Akira

Cada milésima de segundo que transcurría me faltaba el aire. Luchaba por poder moverme y liberarme, pero era imposible. Su lengua me tenía completamente inmovilizada. Solo me quedé ahí, a la espera que todo acabara.

Las energías cada vez eran menos, la fuerza se escapaba de mi cuerpo con la presión que ejercía en mi cuello y me acercaba aún más a ella. Llena de impotencia y de dolor, dejé que las lágrimas brotaran de mis ojos. Me sentía tan patética al no poder hacer nada por ayudarlo y liberarlo de ese monstruoso demonio. Pensaba que podía hacer algo por él, pero realmente estaba muy equivocada. No hay nadie que pueda vencer el mal, cuando este ya ha sido sembrado y cosechado en la tierra.

Desvié la mirada h

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP