Layne Cuando me desperté, todo me dolía en el cuerpo y por un momento pensé que ya estaba del otro lado, viendo las estrellas si no fuera por la oscuridad que azotaba. Ni siquiera sé cómo me habían traído aquí, supongo que me habían lanzado sin ningún cuidado. Estaba boca abajo en lo que parecía ser una celda con paja y suciedad y me costó muchísimo dar la vuelta para reincorporarme. Creía no tener nada roto en mi cuerpo que me impidieran realmente entrar en acción. Y, sin embargo, todo lo que me dolía no podía dejar de pensar que mi princesa estaba sola y desamparada, amarrada, sola. Por primera vez en mi vida realmente tenía ganas de desesperarme y olvidar hasta mi último grado de esperanza. No había guardias en este encierro y solo alumbraba una pequeña ventana donde pareciera que se asomaba la luna. No sé cuánto tiempo había estado aquí, no sé cuándo vendrían por mí aun cuando Kai dijo que vendría a saldar cuentas conmigo. Francamente, preferiría que estuviera aquí dándome
DashiPienso que esto es mucho peor de lo que pensaba, y ahora siento que soy la única persona que puede intentar resolver lo que está sucediendo. Lo primero que hago es ir a la habitación de mi princesa y observo que está fuertemente vigilada, inclusive desde adentro y que se queda con ella la dama Briela que es una verdadera desgracia. —¡Y decían que eras una princesa, una verdadera hija de la noche y solo eres una mujer cualquiera!— le gritaba esa mujer desagradable y yo veía que la princesa se contenía. Yo podía sentir su resplandor de la luna, y pocas veces lo había sentido. También esa mujer parecía querer darle de esa bebida espantosa que la ponía débil, pero Naiara se oponía, tenía que guardar fuerzas para si tenía que enfrentarse al rey. Estaba en una situación imposible, pero antes de poder salvarla, tenía que buscar refuerzos.Afortunadamente, escuché un piar cerca y ahí venía mi cuervo, con un mensaje importante. Mer estaba oculta tal como le había dicho, a la espera de
Layne La esperanza puede hacer cosas grandiosas con nosotros. Saber que nos espera un destino cruel y terrible, cambia totalmente si creemos que al final del día, la luna nos acompañará. Las cosas nos saldrán bien, habrá una luz brillante en la oscuridad. Yo estaba muy golpeado, pero con lo que me había dado Dashi, y en especial con sus palabras... empezaba a mejorar. Y veía que no solamente eso sucedía conmigo, sino que la princesa Aixa también había cambiado su actitud. No me quería ni imaginar cuánto tiempo estaría ella aquí encerrada, esperando noticias de su esposo y de la gente que la apoyaba. Había sido encarcelada y apartada prácticamente por su propia familia y su pueblo. Pero también yo sabía que lo que tocaba ahora, era posiblemente uno de los momentos más decisivos de este emprendimiento que llevábamos. Había una dificultad más, y luego tendríamos que enfrentar a Kai. Pero saber que mi princesa iba a estar libre y segura... era lo único que necesitaba saber. —Prin
Naiara Sentía que la fuerza me había abandonado, mi caballero había sido golpeado tan salvajemente que yo imaginaba lo peor, aun cuando algo dentro de mí me decía que él era mucho más poderoso y que había sufrido batallas, peleas y todo tipo de cosas y había sobrevivido. Seguía amarrada como si fuese un animal en este cuarto, esperando noticias que no llegaban. La dama Briela venía a visitarme, pero su presencia era una molestia. —¡Eres una cualquiera! ¡Una descarada! ¡Más que una princesa pareces una vulgar esclava!— me gritaba. — Espero que el rey acabe contigo... que te ahorque con sus propias manos y se busque una mujer mejor. Una verdadera reina, una mujer que sea respetable, decente... no una mujerzuela como tú, ¡que ni siquiera quería cumplir sus deberes matrimoniales con él! ¿Quién habrá visto algo así?— decía ella y fue lo último que mencionó antes de cerrar la puerta. Parecía que, de alguna manera, ella creía que sí era digna para el rey. Que ella tenía todo lo sufic
