Hola hola! Ahora si Kai ha perdido completamente la cabeza, ¿Cómo saldrá Naiara de esta? Los leo! Bso Kika
Layne —La ha llevado al lugar más recóndito del castillo...— —Así es... y estás sola, si acaso aparecen los soldados y esa dama, que creo que con su presencia empeora— me dice Dashi entre susurros. Había ido a la habitación de mi princesa como todas las noches para encontrarme con… nada. La habían movido de lugar, y lo que era aún peor... era a la única a la que había movido. A todas las demás damas las habían dejado en sus habitaciones con protección. Yo veía movimiento fuera del castillo y Mer decía, que varios poblados habían sido desocupados. Habían enfrentamientos, pero no había desencadenado una guerra ni batallas como tal. — No tengo la menor idea de qué es lo que sucede Dashi... pero creo que nos están engañando. He estado, lamentablemente, una buena cantidad de batallas como para saber que esta, no es una— — Creo que es solo una excusa para manipular a la princesa. Está sola, sin nada, le llevé su flor y la mariposa— me dice ella preocupada. — Has hecho bien Dash
DashiLa escena que acababa de ver era aterradora. La princesa se había quedado llorando mientras yo veía como le pegaban al caballero y se lo llevaban arrastrado prácticamente inconsciente. Esto era mucho peor de lo que imaginé. A ella la habían dejado vigilada, de tal manera que yo no podía siquiera salir de mi escondite en la única ventana para consolarla. Así que solo me quedaba hacer lo que había dicho Layne… enviar un mensaje a Mer que se esconda con los animales y con Rise. Ahora tenía que ser más cuidadosa que nunca andando por el castillo. El frío era algo a lo que todavía no me acostumbraba, pero igualmente andaba por los techos del castillo con rapidez, esperando no ser vista. Veía como las grandes aves se arremolinaban cerca de la torre, como si sintieran el dolor de la princesa. Me había partido el corazón verla así… amarrada, siendo tratada y ofendida como nunca imaginé. Fui a la parte de arriba donde me escondía con Rise y escribí el mensaje lo mejor que pude. Mi c
Layne Cuando me desperté, todo me dolía en el cuerpo y por un momento pensé que ya estaba del otro lado, viendo las estrellas si no fuera por la oscuridad que azotaba. Ni siquiera sé cómo me habían traído aquí, supongo que me habían lanzado sin ningún cuidado. Estaba boca abajo en lo que parecía ser una celda con paja y suciedad y me costó muchísimo dar la vuelta para reincorporarme. Creía no tener nada roto en mi cuerpo que me impidieran realmente entrar en acción. Y, sin embargo, todo lo que me dolía no podía dejar de pensar que mi princesa estaba sola y desamparada, amarrada, sola. Por primera vez en mi vida realmente tenía ganas de desesperarme y olvidar hasta mi último grado de esperanza. No había guardias en este encierro y solo alumbraba una pequeña ventana donde pareciera que se asomaba la luna. No sé cuánto tiempo había estado aquí, no sé cuándo vendrían por mí aun cuando Kai dijo que vendría a saldar cuentas conmigo. Francamente, preferiría que estuviera aquí dándome
DashiPienso que esto es mucho peor de lo que pensaba, y ahora siento que soy la única persona que puede intentar resolver lo que está sucediendo. Lo primero que hago es ir a la habitación de mi princesa y observo que está fuertemente vigilada, inclusive desde adentro y que se queda con ella la dama Briela que es una verdadera desgracia. —¡Y decían que eras una princesa, una verdadera hija de la noche y solo eres una mujer cualquiera!— le gritaba esa mujer desagradable y yo veía que la princesa se contenía. Yo podía sentir su resplandor de la luna, y pocas veces lo había sentido. También esa mujer parecía querer darle de esa bebida espantosa que la ponía débil, pero Naiara se oponía, tenía que guardar fuerzas para si tenía que enfrentarse al rey. Estaba en una situación imposible, pero antes de poder salvarla, tenía que buscar refuerzos.Afortunadamente, escuché un piar cerca y ahí venía mi cuervo, con un mensaje importante. Mer estaba oculta tal como le había dicho, a la espera de
