El infierno no tiene el azul de sus ojos, pero es tan ardiente como el deseo que despierta su sonrisa en mí.
Alondra
El corazón me late a toda prisa a pesar de que cada vez estoy más lejos de ese extraño sujeto, observo por el espejo retrovisor tratando de identificarlo en cualquiera de los autos que vienen detrás de mí, pero no logro ver nada realmente. Es absurdo que me esté siguiendo, no le di tiempo a que detallara nada de mi auto o eso, espero, fue muy grosero de su parte haber interrumpido así mi ida al cementerio, espero no tener que cruzármelo nunca más en mi vida, sacudo la cabeza espantando los pensamientos sobre el desagradable encuentro de hace un momento.
No sé qué es peor, si dejar de pensar en lo que acaba de suceder o volver al torbellino de emociones que significa el aniversario de muerte de mi bebe, hace dos días habría cumplido once años, pero Dios decidió que lo mejor era hacer mi angelito volviera a su lado, quizás mi vida en este momento sería diferente teniendo una criatura que proteger a cuestas, quizás no hubiese continuado con mis estudios resignándome al mismo destino de mi madre, vivir con muchos sacrificios para poder salir adelante. Gracias a todo su esfuerzo soy una mujer que hoy en día no le teme al mundo y que es capaz de dar mucho más de su máximo para conseguir todo lo que se proponga.
Tardo hora y media en llegar a mi trabajo, soy la CEO de una gran compañía que se desarrolla dentro del campo tecnológico, producimos principalmente hardware, Internet, equipos de telecomunicaciones, software, semiconductores, comercio electrónico y servicios informáticos, en los tres años que llevo en el puesto he ayudado a que la empresa crezca mucho dentro del área, sin embargo, mi sueño es establecer mi propia compañía, ser mi jefa ya no tener que trabajar para nadie, no es que en Technological Prestige me hayan tratado mal, al contrario, desde el primer día me sentí valorada profesionalmente.
Saludo a todos a mi paso hasta entrar en el ascensor, me observo en el espejo que hay en el mismo mientras pienso en que todavía soy joven y quizás algún día tenga tiempo para el amor o quizás nunca lo tenga, pero por ahora necesito alcanzar mi última meta, aunque en realidad será el inicio de un nuevo viaje que me mantendrá centrada y ocupada por mucho tiempo. El ascensor se detiene al llegar a mi piso respiro profundo antes de salir, sabiendo perfectamente que mi asistente únicamente espera a que ponga un pie fuera del elevador para atacarme con la agenda y los miles de compromisos, aunque de ser sincera no recuerdo tener ninguno por ahora.
―Buenos días, señorita Jiménez ―saluda cortésmente como cada día, aunque eso es solo antes del café―. El señor Santiago desea verla en su oficina antes del almuerzo y para hoy solo tiene un compromiso a las tres de la tarde con el señor Freites ―informa sorprendiéndome por uno y recordándome del otro, Esteban Santiago es el dueño de esta empresa, un hombre exquisitamente maravilloso que desde hace mucho casi que vive suplicándome porque me convierta en la esposa de su rebelde hijo, pero como siempre le aclaro que por el momento no me interesan las relaciones amorosas de ningún tipo, me pregunto para qué querrá verme.
Por otra parte, el señor Freites es un reconocido empresario el cual está interesado en conocer nuestro producto, por supuestos esas reuniones son tediosas y fastidiosas, el primer comentario es que no se esperaban que la CEO fuese una mujer y mucho menos pueden creer que además de inteligente sea tan bonita, luego tratan de seducirme hasta que me harto y dejo los puntos sobre la mesa, soy una profesional y me gusta que me traten como tal.
―Gracias, Andrea ―contesto al tiempo que tomo asiento en mi cómodo sillón detrás del escritorio―, necesito que revisemos el plan estratégico del próximo semestre, quizás se me haya escapado algo ―tal vez mi trato con el equipo de trabajo sea algo fuera de lo común, pero prefiero que mis subalternos me vean como alguien fuerte y accesible en el plano laboral a que me teman y señalen como despiadada y egocéntrica, de hecho esta estrategia de trabajo me ha funcionado todo este tiempo, por lo mismo continuo en el puesto.
Soy de las personas que piensa que un líder debe ser una persona cercana a sus grupos de trabajo, de ese modo se obtiene un mejor equilibro para enfrentar los retos y los desafíos de un entorno como este que cada día se vuelve más cambiante y competitivo. No es nada fácil ni sencillo dirigir una empresa que no te pertenece, sobre mis hombros llevo una responsabilidad muy pesada que gracias a mi metodología de trabajo he podido aligerar.
―Está bien, pero primero tomate este cafecito ―coloca una taza de humeante café, sabe que no me gusta mucho por lo que siempre me le coloca crema y mucho azúcar.
―Gracias, y cuéntame que tal el fin de semana ―pregunto, no solo soy la jefa directa de Andrea, también nos hemos hecho amigas.
Las horas de la mañana se nos van conversando de todo un poco al tiempo que no detenemos el trabajo, Andrea es una excelente asistente, amable, inteligente, lista y muy despierta, agradezco tenerla a mi lado y espero ser de mucha ayuda para ella en su desarrollo profesional. A pesar de que no he pensado mucho sobre el motivo que pueda tener el señor Santiago para verme, me siento intrigada, no es común que él se encuentre en su empresa, por lo general viene una vez al mes a la presentación mensual del balance de la empresa.
―Creo que es hora de ir con el jefe ―comento acomodando varios documentos sobre la pequeña mesa de juntas de mi oficina.
―Si, a ver si ya te decides a casarte con su hijo y te haces cargo definitivamente, te aseguro que todos los empleados estaríamos más que satisfecho de que te mantuvieras en el cargo por siempre ―dice.
―Ya conoces mi postura, no es mi sueño ser una empleada toda la vida, quiero dirigir mi propia compañía ―pone los ojos en blanco―. Eres muy egoísta y por eso ahora te toca ocuparte de todo esto ―alzo la ceja al tiempo que le señalo las carpetas y papeles que continúan sobre la mesa.
―Creo que no te has enterado, pero ese es mi trabajo, cariño ―replica.
―Me caes mal, a veces siento que es hora de buscarme una nueva asistente, pero después recuerdo el drama que harás y se me pasa ―digo y salgo de la oficina sin darle oportunidad de responder.
Me rio mentalmente imaginando lo que debe de estar pensando Andrea, ella sabe que nunca la cambiaría por nadie más, de hecho le he propuesto muchas veces irse conmigo una vez inicie mi propio negocio, pero comprendo que tiene mucho que pensar, no es fácil dejar un lugar donde estás estable por aventurar de la noche a la mañana en algo nuevo. Mi proyecto es totalmente diferente a lo que llevo trabajando durante todo este tiempo, aunque en cierto modo va de la mano con la innovación tecnológica, así que es posible que establezca una relación comercial con el señor Santiago.
Las puertas dobles de la oficina del señor Santiago lucen imponentes delante de mí, respiro profundamente antes de erguirme por completo, dejando a relieve mi estatura completa antes de tocar y entrar una vez tengo la autorización. La oficina es simple y elegante, con líneas rectas en todas sus superficies y con colores neutros, mi jefe es símbolo total de la elegancia hecha hombre, además de que es muy educado y decente, tiene una esposa espléndida y un hijo que a decir verdad es una vergüenza para él, no se interesa en los negocios ni ayuda a su familia en nada, se la vive gastando el dinero de sus padres en mujeres y fiestas, pero a fin de cuenta ese no es mi problema.
―Querida, ven pasa ―me saluda con cariño como siempre.
Le devuelvo el gesto en el mismo tono dulzón y me dispongo a escuchar lo que tiene para decirme, de verdad deseo de todo corazón que no se trate del mismo tema de siempre, no soy una santa para hacer el milagro de que su hijo al fin madure.
