Amber.
Los días han pasado y yo sigo trabajando donde mismo, día tras días la misma historia llegó me pongo la falda, lavo los platos, se acaba mi turno me pongo el pantalón y me voy en mi bicicleta a mi departamento y al dia siguiente es lo mismo, estoy ida en mis pensamientos mirando la espuma provocada por el jabón en el agua de los trastes sucios cuando alguien me toca el hombro y me hace saltar en mi lugar, volteo muy asustada y es de nuevo el dueño de restaurante el señor Edward.
-Dios mío señor qué susto me dio.
-Discúlpame pero necesitamos otra vez tus servicios como camarera.
-Disculpe señor sí le paresco muy entrometida pero por qué.
-Bueno volvió sierto comensal.
Lo pienso un poco y viene a mi mente otra vez ese molesto y odioso rubio platinado y digo un gran.
-Ooooh y déjeme adivinar nadie lo quiere atender de nuevo.
-Sí así es y para que veas que soy jefe generoso cada vez que él venga y tú aceptes atenderlo te pagaré como camarera ese día qué opinas.
-Póngalo por escrito y acepto señor.
-Que chica tan inteligente, valla y cuando regreses tendré listo el contrato.
-Está bien señor.
Hago lo mismo de la vez anterior pero para mí sorpresa esta vez vienes solo, me parece bien ya que su hermano en verdad me da más miedo que el, no sé como que en sus ojos se ocultan un pequeño secreto y las personas con secretos son las más peligrosas, llegó y finjo felicidad de volver a ver a este imbécil.
-Hola buenas noches es un gusto tenerlo aquí de nuevo, el señor desea ordenar algún vino mientras mira el menú o quiere que vuelva después de que lo lea.
Me mira y después voltea a su alrededor como si buscará a alguien.
-¿Que no hay un mejor mejor mesero.
*Hay dios este hombre está pidiendo a gritos que lo golpeé, maldición.
-Lo siento señor pero los demás meseros están ocupados.
-Entonces me tendré que conformar contigo cierto, espero que seas bastante competente no me gustan los inútiles.
Pellizco la parte interna de mi mano para no gritarle alguna estupidez en el rostro.
-Descuide señor soy tan competente como usted.
Al parecer no esperaba que le contestaras ya que voltea a verme de pies a cabeza y solo da un resoplido, tome su orden y me fui de ahí entre a la cocina dejé la orden y me metí al cuarto de carnes frías a dar un grito de desesperación que creo que toda la cocino escucho, tenía ganas de golpearlo, darle en el maldito hocico un puñetazo aunque tendré que subirme a una silla para poder abofetearlo, salgo de ahí Fhilip me mira extrañada y yo solo also un pulgar para darle entender que estoy bien, lavo un poco los trastes para entretener mi mente en lo que está su orden, me indican que está lista y me retiro de los platos y me pongo el otro mandil, tomo la orden y voy hacia su mesa se la dejó, me mira y me extiende la cuchara.
-Pruébala.
Este hombre tiene serios problemas mentales pensé que solo era yo, tomo bruscamente la cuchara de su mano y tomo un trozo de comida y me la meto en la boca, el solo alsa una ceja y me fulminar con la mirada y yo se la devuelvo, nunca me dejo intimidar por los imbéciles y este no sera el primero.
-Se le ofrece algo más señor.
-Lárgate.
Me doy la vuelta y regreso a la cosina, realmente quiero golpearlo, lo bueno que comer rápido y se larga.
Ángel.
Decidí salir a comer al restaurante que mi hermano escojido la última vez la comida era muy buena, esta vez está más despejado que la última vez, me siento a esperar algún mesero y para mí sorpresa me volvió a atender la misma mujer de baja estatura que la última vez.
Es una broma esta mujer tiene bastante carácter, es inteligente ya que no a perdido la compostura con los insultos que le e soltado, supongo que nadien más me quiere atenderme y es la única que tiene el valor de hacerlo, tal vez regrese luego para ver hasta cuándo me soporta hasta que explote, presentar una queda sobre ella y haga que la despidan, será divertido ver su cara de decepción y desesperación.
