Capítulo 59

—Nicolás, ¿seguirás aquí, tratando de defenderla? No tienes miedo de que él te descubra.

—De que hablas.

—Tic toc, tic toc — replicó Maritza

—Está loca mujer, que estás hablando.

—Ya llega, Nicolás. No podrás seguir escondiéndote.

El corazón de Nicolás se aceleró, sus manos sudaban de manera incontrolable, tenía que salir de ahí, algo malo estaba llegando.

Salió de la habitación, y se escondió detrás de una máquina dispensadora, trato de calmarse, no quería tener una crisis de pánico, era imposible, creía que ya lo había superado, pero solo de pensar en aquel hombre, su cuerpo temblaba de manera descontrolada.

Sintió que una mano tocaba su espalda y dio un salto asustado.

—Oye guapo, sucede algo — le p

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo