Le marqué de nuevo a Yaro, ellos habían escuchado toda la conversación que había tendió Onely y Jabir. Hablaron de más, pero nadie tomó en cuenta a la madre del piloto y la señora Antonella era muy astuta, nada se le escapa.—Yasar, ya vamos a salir, ya el general mandó un par de patrullas con personal espero que leal para darle seguridad a la señora Carmenza y con la orden de protección emitida por el juez Duarte para que todo quede como que fue por el caso de Amelia y por la información entregada por el teniente Zapata.—Esa es una buena estrategia.—Voy con José. Gamal se queda la frente de la seguridad de todos en la casa finca. Ella me conoce y se sentirá tranquila.—¿A dónde la esconderás?—Por ahora con nosotros. No tenemos dónde dejarla, pero la llevaremos a la fiscalía para que todo quede con una buena cuartada. Rendirá declaración. Cuando puedas escríbele a Onely no llames a Jabir, deja que sea él quien lo haga cuando lo crea conveniente.—Si señor. Entonces les notificaré.
Los hombres se habían ido. Mi suegra era increíble. Una mujer con una personalidad fuerte, alegre, desbordaba amor por su familia. Por eso Jabir estaba temeroso. El daño para con su madre cuando se entere de la verdad será nefasto.—Linda, ¿me regalas el número de teléfono de tu tío?—Debe comprender que por seguridad no puedo darle su número, pero puede llamar de mi celular. ¿Le parece?—Lo entiendo perfectamente. —Me mostró el viejo celular que tenía—. Este es el que nos tiene permitido Jabir para que no nos encuentren. Pero debo hablar con él. No he dormido, hasta tuve pesadillas y desvelé a Juan Carlos. Aún no puedo creer cuan zorra fue Amelia.» Me engañó y dejo mi apellido a un lado si lo que vio Carmenza no fue algo parecido. En verdad me cuesta entender la infidelidad, si ya no funciona una relación es mejor separarse.—Él se quedó por amor a sus hijos,—Pero no lo son.—Él no lo sabía y cuando se enteró le dijo a ella más no a los hijos porque él los amaba como tal. Eso no se
He estado detrás Jabir todo el tiempo. Salvo por cinco horas en la noche para dormir. Ahora esperaba a que el piloto saliera del baño de hombres a donde siguió a su padre. Lo vi salir y por sus expresiones supe lo muy enojado. Tomé mi celular.—Cálmate, solo dos días más.—Estaba hablando con la Araña, grabé todo, pero acabo de comprobarlo.—Faltan dos días. Debes sacar a Onely de aquí y luego si nos vamos contra él, por ahora resiste como hasta ahora.Terminé la llamada cuando su hermano le entregó la bolsa de regalo y se pusieron a hablar, a los cinco minutos más tardes llegó su padre con refrescos. El resto de la tarde fue tensionante por parte de mi amigo. Los seguí hasta llegar a la casa y yo me fui a mi refugio, un lugar alejado un poco de la casa, pero a la distancia donde podía disparar en caso tal.Gracias a los árboles me podía camuflar, los veía ingresar, luego salir. Se llegó la noche. Aquí podía pasar la noche, tenía una bolsa de dormir térmica. Comida enlatada. Como si f
Me di cuenta de que algo había pasado, estaba en la cocina preparando algo de chocolate cuando Gamal salió corriendo como alma que llevan al patas detrás. ¡Por Dios bendito! Que no sé nada malo y que mi Chocolate precioso esté a salvoMe acerqué al búnker y Yaro le daba órdenes para que se pudiera arreglar el tema y enviarle a Yasar los permisos, las amenazas y todo lo concerniente para que Jabir no estuviera en la cárcel y pudiera salir mañana. Ya hoy no pueden hacer nada.—Mierda, mierda. Muchos de la documentación de permisos internacionales estaban en la agencia.—Chicos ¿puedo ayudar?En mi recámara se había acomodado doña Carmenza quien mañana iría a declarar a la fiscalía. Teníamos tantas cosas por hacer. Con ella he hablado mucho, de hecho, se quedó esperando el chocolate. —Amira, hoy no es mucho lo que podemos hacer. Pero mañana puedes venir con nosotros a la agencia y te encargas de mandarle lo que Yasar y el abogado necesite, mientras yo voy a la fiscalía a llevar a la se