LayneNos aproximamos por los pasillos, subiendo; yo sentía que mi cuerpo estaba en tal completa alerta que casi no percibía los dolores de los ataques que me había propinado él ya muerto consejero. Pero con todo y eso, me apoyaba en las paredes, iba con cuidado. —¿Ve algo caballero?— me preguntaba la princesa Aixa. Escuchamos un gran estruendo que debía venir seguramente de la puerta. Nos escondemos cuando pasan los soldados del rey. Mi objetivo es llegar hacia la torre de mi princesa,y poner a salvo a Aixa. Y ante todo esto temo que aparezca Kai. — No sé si adentro, pero creo qué sucede algo afuera...— y cuando encontramos una ventana y nos asomamos quedamos realmente impresionados. La puerta del castillo ha caído, y no solo hay soldados intentando entrar y gente nuestra, sino también de los Aldeanos y súbditos, la gente de Bhaltar. Supongo que solo con los insurgentes y nuestros soldados No se podría haber logrado, pero al haber más personas el poder era mucho mayor. Aixa sonre
NaiaraCuando me despierto siento que todo ha sido como una especie de sueño, como si nada hubiese sucedido, como si nada existió, pero de repente me levantaba en mi antigua habitación.Y no solo eso, hay una especie de cambio en el ambiente, las ventanas están abiertas y escucho las aves afuera. Hay cuervos en mi ventana y cuando intento levantarme siento un ligero dolor. — Creo que es mejor que te quedes acostada por un tiempo, necesitas descansar, Naiara...— lo veo llegar a él a mi lado. Mi señor, ¡Está bien! ¿Qué sucedió?Y todo me cae de repente: la lucha que parecía ocurrir, el capitán,Kai...Dashi... a luz. Mi caballero se ve extremadamente cansado. Parece haber pasado por una gran pelea, tiene heridas viejas y otras más recientes. Pero me alegra tanto verlo y de que, con todos los desastres y los horribles momentos que parecían llegar... estamos aquí los dos juntos. —Layne... estás aquí— le digo sonriendo. Él me ve con adoración. — Te dije que no iba a dejarte, jamás podrí
Capítulo 77: Un devoto aliadoDashiIba y venía en conciencia de un momento a otro. La mayoría del tiempo pensaba que estaba entre sueños, especialmente porque eran muy agradables. Yo era muy creyente, pero no sabía mucho de las estrellas y de las constelaciones, como hablaba siempre el caballero y la princesa. Pero ahora sentía que viajaba por la noche estrellada y percibía ese suave frío que tienen el brillo de las estrellas más lejanas. A veces se escuchaba voces alrededor de mí, e inclusive en un momento creí escuchar la voz de la princesa y ver su rostro. Me decía que descansara y que ellos me esperaban, y eso me hizo sentir mucho mejor. Había trabajado tanto durante toda mi vida, había sido una esclava atada prácticamente a la voluntad de mi amo, y solo en ese momento en que llegué al lado de la Duquesa... supe lo que era un poco de felicidad. Pero aun así siempre estuve yendo de un lado a otro, siempre en movimiento, y ahora mi cuerpo se sentía cansado, adolorido, rogando por
NaiaraEl castillo y el reino se organizaban, y parecía todo estar mucho mejor de lo esperado. Era verdad que nosotros habíamos notado que en Bhaltar la gente era bastante arisca y en general había una gran desconfianza y quizás erróneamente habíamos pensado que era hacia nosotros.Pero creo que ahora era fácil darnos cuenta de que tenía que ver mucho con Kai. Nadie quería involucrarse en nada referente a él y el ambiente se sintió mucho más liviano una vez que se confirmó su muerte. Claro que tampoco nadie conocía a la princesa, y ella tendría que hacer un gran trabajo. Lo primero que se había hecho fue comunicar su existencia y también su matrimonio, que todos supieran que iba a haber una nueva reina como que conocía a este reino a la perfección, y que también quería lo mejor para todos. Yo feliz me hice a un lado, y sin ningún problema decline a mis derechos como reina sucesora. Kai y sus consejeros habían luchado tanto para que yo no tuviera ningún poder que ahora todo sería cla