cabo de unos minutos hasta donde me encuentro con Winny, esta se coloca de pie, yo soy todo lo contrario, la observo desde mi lugar, ni que ella fuera el mismísimo presidente del país para yo estar colocándome de pie, que m****a.
– ¿Qué crees que hiciste con el maquillaje? –le miro fijo, observo que Mark aun esta con Bajhor, ambos hablan de lo más normal. –Es un completo asco, lo siento Winny pero tendrán que empezar nuevamente.
– ¡¿Disculpa?! –me coloco de pie y le miro fijo. – ¿Cómo que empezar nuevamente?
– ¿Tú quién eres? –enarca una ceja y yo le miro dijo.
–Frida Kayenston, una de las nuevas estilistas del House, ¿Tú quién eres?
–Vahiola Michaels, mano derecha de Bajhor en el HH.
–Mmm, felicidades por tu puesto, supongo –me cruzo de brazos y le observo de pie a cabeza. –Supongo que tu trabajo es la administración y llevar las agendas de sus cenas y reuniones, ¿No?
–No exactamente, eso le pertenece a su secretaria, lo mío más que nada es...
–Denigrar el trabajo de dos estilistas que saben lo que hacen, ¿No? –esta me mira intenta hablar, pero no la dejo. –Tú no puedes venir aquí y decirnos que nuestro trabajo es un asco, y mucho menos pedirnos después de casi tres jodidas horas que lo hagamos nuevamente –la música se termina y yo no tengo ganas de callarme. –Tu trabajo es con el señor Hunther, no con los del estudio, tú no puedes venir agitando tu cabello platinado y ordenando, esas chicas tienen vida, igual nosotras, igual Mark, incluso Balián, y para mí, el trabajo está limpio y muy fresco para la sesión.
–Mira nadas más, la gorda tiene carácter –sonrió de lado y niego ante ridículo comentario. –Si a mí me da la jodida gana las pongo hacer todo desde el principio, ¿Te queda claro?
–No, no me queda claro, porque no puedes exigir algo que ni siquiera tienes conocimiento, no sé si te has visto en el espejo, pero una de tus cejas está más gruesa que la otra –esta inmediatamente intenta cubrir su rostro. –Y el labial naranja no te combinada para nada con tu traje color verde agua, diez puntos menos, ¿Continuo?
Observo a Bajhor Hunther a unos cuantos pasos de distancia, Mark está a su lado, intentando reprimir una sonrisa, yo vuelvo a mirar a la platinada y le sonrió.
–Respetare tu trabajo, si tú respetas el mío y el de Winny, recibiré ordenes exclusivamente del fotógrafo y quien hace la escenografía, ah y también de mi jefecito Bajhor –vuelvo a mirar a esos ojitos claros y espabilo para no pensar otras cosas. –Así que, ¿Lo tomas o lo dejas?
–Altanera.
–Gracias –sonrió y me cruzo de brazos. –Tic, tac, tic, tac.
–Lo tomo –dice entre dientes y se da media vuelta, pasando entre Bajhor y mi primo.
– ¡La gorda gana, honey! –esta me mira con tanto odio y continua su rumbo. –Realmente sus cejas estaban bien maquilladas, lo siento.
–Déjennos solos.
La voz de Bajhor de un modo u otro me eriza y el repentino sueño húmedo de anoche me ataca de lleno la mentecita. Winny y Mark se van junto a los demás y yo me quedo con el imponente jefe.
– ¿No puedes mantener tu boquita cerrada?
–Ciérramela tu –digo neutral, este sonríe de lado.
– ¿Y cómo haría eso?
–No lo sé, dime tú, porque no ha llegado la persona adecuada que me haga callar, así que, ¿Lo tomas o lo dejas? –este sonríe de lado, y se acerca poquito a poco.
–Tomo el reto –enarco una de mis cejas y este sonríe de boca cerrada. –Pedazo de altanera y grosera.
–Gracias señor.
–De nada Frida –se aleja un par de pasos y sonríe. –Sera divertido trabajar contigo.
–Si usted lo dice.
–Pues lo digo –de pronto pasa su jodido dedo pulgar en su jodido labio inferior y a mí se me moja, ¡Se me moja la boca! –Te quiero en mi oficina en cuanto termines acá, tenemos que hablar de tu paga y beneficios.
