Y eso hizo, mis ojos fueron cubiertos con algo que no vi. —No me apretó mucho, pero su supo subirlos, no veía nada. Después me desnudó por completo, y tanto sus manos como su boca en cada parte de mi cuerpo hicieron estragos.Su lengua jugando entre mi humedad, me sacó muchos jadeos, era un experto al dar placer con su boca. Algo que adoraba de él, era su dedicación para darme placer hasta hacerme gritar. Hasta hacerme llamarlo e implorarle que ingrese a mi cuerpo.Hoy no me dará el placer de darle placer, el disfrutar de su dureza en mi boca. Solo quiere verme a mí disfrutar. Toda mi piel vibraba y se erizaba cuando se fundió en mi cuerpo, cuando se abrió paso en mis paredes internas.Estar con los ojos vendados aumentó esas sensaciones, se sentó, me tenía cargada y sin salirse de mi cuerpo me puse a cabalgar sentada. Mis movimientos eran marcados por sus manos en mis caderas, amaba tenerlo dentro de mí, amaba todo de él.No nos detuvimos hasta lograr nuestro placer. Y algo que me pa
Tenía a la morena dándome placer con su boca en mi miembro. Pensé que se pondría de digna, pero no, apenas me la trajeron y le dijeron que había sido yo quien le pagó la cuantiosa fianza me ha dado increíbles mamadas. Algo que en lo particular me gusta mucho y sin decir lo condescendiente que ha sido en la cama desde hace dos noches que llegó. Aunque no serpa la única.Mientras se estaba formando el gran problema con Tiburón y la captura de Ramón, saqué un As bajo la manga para joder a esos putos capitanes. —me sacó un gemido. Sí sabia chuparla—. Estábamos en el balcón de una finca cafetera. Aquí me podía quedar mucho tiempo, nadie sabe de ella. Solo Sabueso y mi hermano. Fue la finca de nuestro abuelo. Pero por quedar tan lejos nunca se ha usado supuestamente—. Solo hay hombres custodiando y empleadas. Si nos ven no me importa, al contrario… me gusta. Con Amelia lo hacía.—Mira hacía el panorama y súbete.Así mirada ti trasero y podría tocarle los senos. Amo el sexo. No hay nada que
Estaba con mi tío en su habitación, me encanta hablar con él. Siempre lo he hecho, así que no era nada nuevo.—¿Has hablado con tu hermano, Onely? —Sí, está feliz en Alemania. Menos mal está lejos de todo. Él y ustedes, aparte de mi marido y futuro hijo, son todo lo que necesito.—Es lo que importa cariño. Sacaste mi problema cardíaco.—El de la familia. Según sabemos, el de Emilio es igual. —suspiré —Ahora, ¿Quién sabe dónde lo encontraremos?—¿A qué te refieres? —miré hacia la puerta. Acababa de meter la pata—. No has sido imprudente.—Si lo fui tío. No debo traerte tales problemas. —Le di un beso en la frente.—Onely, por favor. Padeces de lo mismo que yo, y sabes lo molesto que es qué no te digan nada por miedo a que te pase algo. —tenía razón.—Y usted es un manipulado.—No puedo serlo si te das cuenta de que lo estoy haciendo. Pero dime. ¿No encuentran a mi hermano?—No. Ramón. —hizo un gesto de desagrado al escuchar su nombre.—Perdóname, pero lo consideré un amigo. Y detesto
Mis hermanos me cargaron y las sonrisas abordaron todo a nuestro alrededor. Esta era la familia que adoraba. Almorzamos, y la situación pasaba como si nada hubiera pasado. Por momentos me sentía incómodo, pero la frase de mi mujer me la repetí como un mantra. Ya en la noche Onely cayó en el sueño profundo. No podía dormir y salí por un vaso con agua. Me puse a ver televisión y mi padre llegó —tenía aún el gorro. Por ende, el audífono en el oído.—¿No puedes dormir?—¿Mamá esta dormida? —afirmó.—¿Quieres hablar?—No quiero preocuparte papá, con mantener a Onely a salvo, a mis amigos… Es un hombre malo a quién nos estamos enfrentando. No solo por lo que se ha notificado en los noticieros. —Era el momento de medir su tranquilidad—. Al hombre que mataron en la fiscalía lo vi de frente y Yaro le destrozó el codo. Son unos locos sabes, estaban con máscaras de animales.—¿Animales? —comentó sonriendo.—Así es, son unos hijos de puta, padre. Tengo miedo a que me pase algo.—Pero no paso na
Le marqué de nuevo a Yaro, ellos habían escuchado toda la conversación que había tendió Onely y Jabir. Hablaron de más, pero nadie tomó en cuenta a la madre del piloto y la señora Antonella era muy astuta, nada se le escapa.—Yasar, ya vamos a salir, ya el general mandó un par de patrullas con personal espero que leal para darle seguridad a la señora Carmenza y con la orden de protección emitida por el juez Duarte para que todo quede como que fue por el caso de Amelia y por la información entregada por el teniente Zapata.—Esa es una buena estrategia.—Voy con José. Gamal se queda la frente de la seguridad de todos en la casa finca. Ella me conoce y se sentirá tranquila.—¿A dónde la esconderás?—Por ahora con nosotros. No tenemos dónde dejarla, pero la llevaremos a la fiscalía para que todo quede con una buena cuartada. Rendirá declaración. Cuando puedas escríbele a Onely no llames a Jabir, deja que sea él quien lo haga cuando lo crea conveniente.—Si señor. Entonces les notificaré.
Los hombres se habían ido. Mi suegra era increíble. Una mujer con una personalidad fuerte, alegre, desbordaba amor por su familia. Por eso Jabir estaba temeroso. El daño para con su madre cuando se entere de la verdad será nefasto.—Linda, ¿me regalas el número de teléfono de tu tío?—Debe comprender que por seguridad no puedo darle su número, pero puede llamar de mi celular. ¿Le parece?—Lo entiendo perfectamente. —Me mostró el viejo celular que tenía—. Este es el que nos tiene permitido Jabir para que no nos encuentren. Pero debo hablar con él. No he dormido, hasta tuve pesadillas y desvelé a Juan Carlos. Aún no puedo creer cuan zorra fue Amelia.» Me engañó y dejo mi apellido a un lado si lo que vio Carmenza no fue algo parecido. En verdad me cuesta entender la infidelidad, si ya no funciona una relación es mejor separarse.—Él se quedó por amor a sus hijos,—Pero no lo son.—Él no lo sabía y cuando se enteró le dijo a ella más no a los hijos porque él los amaba como tal. Eso no se
He estado detrás Jabir todo el tiempo. Salvo por cinco horas en la noche para dormir. Ahora esperaba a que el piloto saliera del baño de hombres a donde siguió a su padre. Lo vi salir y por sus expresiones supe lo muy enojado. Tomé mi celular.—Cálmate, solo dos días más.—Estaba hablando con la Araña, grabé todo, pero acabo de comprobarlo.—Faltan dos días. Debes sacar a Onely de aquí y luego si nos vamos contra él, por ahora resiste como hasta ahora.Terminé la llamada cuando su hermano le entregó la bolsa de regalo y se pusieron a hablar, a los cinco minutos más tardes llegó su padre con refrescos. El resto de la tarde fue tensionante por parte de mi amigo. Los seguí hasta llegar a la casa y yo me fui a mi refugio, un lugar alejado un poco de la casa, pero a la distancia donde podía disparar en caso tal.Gracias a los árboles me podía camuflar, los veía ingresar, luego salir. Se llegó la noche. Aquí podía pasar la noche, tenía una bolsa de dormir térmica. Comida enlatada. Como si f
Me di cuenta de que algo había pasado, estaba en la cocina preparando algo de chocolate cuando Gamal salió corriendo como alma que llevan al patas detrás. ¡Por Dios bendito! Que no sé nada malo y que mi Chocolate precioso esté a salvoMe acerqué al búnker y Yaro le daba órdenes para que se pudiera arreglar el tema y enviarle a Yasar los permisos, las amenazas y todo lo concerniente para que Jabir no estuviera en la cárcel y pudiera salir mañana. Ya hoy no pueden hacer nada.—Mierda, mierda. Muchos de la documentación de permisos internacionales estaban en la agencia.—Chicos ¿puedo ayudar?En mi recámara se había acomodado doña Carmenza quien mañana iría a declarar a la fiscalía. Teníamos tantas cosas por hacer. Con ella he hablado mucho, de hecho, se quedó esperando el chocolate. —Amira, hoy no es mucho lo que podemos hacer. Pero mañana puedes venir con nosotros a la agencia y te encargas de mandarle lo que Yasar y el abogado necesite, mientras yo voy a la fiscalía a llevar a la se