—Yaro Segurity, paga muy bien. —sonreímos—. Otra más. —Le entregó un folder—. Aquí está todo lo que averigüé del teniente Zapata.—Eso te sirve para hacer un comparativo con el que te entregó el señor Francisco —le comenté, ahí veremos qué tan honesto es el padre de Salomé. —Ya no tengo nada más. Continuaré en mis dos misiones. Esperen a almorzar, para que se retiren. Minutos más tardes nos entregaron la comida y vimos a una mujer salir, al mirarnos y lanzarnos un beso, supimos que era el tío.—Es un camaleón. —Nos echamos a reír.Una vez en el auto Gamal lo revisó para ver que no tuviera algún explosivo, dado a lo que encontraron en el auto de ellos y se activó el sensor para ver si teníamos rastreador, encontramos uno y lo cambiamos. Se lo quitamos, para ponerlo a un carro de basuras que pasaba en ese momento. —Debemos de tener mucho cuidado.—Yaro, todos los días al personal que vamos a utilizar para apoyo debemos hacerle el polígrafo. Así creamos una advertencia. —
Llegamos a la Villa pasadas las once de la noche, todos nos esperaban en la terraza, mi hermana hablaba con Salomé. Las saludé a ambas.—Te ves cansado. —La traje hacia mí y le di un beso en la boca que la sonrojó.—Lo estoy —Marian sonrió al verme con ella. Me abrazó.—Yo los dejo. Yaro este lugar en increíble. Nos vemos mañana. —Una vez solos, ya que mis amigos habían ingresado, me abrazó con fuerza.—Las cosas se han vuelto turbias. Sin embargo, deberías de descansar y más bien mañana nos reunimos con Yasar primero y luego con todos. Ahora descansa. Tu amigo no ha dormido desde hace treinta y seis horas.—Yo también deseo descansar primero.Ingresamos a la casa, Gamal y Jabir había desaparecido. Amira esperaba a su novio quien me había esperado para hablar.—Jabir me puso en contexto de rapidez lo ocurrido hoy.—Tú debes dormir. Y más bien mañana a las cinco no reunimos.—Si señor.Cerramos las puertas de la casa, apagamos las luces, al ingresar a la recámara de Salomé vi unas chan
No pasé una buena noche, aunque siempre era así por motivos de mi periodo menstrual. Al salir del baño eran las cuatro de la mañana y Jabir seguía en mi cama. Tenía a un hombre hermoso en mi lecho, por su gusto. Volví a la cama, al sentirme cerca me jaló para pegarme a su cuerpo.No debo depender de nadie, pero este hombre me ha gustado desde que lo conocí. Busqué su cuello y el calor que emanaba su cuerpo me cautivó. Le di un beso, su piel se erizó.—Gordy, vas a hacer que mi Sultán se eleve y no tengo aún donde esconderlo —dijo entre dormido. Sonreí, sentirme deseada por primera vez era bonito.—Me cuesta entender que alguien como yo logre elevar a tu Sultán.—Para que veas, con solo sentir tu aliento logras hacerlo.Puso las manos en mi cadera, y ese calor calmó mi cólico. Tomé su mano y la pasé por la parte superior de la cadera.—El calor me alivia.—¿Te duele?—Un poco, pero tú me calmas.No sé en qué momento me quedé dormida. Al ser consciente de nuevo, sentí un calor en mi cad
Yasar me había puesto en contexto de todo lo descubierto. Las conjeturas que dijo. Vimos todos los videos y lo que dejó el mayor para nosotros. La memoria del teniente estaba encriptada y Gamal va a trabar en eso para más tarde. A mí me gusta ir paso a paso, escudriñando poco a poco para dejar que la mente realice todas las conjeturas.Jabir le pidió a su nana un jugo eventualmente y Marian con Gibran se encargarían de los perros. Los tienen con bozal por los trabajadores y los nuevos integrantes de vivienda. Hasta que se acostumbren a ellos. Y es el niño el encargado de darles la comida. Pero no han atacado a Rosita o a mi hermana.Cada uno ingresó a la oficina, a un lado tenía el informe de don Francisco sin revisar, el cual pienso comparar con el de mi tío. Salomé se sentó cerca de mí. y cada una de ellas buscó sentarse al lado de su pareja.—Faltan varios temas, pero iremos por parte. —inicié la conversación—. En el tema que nos concierten como equipo unificado les diremos todos.
Hasta las orejas las sentí caliente, muy caliente. Yaro me miraba, nunca quise creer eso, mi madre fue la única que me lo dijo. Pero papá me parecía tan perfecto. Sin embargo, que ahora lo comentara de ese modo no pude evitar alterarme un poco. —¿No lo consideras al menos?Sentí más vergüenza. Todos me miraba, para mí fue una discusión de pareja, algo normal supongo. —Tenía dieciocho años cuando los escuché discutir por un tema como ese. Pero la verdad no lo creo, ya han pasado más de siete años y mi padre no se ha vuelto a casar, nunca le he visto un amorío. Eso a mí me comprueba que tales acusaciones eran falsas. —Me tomó la mano.—Jabir. —miré al piloto. Yaro apretó aún más mi mano.—Salomé, ¿conoces a Antonella Santo Domingo? —afirmé.—Era una de las amigas de mi madre.—Ella es mi mamá. —abrí mis ojos—. Ahora que fui a sacarlos del país, ella se sorprendió al saber que la agencia nuestra te protegía. Mis padres conocen a tu padre. Mis hermanos eran amigos de tu difunto herman
Salomé se desplomó ante nuestros ojos. Tomé la mano de Gamal antes de ir hacia ella. Y por alguna razón mi pulso se había acelerado desde que vi el rostro de ese hombre. De hecho, cuando lo vi gracias a la grabación de Braulio en el video que fue pausado.Sentí un subidón de nervios logrando tapar mis oídos. Yaro la cargó y salió con ella gritando el nombre de José. Quien no era un médico, pero sí sabía de primeros auxilios. Los hombres se quedaron en la oficina y nosotras salimos detrás de ellos y nuestros perros comenzaron a ladrar.Debieron sentir nuestro miedo y llegaron hasta la habitación. Amira, Onely y yo nos quedamos a los pies de la cama con nuestros perros. A Tabaco le quité el bozal. Yaro hizo lo mismo con Canela que estaba desesperada. Una vez fue liberada se montó en la cama y miraba a José.—La estoy curando para que ella esté bien. Si me muerdes no la puedo curar. —Le puso algo de alcohol que tomó del botiquín que Onely había traído.Despertó y Canela ladró, para luego
Esta mujer me importaba mucho, al verla desvanecer fue la prueba de que Salomé me gustaba más que para unos meses. Seguía aferrada a mí, lloraba por momentos.—Gracias.—¿Por qué?—Por no dudar de mi padre. ¿Cómo supiste que no era él?—Varios factores. Donde hubiera sido tu padre, no hubiera permitido que te casaras con Orlando, él no aceptaría que su hija durmiera con alguien que lo había amenazado. Un narco como el que estamos enfrentando va matando, nada le hubiera costado hacerlo desaparecer, el orgullo lo ponen como si fuera un honor ser como son. Salomé el poder enferma, destruye y corrompe la mente y el alma de alguien. Además, don Francisco ya estaba casado con tu madre y vivía en Bogotá, tú y Lía son casi contemporáneas, ella ha vivido en Cali. Tanto los tiempos como los lugares no coincidían.» Por eso me parecía absurdo. Luego la madre de Onely En Santa marta. Luego tenemos la base de datos de Operación Aroma, la percepción de la madre de Jabir y Canela.—¿Canela?—Me cont
Nos fuimos en dos autos. Dos parejas en cada uno y José se fue en el carro conducido por Yaro. En la parte de atrás iba Gamal, Lía y Gibran que si se quiso ir con su padre para conocer Italia. Nosotros nos quedaremos, ellos regresarán una vez terminen su corta misión. Tienen una semana para hacerlo. Unos días estarán vigilando al idiota de Benjamín para luego enfrentarlo. Llegamos a Montería, eran las nueve de la mañana. Ingresamos al laboratorio, entregamos las muestras de sangre que José nos había sacado antes de desayunar. Llenamos los papeles que nos pidieron. Nos comentaron que los resultados se demorarían unas dos semanas mínimo.No quisimos inmiscuir en esta ocasión la clínica de la hermana de Yaro dado que deben estar vigilando, entre menos nos vean, más segura estará su hermana. Me gustó mucho que en todo momento Jabir mantuvo mi mano entre las suyas.Al salir del laboratorio nos dirigimos al aeropuerto a las afueras de la ciudad, esperamos a que ingresaran a la sala de esp