La confianza de otra persona se consigue demasiado fácil y rápido, acaparando en tus manos esas mínimas, pero fuertes debilidades que lo hacen susceptible. En estos últimos días que he estado casi a tiempo completo con Chris, me he dado cuenta de algunos puntos de quiebre, pero no lo suficientes para hacerlo caer. El hombre es muy inteligente, de eso no cabe ni la menor duda. Me ha puesto a prueba, siguiendo mis pasos e interceptando mis llamadas. Aun cree que mantengo contacto con Aiden y Adriel, y que mi presencia en su vida es solo una trampa para atraparlo con la guardia baja. Cómo aún no lo tengo dónde me gustaría tenerlo, no he podido comunicarme con Aiden, por lo que tendré que planear y llevar mi límite al abismo. No soporto tener que besarlo cada que le da la gana, pues sus besos, su cercanía, su mera presencia me asquea por completo. Siento estar fallándole a mi hijo y a mi esposo, p
El resto de tarde en la oficina estuve en tensión y con gran dolor de cabeza. Golden no me dio ni un solo segundo de privacidad para así poder realizar la llamada a Aiden, ya que de hoy no puede pasar la muerte de este cerdo. Además, no lo soporto ni un solo segundo más tan cerca de mí. He hecho el papel de mi vida actuando como si nada en frente de este maldito bastardo, pues no voy a negar que, las ganas tan grandes que tengo de atravesarle el cuchillo que tengo en mi pierna en la garganta y callarlo de una vez y por todas son inimaginables, pero no puedo arriesgarme de esa manera en frente de tantas personas.—Esta fiel servidora ya se marcha — avisé, tomando mi bolso para colgarlo en mi hombro—. Nos vemos más a la noche...—¿Cómo es eso de que nos vemos más a la noche, muñequita? De aquí nos vamos, pero junticos como Dios nos manda— este imb
Muchas veces solemos equivocarnos, haciendo las cosas precipitadamente y sin pensar con cabeza fría. Pero en esta ocasión estaba muy segura de mi plan, sabía que no iba a fallar, porque en la vida hay que aprovechar las pequeñas debilidades que quedan al descubierto de las demás personas: después de todo, el ser humano siempre busca lo menos, en lugar de lo mas del otro. La adoración excesiva y enfermiza de alguien por una persona u objeto, siempre será una fatídica maldición.Chris no tiene ni la menor idea de lo mucho que he pensado en llegue este momento. Sé que le hice una promesa a Aiden y a Adriel, pero este deseo de vengarme por haberme quitado un pedazo enorme de mi ser, es mucho más fuerte que cualquier otro sentimiento. El vacío que dejó a propósito en mí, ni con su propia sangre lo podrá llenar nunca. No monté todo este teatro por nada
AIDENUn mal presentimiento ha venido creciendo dentro de mí durante todos estos días en los que Sara ha estado cerca de Golden, y por lo tanto lejos de mí. No soporto pensar en el hecho de que mi esposa, la mujer que más en la vida esté ofreciéndose en bandeja de plata a mi mayor enemigo. Ese infeliz es muy inteligente, para no darse cuenta de la verdad ante sus ojos.Adriel piensa lo mismo que yo, por lo que decidimos seguir sus pasos de cerca y sin que se dé cuenta. Sé lo que tiene pensando mi esposa, pero no por ello dejaré que corra un riesgo más. El hecho de que haya entrenado y tenga sed de venganza, no quiere decir que esté preparada para enfrentarse a un asesino experimentado como Golden. Ella se dejó llevar por el odio y el rencor, dejando de lado los mínimos, pero importantes puntos que toda esta situación nos abarca; que Golden sabe perfectamen
El plan estaba saliendo mal, por lo que Adriel debía entrar en acción lo antes posible. Lo que no sabía era si él se encontraba o no en su posición, tampoco podía hablar o Golden se daría cuenta. Sara rompió el silencio, sin apartar la mirada del cuerpo de Tessa.—¿Por qué le has hecho daño a ella? ¿Ella que te ha hecho? — Sara trató de acercarse a Tessa, pero Golden alzó el cuchillo hacia su dirección.—Ha sido un gran estorbo todo este tiempo. Mejor quédate ahí quietita donde estas, muñequita.—Te dije que interviniéramos antes — escuché la voz de Adriel a través del auricular.—Adelante — murmuré, ganándome una mirada curiosa por parte de Sara y Golden.En una mínima fracción de segundo Golden tocó su cuello e instantes después se desestabilizó, soltando el cuchillo y cayendo al suelo casi al instante. Al asegurarme de que se encontraba inconsciente, me acerqué a Sar