El destino es ese lugar al que nos dirigimos a ciegas, un futuro que algún día será presente y que ya está marcado por el pasado.AlondraSonrío al notar el tono de nostalgia que utiliza, sé que busca la manera de convencerme para que me quede, aunque no dudo de que su ofrecimiento sea totalmente sincero, pero la verdad es que tengo pensado terminar el segundo semestre de este año con mis funciones y entregar antes de que finalice el primer trimestre del año próximo.―Señor Santiago, usted conoce mejor que nadie, cuál es mi más grande deseo y también sabe perfectamente que he luchado para conseguirlo, además le prometí a mi madre que un día sería grande por las dos ―digo no queriendo sonar sentimental, pero mi voz temblorosa delata los sentimientos que rodean a mi alma en este momento.―Siempre me he preguntado que fue eso tan malo que te sucedió, como para que les guardes tanto resentimiento a los hombres y sobre todo, para que esa tristeza no se aparte de tu mirada a pesar de lo seg
¿Somos víctimas de la casualidad o simplemente es la ley de la atracción la que causa este efecto de peligro entre los dos?AlondraSe sorprende al verme delante de él, pero enseguida se recompone y me enseña una sonrisa de satisfacción al verme, siento las manos sudorosas y el corazón martillando en mi pecho con tanta fuerza que me es difícil recuperarme por unos cuantos segundos en los que intento descifrar en que momento fue que el destino decidió jugarme esta maldita broma. Imito su postura cuadrándome de hombros, al tiempo que el mesero me ayuda a recoger mis cosas del piso y me las entrega, agradezco la amabilidad del joven antes de colocar de nuevo la mirada fría sobre el señor Freites.—Mucho gusto, Alondra Jiménez, CEO de Technological Prestige —Extiendo la mano con toda la seguridad de la que soy capaz, no es la primera vez que tengo que vérmelas con un hombre en una reunión de negocios fuera de la oficina, sin embargo, es la primera vez que tengo un encuentro desagradable c
Un corazón endurecido es la clave del éxito, alejarse de las historias románticas es la estrategia a seguir hasta lograrlo.AlondraNo entiendo que fue lo que sucedió, yo no me comporto de esa manera, pero por alguna razón ese hombre logra alterarme, la forma en la que me mira la mueca de sus labios al sonreír sin ningún motivo, el timbre ronco y seductor de su voz. Nunca antes me he sentido de esta manera y no voy a empezar ahora, me he dicho mil veces a mí misma que no estoy interesada en una relación con nadie y no pienso cambiar de opinión, mantenerme alejada de todo lo que representa un obstáculo en mi carrera es lo que me ha llevado hasta donde estoy en poco tiempo.Nunca perdí el tiempo en noviazgos durante mis estudios, aunque eso se trató más de lo que viví siendo una niña, sin embargo, es el único método que conozco para superarme y continuar. Pensaba regresar a la oficina, pero en este momento no creo poder concentrarme en nada más, por lo que decido regresar a la soledad d
Las rosas nunca han traído la felicidad entre sus espinas. Sobre todo las rojas, que son el color de la sangre y del dolor.AlondraDe nuevo voy camino al cementerio, pero esta vez a la tumba de mi bebe, las cenizas de mi hijo descansan en un cofre sembrado en uno de los muros designados para tal fin dentro del recinto, una pared inmensa con hermosos grabados, es un columbario especial en el que solo descansan los restos de varios niños, me hace feliz imaginar que mi hijo juega con esos otros niños a su lado. No suelo visitarlo muy seguido, saber que no pude conocerlo por más tiempo, recordar cómo fue concebido y revivir en mi corazón el dolor que significo por tantos años sigue destrozándome. En mi corazón aprendí a amarlo y aunque cada día que pasa deseo que hubiese podido vivir, la verdad es que reconozco que hubiese sido muy difícil para mí aceptarlo del todo.Tal vez eso me hace mala madre, un hijo nunca tiene la culpa de lo que sucede a sus padres, pero en cierto modo siento que
Nunca una batalla cara a cara me ha causado tanto terror, como el hecho de tener sus ojos clavados en mí.AlondraDesisto de llamar y decido mejor ir a verlo a su oficina, de esa manera le dejaré en claro que no me interesa para nada tener ningún tipo de relación que no sea profesional con él, no quiero parecer extremista, pero sé bien que cuando uno lo permite la primera vez entonces se agarran de eso para volver a hacerlo y entonces tener un acercamiento mucho más personal y la verdad en este momento únicamente quiero estar enfocada en mi carrera y en mi futuro, en unos meses daré inicio a mi propia empresa y necesito estar totalmente concentrada y centrada.Ese hombre logra irritarme con tanta facilidad, no sé qué me sucede últimamente, quizás sean que mis emociones durante estos días están descontroladas por lo general, aunque es primera vez que me sucede con un cliente. Aunque también antes de saber que era un potencial cliente tuve un encuentro bastante desagradable, me parece u
¿Cómo se lucha en contra de los fantasmas del pasado? Tal vez lo ideal es hacerse a un lado y dejarlos continuar con su reinado de terror, sin embargo, el sabor de su boca y el olor de su piel me hacen persistir en una pelea que quizás esté perdida, pero no soy el típico hombre que se da por vencido cuando de revivir los gemidos de una dama se trata.ChristopherEs inevitable no expresar la sorpresa que me causa la presencia de la señorita Jiménez en mi oficina, me encanta ver su seguridad y la firmeza con la que se desenvuelve. Me atrae, es cierto, pero también me doy cuenta de que es una mujer muy difícil de conquistar. Me pregunto que será eso que oculta y que tanto le afecta, he estado leyendo sobre ella y al parecer no se le ha conocido nunca una pareja, de hecho no tiene una vida social muy activa. Me pongo de pie cuando me canso de escuchar sus reclamos, aunque en realidad no le he prestado atención, por experiencia sé que a las mujeres hay que darles la razón y asentir cuando
Pídeme que no aprenda a amar tus traumas ni tus días grises, envíame al infierno si es preciso para mantenerme alejado de tu presencia.ChristopherEstoy convencido de que no es una buena idea pretender seguir viéndola, bajo ningún pretexto puedo hacerlo, ya es prácticamente el motivo de mi ansiedad, la última vez que me encontré en una situación similar, fue cuando todo mi mundo se derrumbó. Los pies me pican por volver a entrar en mi oficina y ver cómo está, pero sé que es una trampa mortal en este momento para mí.Mi entrepierna está resentida y lo más probable es que reaccione al tenerla de nuevo frente a mí y me parece que además de ser contraproducente para ella en este momento por cómo se encuentra que sería un atentando homicida en mi contra. Colmado por mis propios pensamientos, decido ir al baño de los empleados para refrescarme un poco, no es muy común que use esta sala sanitaria, pero ahora mismo me es muy necesario.Me mojo la cara repetidas veces, el agua está un poco he
Déjame vivir dentro de tus recuerdos y olvídame mientras aprendes a amarme. Alondra Observo detenidamente al hombre que se encuentra parado frente a mí esperando a que le diga algo mientras mi mente sigue evocando sucesos del pasado que prefiero no recordar. Su mirada es de insistencia a que diga algo, pero por más que intento decir algo no logro articular ni media palabra, definitivamente no tuve que haber venido, no ha sido la mejor idea que he tenido en toda mi vida ni mucho menos estaba preparada para el resultado de la misma. —¿Se encuentra bien o desea que llame una ambulancia? —inquiere con tono frío, cómo si ahora quisiera mantener su distancia conmigo, tal vez se dio cuenta de su error y ahora está arrepentido. —No, gracias. Estoy perfectamente y no gracias a usted —digo con voz dura—. Evitaré levantar cargos por ahora, por qué quiero confiar en que no volverá a suceder nada parecido a lo de hace un momento entre los dos, quiero que entienda que no me interesa tener o mant