— ¿¡Como que aún no saben nada de Black, qué mierda han estado haciendo en estas dos semanas entonces!? —grito airado a todos en la estación—. ¿¡Que han hecho en todo este tiempo!?

Todo es un completo desastre, desde que nos enteramos de lo sucedido. Karim y yo nos pusimos de una vez a dar órdenes para que lo busquen por todas partes. Cada uno por su parte, pero con el mismo fin; tratar de encontrar al imbécil de Black.

— ¡Es increíble como aparte de ustedes hay muchas más personas buscándolo y no logran encontrar una puta pista, lárguense de mi vista de una vez por todas!

Me siento inmediatamente sobre mi asiento, a la vez que me llevo las manos contra la cabeza, sintiendo un fulminante dolor de cabeza. El simple hecho de que ella me haya dicho que no me culpara me hizo sentir peor, ella no lo hizo con una mala intención sino con la mejor de las suyas.

«¿Cómo veré nuevamente a las chicas y la cara y les diré que no tengo nada?», golpe con fuerza mi escritorio, demostrando lo frustrad