–Está bien –sonrió y este asiente, se da media vuelta da un par de pasos, pero de pronto se frena y vuelve hasta mí.
–Por cierto, sigue defendiendo tu trabajo, lo hicieron muy bien, felicidades, leoncita.
Y aquí vamos nuevamente, este hombre se marcha dejándome sin habla y mi vista vuelve a su culito, siento que la tensión se me baja y necesito darle un ligero mordisco a su culo. No soy el tipo de mujer que le gusta a Bajhor, pero él si es el tipo de hombre que quiero que me haga de todo.
– ¡Maldita sea don papi rico! –susurro solo para mí. –Tu me estas volviendo loca sexualmente, condenado.
Tomo una larga bocanada de aire y doy tres golpecitos a la puerta de Bajhor, su secretaria no estaba en su puesto así que me tome el atrevimiento de yo misma ir a la oficina. Él mismo me dijo que me esperaba, pues acá estoy, solo espero porque me de aviso y yo entrar.Observo a mis lados es obvio que este piso solo se encuentra la oficina de dicho hombre, lo que llama mucho mi atención y no note el día de ayer, es los jarrones con distintos tipos de plumas dentro de ellas.¿Originalidad? ¡Por supuesto! En vez de flores, plumas y la verdad es que es muy llamativo y sobre todo muy elegante. Vuelvo a tocar tres veces más y en unos tres segundos la puerta se abre, nuevamente está allí, delante de mí, mi adonis de ojos preciosos, noto que está en una llamada y en silencio paso a su lado, este se encarga de cerrar la puerta y continua su llamada.– Se suposa que ella no ha de tornar per a aquesta temporada, se suposa que ha d'e
– Es increíble como tu pececita tiene más vida amorosa que tú.–¡Cállate! –le lanzo un trozo de pepino a Mark, este ríe. – ¿No son dulces? –observo en la pecera como Fifi nada con Firulais, si, Mark le puso nombre de perro al pececito, pero no tengo voz para reclamo, él lo eligió. –Ella necesitaba compañía, ¿Crees que me hará abuela?–¡Por Dios Frida! –volteo a ver a mi primo, sonrió, este no deja de carcajearse por mis cosas. –Ves por qué te amo tanto, tienes cada cosa, carajo.–Por eso es que nadie puede mantener una relación conmigo, no soporta mi humor, ¿Recuerdas al rubio de hace seis meses? No soporto que me burlara de su voz chillona cuando discutíamos, parecía que había aspirado helio –comenzamos a reír. –Por Dios, cuando teníamos sexo era tan gracioso, soltaba un pitido, maldita sea, que mala suerte tengo.– Oh Dios, ¿Recuerdas al moreno de cuadritos en el estómago? –lo señalo y reímos antes de que él
Tengo un largo rato con Winny ideando todo acerca del evento que tendremos en una semana, desde el maquillaje hasta el peinado, dado que las chicas solo tendrán que concentrarse en cambiar su vestuario cada que bajan de la pasarela. Winny y yo tenemos que tener un solo maquillaje y un peinado para todo el evento y tiene que ir con lo que modelaran ese día.Estamos tan concentradas viendo todo lo que estará para ese día y al menos se me ha esfumado de la mente el acoso estúpido que me hizo el desgraciado de Bajhor. Las ganas de llorar y el nudo en mi garganta lo eche a un lado porque simple y sencillamente yo no estoy para ridiculeces con el engreído de mi jefe.La voz de Mark es música para mis oídos, ambas lo vemos venir con vasos de café y donas, mi estómago grita aleluya, y de inmediato coloco a un lado las cosas para concentrarme en esto tan delicioso que nos ha traído mi primo.–Pensé e imaginé que estaba con lo