Layne La esperanza puede hacer cosas grandiosas con nosotros. Saber que nos espera un destino cruel y terrible, cambia totalmente si creemos que al final del día, la luna nos acompañará. Las cosas nos saldrán bien, habrá una luz brillante en la oscuridad. Yo estaba muy golpeado, pero con lo que me había dado Dashi, y en especial con sus palabras... empezaba a mejorar. Y veía que no solamente eso sucedía conmigo, sino que la princesa Aixa también había cambiado su actitud. No me quería ni imaginar cuánto tiempo estaría ella aquí encerrada, esperando noticias de su esposo y de la gente que la apoyaba. Había sido encarcelada y apartada prácticamente por su propia familia y su pueblo. Pero también yo sabía que lo que tocaba ahora, era posiblemente uno de los momentos más decisivos de este emprendimiento que llevábamos. Había una dificultad más, y luego tendríamos que enfrentar a Kai. Pero saber que mi princesa iba a estar libre y segura... era lo único que necesitaba saber. —Prin
Naiara Sentía que la fuerza me había abandonado, mi caballero había sido golpeado tan salvajemente que yo imaginaba lo peor, aun cuando algo dentro de mí me decía que él era mucho más poderoso y que había sufrido batallas, peleas y todo tipo de cosas y había sobrevivido. Seguía amarrada como si fuese un animal en este cuarto, esperando noticias que no llegaban. La dama Briela venía a visitarme, pero su presencia era una molestia. —¡Eres una cualquiera! ¡Una descarada! ¡Más que una princesa pareces una vulgar esclava!— me gritaba. — Espero que el rey acabe contigo... que te ahorque con sus propias manos y se busque una mujer mejor. Una verdadera reina, una mujer que sea respetable, decente... no una mujerzuela como tú, ¡que ni siquiera quería cumplir sus deberes matrimoniales con él! ¿Quién habrá visto algo así?— decía ella y fue lo último que mencionó antes de cerrar la puerta. Parecía que, de alguna manera, ella creía que sí era digna para el rey. Que ella tenía todo lo sufic
LayneNos aproximamos por los pasillos, subiendo; yo sentía que mi cuerpo estaba en tal completa alerta que casi no percibía los dolores de los ataques que me había propinado él ya muerto consejero. Pero con todo y eso, me apoyaba en las paredes, iba con cuidado. —¿Ve algo caballero?— me preguntaba la princesa Aixa. Escuchamos un gran estruendo que debía venir seguramente de la puerta. Nos escondemos cuando pasan los soldados del rey. Mi objetivo es llegar hacia la torre de mi princesa,y poner a salvo a Aixa. Y ante todo esto temo que aparezca Kai. — No sé si adentro, pero creo qué sucede algo afuera...— y cuando encontramos una ventana y nos asomamos quedamos realmente impresionados. La puerta del castillo ha caído, y no solo hay soldados intentando entrar y gente nuestra, sino también de los Aldeanos y súbditos, la gente de Bhaltar. Supongo que solo con los insurgentes y nuestros soldados No se podría haber logrado, pero al haber más personas el poder era mucho mayor. Aixa sonre
NaiaraCuando me despierto siento que todo ha sido como una especie de sueño, como si nada hubiese sucedido, como si nada existió, pero de repente me levantaba en mi antigua habitación.Y no solo eso, hay una especie de cambio en el ambiente, las ventanas están abiertas y escucho las aves afuera. Hay cuervos en mi ventana y cuando intento levantarme siento un ligero dolor. — Creo que es mejor que te quedes acostada por un tiempo, necesitas descansar, Naiara...— lo veo llegar a él a mi lado. Mi señor, ¡Está bien! ¿Qué sucedió?Y todo me cae de repente: la lucha que parecía ocurrir, el capitán,Kai...Dashi... a luz. Mi caballero se ve extremadamente cansado. Parece haber pasado por una gran pelea, tiene heridas viejas y otras más recientes. Pero me alegra tanto verlo y de que, con todos los desastres y los horribles momentos que parecían llegar... estamos aquí los dos juntos. —Layne... estás aquí— le digo sonriendo. Él me ve con adoración. — Te dije que no iba a dejarte, jamás podrí