Mis preguntas no lo tomaron por sorpresa, al contrario, era como si hubiera estado esperando a que le preguntara eso. No voy a engañar a nadie, saber que posiblemente mi hermano gemelo; lo único aparte de Sara que tengo en la vida, ame a mi esposa, no me agrada en lo absoluto.¿Acaso pasó algo entre ellos? Sacudí ese pensamiento de mi cabeza, confiando en mi esposa y en mi hermano. Ellos no me traicionarían, ¿verdad?—Te habías tardado en atacarme — se cruzó de brazos, ladeando la cabeza en dirección a Sara—. Esa fastidiosa mujer solo te ama a ti; así tú y yo tengamos el mismo rostro y la misma voz, en su mundo eres el único — me encaró—. No se puede negar que Sara es una mujer muy bonita, además de encantadora y un poco fastidiosa, pero más nada. Ella es tu esposa, muy bien lo has dicho. Eres mi hermano, jamás te traicionaría y tú lo sabes. No sé a qué viene esa inseguridad de tu parte. Y antes de que empieces a atacarme con otros puntos que de seguro en tu
SARAMe tomaron las muestras de sangre en el lapso de tiempo en que esperábamos a que le dieran salida a Tessa. Aiden se encontraba muy ansioso, por lo que decidió salir a fumar junto a su hermano. No le había tomado mayor importancia a mi periodo, puesto que tardaba quince días más a partir de la última fecha en llegar. Así había sido desde que perdí a mi bebé. Además, que, desde que Aiden y yo retomamos nuestra vida sexual, no nos hemos estado cuidando. Sé que han pasado pocos meses, pero tengo esperanzas de ser madre. La enfermera me dio aviso de que el resultado estaría en un par de días y decidí tomar un poco de aire en el estacionamiento.No he tenido paz desde que el doctor me dijo de la pérdida del bebé de Tessa, pues me recuerda a ese día en el que yo también pasé por lo mismo. No sé si ella lo sabía o no, pero tengo la breve sospecha de que el padre de ese bebé era Chris Golden. Es por lo único que puedo entender s
—El amor no lo podemos evitar, Tessa. Es algo que no sabemos cómo manejarlo en muchas ocasiones. Pero de eso se trata, de aprender del error.—Tu vida es tan sencilla y de ensueño, Sara. Tienes a tu lado a un hombre maravilloso y que, además, por encima de todo te ama con inmensa locura. En cambio, yo estoy destinada a ser el segundo plato siempre. Fui una tonta al haberme ilusionado tan pronto, pero cuando caí en cuenta ya era demasiado tarde. Me enamoré perdidamente de Chris; de esa única forma de ser y de tratarme. Pensé que con él viviría el tipo de amor perfecto que tú tienes con Aiden, pero mira en lo que todo ese ridículo sueño terminó.Suspiré, cuan equivocados estamos de la vida de los demás. Una cosa es lo que mostramos y otra muy diferente es lo que en realidad es. Tessa es mi amiga, ¿qué caso tiene que siga ocultando la verdad por más tiempo?—Estas equivocada, Tessa. Esa vida sencilla, de ensueño y llena de perfección no existe para n
AIDENDespués de tantos años anhelando tener a esta maldita rata bajo mis manos, todo lo bueno que había tratado de hacer en los últimos años se acabó de ir a la mismísima mierda; el divino poder de la venganza es mucho más satisfactorio de lo que llegamos a imaginarnos. Mi hermana y mis padres; mi familia murió en sus manos, por lo tanto, es común devolver el favor y con gran ahínco. Adriel se encontraba con la misma ansiedad de querer acabarlo, así como lo estaba yo, pero no hay mejor placer que el retraso de una muerte.Desde que abrí los ojos me dediqué a practicar una pequeña cirugía a Golden, dándole gusto a su más grande devoción y manía. Adriel se encargó de mantenerlo controlado para que no muriera tan pronto, mientras la filosa cuchilla la iba pasando desde el centro de su pecho hasta detenerme a pocos centímetros de su ombligo. La carne se fue abriendo poco a poco, por lo que la sangre comenzó a brotar de la tajad