Amber.Los días pasan y se hacen semanas y las semanas se hacen meses y este maldito llamado Ángel sigue viniendo y como nadien más lo quiere atender me toca lidiar su mal genio y soportar sus malditos insultos, estado tentada un parde veces en darle unas buenas bofetadas del coraje y a él le produce gracia hacerme enojar ya que lo veo cómo se ríe con satisfacción es un maldito infeliz.Hoy llego con unos papeles que ponen en la mesa en una carpeta y solo ordena dos cafés negros tal vez espera alguien más llegó y le deposito su café enfrente y el otro cerca, tal vez llegará después su hermano y decido irme antes de que él venga ya que a él si le tengo miedo pero su voz me detiene.-Dime a quién mataste.Eso hace que mi pulso se acelere y volteo a verlo dicinulando que estoy nerviosa.-De qué habla señor yo nunca he matado a
Amber.No puedo creer que este maldito imbécil sepa de mi pasado tendré que seguir soportando lo y atender lo mejor que pueda para que no valla a decir nada de eso o tener que deshacerme de el aunque no creo que sea tan fácil siempre va acompañado de un guardaespalda pero que estoy diciendo tengo que alejar esos pensamientos de me mente, estoy terminando de lavar los platos y me vuelven hablar, doy un suspiro ya que tendré que verle la cara de nuevo, ya me an dado un sobrenombre la sirvienta del nazi parece que no se les pudo ocurrir algo más inteligente aunque es directo, insultante les doy un punto por eso, voy y para mí sorpresa llegó con una chica.-Wow al parecer trajo su novia interesante tal vez se comporta un poco mejor esta vez.Llegó y saludo como siempre cordialmente.-Hola buenas tardes aquí les dejaré los menús quieren un vino o alguna bebida en lo que m
Amber.Cuando me acerco a la mesa escucho como al parecer están discutiendo, no me sorprende al tener un novio tan ojete y vale madres cómo ese imbécil que está sentado al lado de ella yo también tubiera problemas con solo verle la cara de estúpido, ganas de tirar le la comida ensima pero la mujer al parecer lo termina, al levantarse y pasarme por un lado me re empuja haciendo que la charola se me venga encima, escucho como ese maldito desgraciado se está riendo de mí y luego intentar ayudarme a levantar, esta imbécil sí cre que voy a aceptar su ayuda, golpeó su mano me terminó de levantar sola y empiezo a recoger los pedazos de platos y comida del suelo cuando escucho que alguien me habla y es Edward el dueño del lugar.-Disculpe señor Ángel yo arreglo estoTomo la bandeja y el me mete a la cocina del brazo.-Me podés decir qué car
Ángel.Estoy comiendo y siento su mirada en mí desde hace rato, also la mirada y efectivamente me está mirando mientras come, tiene una cara de fastidio qué se mira a gran distancia, qué felicidad al parecer está llegando a su límite.-Qué algun problema señorita Amber.-No ninguno señor Ángel solo que se extraño comer con un genocida.Vaya va a comenzar a insultarme.-No soy un genocidio señorita yo solo cumplía órdenes.-Si eso hace que pueda dormir en paz dígaselo hasta el día que fallezca señor.Doy una risa nasal, más tarde intento aser una conversación un poco normal ya que siento las miradas de los demás comensales alrededor de nosotros no sé si es por mí o por el hecho de que prácticamente le pague para que comiera conmigo, no es que me agrade su compañ&i
Amber.Ángel sigue viniendo y como siempre me pide que pruebe su comida hasta cuándo va a dejar de desconfiar que lo estamos envenenando aunque si yo fuera él ni siquiera saldría de mi casa y mucho menos a comer, dicen que es de una familia pudiente supóngo que a de tener servidumbre que la prepare mejor comida que la de aquí, a su gusto y sin estarle viendo la cara a nadie, hay a quién engañó lo que quiero es que me deje de joder, cada vez que lo atiendo me insulta aunque últimamente le estoy devolviendo los insultos pero de una forma amable ya que no quiero que me despidan.Estoy en el trabajo y como siempre lo atiendo de buen humor.-Buenas tardes señor Ángel desea ver el menu aunque creo que ya se lo sabe de memoria.-Sí, sí me lo sé y esta vez solo quiero una rebanada de pastel y un café de casualidad no tendrán el periódico d
Ángel.Hoy como muchas de las noches tengo insomnio ya son las 11:30 de la noche y no he podido dormir así que decidió dar un paseo en el auto y como Nicolás está dormido son de las pocas veces que puedo salir solo y armado ya que es por mí seguridad, conduzco sin rumbo por la ciudad y miro a una mujer usando una gabardina guinda bastante pequeña y la reconozco de inmediato mi mesera, voy a conducir cerca de ella para mojarlo con alguno de los charcos que ha dejado la lluvia de hoy pero me doy cuenta como un tipo se le acerca y al parecer está diciendo palabras que no son de su agrado se ve por la expresión de su cara, no muestra otra cosa más que odio y desprecio por el hombre parado enfrente de ella, los observó esperando que ella se vaya pero para mí sorpresa el hombre intenta tocar su mejilla Amber aparta su mano y le da un puñetazo en el estómago que lo hace doblar y le da u
Amber.Los días han pasado y cómo lo pedíje comer con Ángel y hablarle como a una persona normal me ha traído grandes problemas los pocos compañeros de trabajo que me hablaban ahora me ignoran y me miran de reojo el único que sigue hablándome es Fhilip, he estado un poco estresada y como este es el único día al mes que me dan libre tecido salir a tomar una cerveza, claro solamente una y me regreso a mi casa, intento dormir un poco pero últimamente estado teniendo pesadillas con la muerte de mi hermana así que pues se me hace algo muy dificil así que ignoro el intento estúpido que tengo de dormir, me pongo una gabardina, unos zapatos y salgo a caminar por la calle es algo peligroso viendo la hora pero no dudare en defenderme con el puñal que llevo siempre conmigo, un hombre me molesta y se que está hebrio por el aroma que despide su cuerpo con un padre golpes lo derr
Amber.Gracias a la crema para las quemaduras que me dio el señor Ángel mi mano ya está mejor la próxima ves que lo vea debo de tragarme mi horgullo y darle las gracias y estoy segura que no me dejara olvidarlo o tal ves me pida algo a cambio.Tengo ya casi un mes que no veo a mi tormento y la verdad los días se me asen aburridos pero tranquilos, tal vez por fin me dejara en paz o tal vez le ocurrió algo pero lo dudo ya que esa noticia se esparceria como pólvora.Ángel.Cuando Amber se va le hablo a Nicolás para que me compré algo, tomo una servilleta y saco un bolígrafo y comienzo a notar el nombre de un medicamento que a mí me funcionó muy bien durante la guerra le doy el papel a Nicolás.-Ve a comprar esto por favor.Al regresar Nicolás escribe una nota para dejar dentro de la bolsa de papel."Úsala tres veces al dí