49. ¿Fue una buena noche?⤝MILA⤞Me muevo con sutileza; el cuerpo me duele, pero es tan placentero que puedo acostumbrarme fácilmente. Sonrío como tonta al recordar nuestra entrega. Axel cumplió su promesa e hicimos el amor hasta el amanecer.Me siento tan enamorada y tan satisfecha que no puedo evitar el gemido que escapa de mis labios cuando siento los dedos de Axel sobre mi cadera.—Por Dios, Mila, no te muevas —gruñe a mi oído, y entonces me doy cuenta de que sigue enterrado dentro de mí.¿Me quedé dormida mientras lo hacíamos? ¡Imposible! Aunque los últimos recuerdos no están muy nítidos en mi cabeza.—¿Quieres volverme loca? —pregunto cuando mueve la cadera y se hunde un poco más, haciéndome temblar.—No te escuché quejarte anoche —se burla, y me muerdo el labio.No tengo nada que decir en mi defensa.—Eres tan adictiva, Mila —murmura, deslizándose lentamente de mi cuerpo—. Si pudiera, me quedaría contigo, haciéndote el amor todo el día.Un gemido se desliza por mi garganta cuan
50. No le eres indiferente⤝MILA⤞El silencio se instala en la oficina mientras observo la pantalla del celular apagarse. La llamada ha terminado, pero la seriedad en la voz de mi madre hace eco en mi mente.—¿Todo bien? —pregunta Soren. Su voz, cargada de preocupación, logra conmoverme.—Mamá quiere hablar conmigo. Daxton la ha llamado y, por su tono, no parece muy contenta —admito mientras cierro la revista y me levanto de la silla.—¿El abuelo? —inquiere frunciendo el ceño.—Sí.—¿Crees que trate de arruinar la boda? —cuestiona con cautela.Niego con la cabeza. Lo más probable es que le haya hablado sobre adelantar la fecha, y eso basta para que mis padres estén preocupados, quizás incluso molestos. No es una conversación que pueda evitar.Sin embargo, no pensé que Daxton fuera a adelantarse. Creí que tendría tiempo para prepararme.Soren se acerca y toma mi brazo con suavidad, sacándome de mis cavilaciones y obligándome a mirarlo a los ojos.—Puedes confiar en mí, Mila —asegura co
51. Su amor es real⤝MILA⤞Un silencio denso se instala en el auto luego de mi exabrupto. Los dedos de Soren se aprietan con más fuerza sobre el volante, pero hay algo en sus ojos que lo delata, como si mi comentario hubiera encendido un fuego que no quiere reconocer.—Olvídalo, Mila. No quiero hacer el ridículo —responde finalmente, con la vista clavada en la carretera.—Confía en mí, Soren. Te aseguro que no harás el ridículo —insisto, acomodándome en el asiento para observarlo mejor.—¿Crees que no lo he intentado? —pregunta. Su mandíbula se tensa y me lamento por los pocos kilómetros que nos quedan para llegar a casa de mis padres—. No conoces a Beckett —añade, dejando escapar un suspiro de frustración. Toda emoción se borra de su rostro y sus ojos pierden ese brillo que estoy segura de haber visto en ellos.—Tienes razón, no lo conozco más allá de lo profesional, pero te conozco lo suficiente como para saber que hacerte a un lado no será la solución.—Mila.—¿Quieres quedarte con
52. Tu ambición te ciega⤝MILA⤞Cuando regreso a casa, todo lo que deseo es meterme en la cama. La conversación con mis padres me ha dejado exhausta. Aunque mi promesa parece haberlos calmado, sé que estarán pendientes de cada cosa que Axel haga o diga.No puedo culparlos. Su pasado, marcado por numerosos escándalos, no es fácil de ignorar, y menos cuando lo nuestro se ha dado de manera repentina. Cualquiera en el lugar de mis padres tendría esa preocupación.Un escalofrío me recorre la espalda. Me dejo caer en el sillón y cubro mis ojos con el dorso de la mano. No quiero pensar.El sonido del celular me saca de mi ensimismamiento. Busco el pequeño aparato en mi bolso y, al ver el nombre de Axel en la pantalla, respondo sin dudar. Mi corazón se acelera de emoción. Me prometió llamar apenas llegara a Houston, pero hasta ahora no tengo noticias suyas.—¿Aló?—Hola, cariño —saluda, y mariposas aletean en mi estómago. Aprieto el teléfono con fuerza. Deseo tanto estar a su lado, acurrucarm