No vi a mi padre. He estado en una celda, ya he dado indagatoria. Me mantuve en el protocolo de Yaro Segurity. Sé que el señor Juan Carlos no va a dejarme solo, y esto le debe de estar pesando en el alma. Lo vi en su rostro, en su mirada.No creo cambie, de hecho, ya no hay nada que me haga verlo de manera diferente a la realidad: un asesino, un psicópata, un infiel, un narco, un ser despreciable ante las enseñanzas de lo que él mismo nos había enseñado.Esto era en respuesta por lo dicho a su enemigo por celular, no me gustó el decirle del estado de Onely. Solo espero Yasar con lo escuchado en las conversaciones y lo que le envíe en el centro comercial, sepa que bebía cuidar a mi familia.Espero les esté dando protección desde lejos, en mi ausencia, a mi mujer y a mi madre. No creo que él desee emparentar con su máximo enemigo como nos comentó Ramón. Y eso pone a mi mujer en la mira y no sería el primer nieto que aniquila, ya acabó con la vida del hijo de Lía. Tenía una extraña sensa
Desperté muy cansada, y la razón fue por habernos acostado tan tarde anoche hablando con Lía y Amira de lo ocurrido con Canadá. Del golpe que la Araña le dio a Sabueso y por eso nos acostamos pasada la una de la madrugada.La señora Carmenza quien aún no salía del asombro ante la verdadera cara de Juan Carlos y los alcances de mi madre lastimosamente, pero le contamos todo lo que debía saber y le pedimos el favor de que hablara con la verdad en la fiscalía. Y en esa diligencia era que se encontraba Yaro, quien tenía el viaje a Bogotá a primera hora y debía salir casi que en la madrigada.Ellos estaban acostumbrados a dormir poco, levantarse temprano si era el caso. Mi marido solo dirimió dos horas y media. Miré la hora, eran las siete de la mañana, su lado estaba vacío y frío, hace más de dos horas debió salir. Miré mi celular y tenía un mensaje de voz.«Mujer hermosa, te ves tan provocativa en este instante en que te observo. No sabes lo que deseo no tener que viajar. Nos vemos en la
¡Ea! Ave María. De verdad que esto era una película sin descanso. ¡No!, pero qué mierdero se va a formar en Canadá. Yaro y yo nos quedamos pensativos al escuchar a Gamal contarnos lo que había pasado. Y no me imagino lo que le pasará a ese perrito cuando su mujer lo enfrente.Íbamos para la agencia y en la parte de atrás del auto me encontraba con la señora Carmenza quien ya había testificado en contra de Sabueso... del señor Juan Carlos Montoya y en estos días saldría la citación a la fiscalía. Esto se pondrá color de hormiga.Ya no sabemos por dónde nos van a llegar los dardos y mira que tratamos de cubrirnos de la mejor manera, pero ni mierda que logramos salir ilesos. Por ahora deseo que Onely tome un avión y salga con dirección a Colombia. Ella no puede estar en esas preocupaciones de manera directa. —Ya Salomé y Lía están comparando las huellas faciales. No sabemos quién sea el malo que ingresó a la clínica. A lo mejor son de los hombres que viajaron con el hijo de mierda.—Gr
Teníamos el celular en altavoz en el búnker para que todos escucharan lo que nos decía Amira, mi marido besó mi hombro, esos ojos negros los estaba amando, Gamal se veía muy serio.—Ya vamos de regreso, Yaro es el que está, que se lo lleva el demonio. La señora Carmenza gracias al frío tenía tres buzos más la blusa. Eso no le produjo quemaduras más allá, es como su hubiera ido a la playa y se insoló. Un par de días de cuidado y nada más.—¿Esa loca dónde está? —Gamal también se veía enojado.—Mientras atendían a la señora Carmenza Yaro y el equipo jurídico de Yaro Segurity puso todas las denuncias y demandas por haber intentado matar a una clienta. Ahora si no verá la libertad, ni con una fianza. De la clínica se va directo a la cárcel. Y no le he contado nada a Yasar. Por favor, no lo hagan hasta que esté de regreso, él debe permanecer concentrado cuidando a Onely. La situación en Canadá es mucho más compleja con lo que ocurrió.—Un caso no desmerita el otro. No sabemos si ella actuó