En este momento estoy con un caramelo de miel en mi boca, mientras observo a Mark en un ir y venir en mi cocina. Estuve un largo rato viendo videos de maquillajes en las redes y ahora me encuentro observando como el rubiete delante de mí se obstina cuando algo no le sale como él quiere.–Debes calentar la leche y luego aplicar esa cosa que has batido aparte, así decía la receta.– ¡No me estreses!–¡Tú te estresas solo! ¡Hello! –este voltea a verme.–Hazlo tú.– ¡Mark! No quiero cocinar.–Por fis, por fis –revoloteo los ojos y bajo del taburete y rodeo la encimera.–¿Por qué simplemente no le sirves un tazón de comida para perros? Le ha de sentar bien.–Frida...–Ok, ok lo siento, sé que no debo ser cruel con Leo, solo que no me cae bien, intento, pero no puedo.–Lo se Frida, y estoy agradecido contigo por
– ¿Qué te ha dicho en cuanto le entregaste el paquete? –el pelinegro sirve un vaso de su licor favorito y se da un sorbo de este.–Pregunto por quién había sido enviado, no le he dicho tal cual usted me ordeno –al voltear observa a su leal trabajador de tantos años, Miguel. –El jet está preparado señor, debemos ir tomando camino al aeropuerto en unos 20 minutos.En ese momento el pelinegro se debatía entre marcharse o simplemente quedarse en Nueva York, pues algo, o mejor dicho alguien se le entremetió entre ceja y ceja y se divierte de tan solo verle enojar.–Juro que, si al llegar no me tienen una buena excusa con respecto al escape de Varsha, despediré a todos los de esa casa –se da un largo sorbo sin dejar ni una gota en su vaso, le señala la puerta a Miguel, aquel hombre alto y fornido que está siempre a su disposición se marcha dejándolo solo en el estudio de su pent–house.
En este momento con todo concluido observo a las chicas con sus maquillajes y peinados, Winny está igual de sonriente que yo, y las chicas se encuentran felices por el resultado. El evento está a solo minutos de comenzar y mi compañera y yo tenemos esos pocos minutos para arreglarnos con prisa. Nos alejamos de todos dejándolo en manos de mi primo y yo con prisa entro al baño que esta de este lado del gran salón.Ah sí, porque de paso, la empresa tiene su propio espacio para eventos y no es nada sencillo, es extravagante y realmente se puede hasta hacer una fiesta de boda aquí. Me lo pensé mucho, el ponerme el vestido que me fue enviado, hasta el momento no recibí ninguna respuesta ¿Y lo peor? Bajhor lo leyó, el muy descarado me dejo en visto y yo pase a no darle importancia.Utilizare el vestido porque mi ojitos bellos y problema mental me dio donde más me hiere, mi adoración por los vestidos y todo lo
La respiración esta tan, pero tan dificultosa que puede que en menos de cinco minutos yo termine con un paro cardiaco o algo más sencillo, desmayada.La mano de Bajhor me apretuja el culo y yo no puedo, simplemente no puedo evitar morder mi labio inferior debido a lo delicioso que se siente. Estoy rígida, soy incapaz de moverme un centímetro, el condenado ríe por lo bajito, ¿A qué mierdas está jugando? ¿Qué es esto? ¿Estoy soñando? No, no lo estoy, ¿Por qué lo sé? ¡Pues porque me está agarrando el culo de una magnifica manera!–Ven.– ¿Qué? ¿Qué? ¿Dónde? –se aleja un poco, yo aprovecho de bajar mi vestido, al verme, esos ojitos destellan un brillo, ese desgraciado brillo que no hace más que decirte, ¡Alerta, alerta, las bragas irán al piso! – &ique
No soy la única, no claro que no, hay muchos comiendo de las fresas y chocolates, ¿Quién no lo haría? Por Dios es chocolate, amargo, dulce, leche y de todos los tipos. Tomo uno en forma de esfera y al morderlo la crema de dentro es algo mentolado, gimoteo debido al sabor que este tiene y tomo uno más.– ¿Frida? –escucha la voz de una fémina, al darme media vuelta, mi masticar se reduce. –Hola, ¿Qué tal? –la llovizna Cardini, le sonrió ampliamente.–Descarada, ¿No crees? –esta sonríe y me mira fijo. – ¿Qué quieres? ¿La primicia? La no mojigata Frida Kayenston comiéndose toda la mesa de chocolates en el evento de los Hunther, ¿Eso quieres?–Frida, yo…–No me conoces, Grace, no tienes ni idea de quién soy, no tienes ningún maldito derecho de hab