53. Ojalá fuera para siempre⤝AXEL⤞—Yo también te amo.Sonrío al escucharla, miro el teléfono hasta mucho tiempo después de que la llamada ha terminado. Me recuesto en la cama y dejo caer el móvil sobre mi pecho. Los latidos de mi corazón se aceleran y la sonrisa estúpida de mi rostro no se borra.Nunca llegué a imaginar lo bien que iba a sentirme con Mila y no como amigos, sino como pareja.Rehuí tanto tiempo a estos sentimientos, me escondí como un cobarde detrás de cada escándalo posible, que hasta hoy día siguen pesando en mi vida. Entonces, no creía que necesitaba una reputación intachable.Me cubro los ojos con el dorso de la mano mientras evoco los recuerdos recientes con Mila. Aun en la distancia, puedo sentir el aroma natural de su piel adherida a la mía.La extraño tanto, quiero volver y estrecharla entre mis brazos, sentir su cuerpo junto al mío, asegurarle que nada ni nadie va a impedir nuestra unión. Pensar que solo nos quedan pocos días para anunciar nuestra boda, me ll
54. he dado en el clavo⤝MILA⤞«El corazón de Axel fue de Piper Sinclair.»Las palabras de Zane me atormentan durante las siguientes horas, hasta que finalmente decido ponerles fin a esas inquietudes innecesarias. No puedo prestarle atención cuando sé muy bien cuáles son sus intenciones. Además, Piper pudo significar mucho en la vida de Axel, pero ella misma eligió el camino que deseaba recorrer y era uno en el que no incluía amor y la presencia de Axel.Sola cerró las puertas en el corazón de Axel, esas mismas puertas que ahora se han abierto para mí y que no pienso cerrar con dudas absurdas. Confío ciegamente en Axel.El amor no se puede fingir, se siente o no se siente. Y yo he podido sentir el amor de Axel, abrazarme por completo, tocar cada fibra de mi ser, acariciar mi alma con una sola mirada.Me ha hecho vibrar con una sonrisa, con cada caricia. Nos amamos y no puedo permitir que la duda destruya lo que acabamos de empezar. No debo darle a Zane el poder de arruinar nuestro amo
55. Quería darte una sorpresa⤝MILA⤞Un silencio sepulcral llena la mesa mientras espero a que Beckett diga o haga algo. ¡Qué reclame a Soren como suyo! Tal vez que lo tome de la mano y le dé un fogoso beso. Pero es mucho pedir y el muy tonto, simplemente se marcha, buscando una mesa alejada, pero con la vista perfecta en nuestra dirección.—¿Qué diablos fue eso, Mila? —inquiere Zaria, saliendo de su estupor, viéndome como si me hubiesen salido tres cabezas y no puedo culparla. No sé en qué momento se me ocurrió semejante idea, pero las cosas ya están hechas.—Sí, hija. Explícame eso de que Zaria y Soren son novios. ¿Por qué no me han dicho nada? —pregunta mi madre, viéndonos a los tres sin comprender nada.La patada de Soren bajo la mesa casi me hace gemir. Me muerdo el labio para tragarme la protesta que amenaza con abandonar mis labios y le dedico una mirada. Todo lo que hago, lo hago por él.—Mila solo le ha jugado una broma al señor Harlow —habla Soren, retándome a contradecirlo.
56. Soy todo tuyo, Mila⤝MILA⤞Un gemido abandona mis labios al sentir la rodilla de Axel abrirse paso por mis piernas. Enredo mis dedos entre sus cortos cabellos, presionando un poco para profundizar el beso.El deseo corre por mis venas como un mar de fuego ardiente; no soy consciente de lo mucho que extrañaba perderme entre sus brazos hasta este momento. Mi cuerpo reacciona a su calor como una barra de mantequilla sobre la sartén caliente.¡Me estoy derritiendo!Así, sin separarnos y con pasos torpes, caminamos a la habitación; sin embargo, nos detenemos antes de entrar. Protesto cuando la boca de Axel abandona mis labios. Nuestras miradas se encuentran y no puedo evitar buscar un atisbo de duda en sus ojos o quizá ha pensado mejor las cosas y prefiere que hablemos sobre lo que hemos querido ignorar.No obstante, en esa mirada oscura y penetrante no hay más que una pasión arrolladora que prende cada rincón de mi ser. Una necesidad que no puedo ignorar, con la que no deseo luchar.É