[BRISA]Todavía no puedo creer que me vaya a ir de este departamento. Sé muy bien que soy solo una inquilina de este lugar, pero me costó mucho trabajo conseguir todo esto que hoy siento mío. Todavía recuerdo el primer departamento al que me mude sola y lo pequeño que era, y ni hablar de los muebles de segunda mano que pronto se dañaron. Sin embargo, al mismo tiempo sonrió ante los motivos que me hacen ir de aquí y es que después de todo si tuve una historia romántica como esas que alguna vez soñé.—Me encanta tu departamento— Escucho su voz y al voltear, lo veo observando las fotografías que tengo en el muble de la sala.—Sabes, justo pensaba en lo mucho que me tomo estar aquí. Hacia memoria de mi primer departamento, de los muebles feos que tenía, de la comida barata que comía porque no quería perder mi independencia… Son muchas cosas las que se me vienen a la cabeza— Le cuento y se acerca a mí.Franco me abraza por la cintura y me mira —Tengo la sensación de que me gane la lotería
[FRANCO]Estrenar su cama, tiene como definición hacer el amor de la manera más increíble posible. Los besos no daban abasto para compensar el amor que sentimos los dos, esta conexión que tengo con ella es tanta, que siento que la conozco de otras vidas. A veces siento que Tammy, me la envió para hacerme feliz, para concretar todos aquellos sueños que nosotros dos dejamos a medias. No es que en Brisa vea a Tamara, sino que veo en sus ojos ese cartel fluorescente que me dice este es el lugar correcto. Es algo extraño lo sé, pero hay veces que el amor va mucho más allá de la muerte e incluso de lo que nosotros creemos que es el amor.A veces pienso qué tal vez, debía pasar por todo aquello qué pasa con Tamara para comprender que el corazón es inmenso. Hoy, me veo aquí con Brisa, y me doy cuenta de que amar después de haber amado tanto a otra persona es más valioso incluso que el amor que sentiste por aquella primera persona. Antes de Tamara, no existía nada, mi corazón está vacío y abie
[FRANCO]Al día siguiente: 29 de octubreHoy se podría decir que es el primer gran día de los varios que nos esperan. No tengo ni la más mínima idea de cómo es que va a reaccionar su familia cuando les digamos que estamos casados, pero aquí estamos parados frente a la puerta de una muy bonita casa, jugando a ser valientes esperando a que nos abran. Puedo sentir como mi esposa aprieta mi mano como tratando de sacarse los nervios de encima, pero para ser sincero, no creo que esto funcione. Respiramos profundo unas cuantas veces, hasta que de repente escuchamos el sonido de la puerta y allí siento mi corazón acelerándose al máximo.Una mujer de cabello oscuro y ojos grises nos mira un poco confundida, e intenta entender qué es lo que ocurre aquí —Hija que bueno que has llegado—La saluda y Brisa me suelta solo un momento para abrazarla mientras que yo sigo cargando a la pequeña bolsa con los regalos.—Aquí estoy ma, te extrañaba muchísimo—Le dice mientras que de a poco se van soltando y l
[FRANCO]Estoy completamente angustiado mientras que caminó de un lado a otro en esta sala de espera donde a lo lejos se escuchó como su padre se sigue quejando de que su hija se haya casado con un miembro de la familia San Martín, esa que según él arruinó su vida completa. En mi cabeza hay demasiadas cosas dando vueltas, sobre todo no poder entender de que es lo que está hablando ya que para mí todo ese asunto es algo completamente desconocido. Por otra parte, dejo esos pensamientos a un costado para solamente preocuparme en mi esposa, en esa mujer que se han llevado hace apenas unos momentos completamente inconsciente por un golpe en la cabeza.Me muero de la angustia con solo imaginar que la puedo perder por algo como esto. Tal vez es que mi experiencia en el amor no es la ideal, y que las perdidas forman parte de ello. No me atrevo ni siquiera a acercarme al padre de Brisa, no cuando siento que esto también es su culpa por haberme atacado de esa manera sin tener en cuenta que ella
[FRANCO]Enterarme de que Brisa y yo vamos a ser padres, ha sido sin duda alguna la mejor noticia que he recibido en muchísimo tiempo. Sin embargo, no todo es felicidad tal y como lo anticipo ella. El obstetra que ha venido a verla ha sido muy claro, el embarazo tiene grandes posibilidades de no llegar a término, no si ella no se cuida como es debido. Escucharlo decirnos estas cosas ha sido un golpe fuerte, pero al mismo tiempo sé que vamos a hacer lo imposible para que ese bebé nazca. Los dos lo deseamos con todo el alma y por supuesto que no queremos volver a vivir una desilusión como la que ya hemos pasado en nuestras vidas.El silencio se vuelve rotundo cuando el obstetra cierra la puerta y nos quedamos solos. Es difícil de comprender como se puede sentir felicidad y preocupación a la vez, todo sin contar lo que pasa cruzando aquella puerta. Brisa me mira —Lo siento, te aseguro que no sabía que las cosas serian así— Murmura con culpa y de inmediato me siento en el borde de la cama
Durante gran parte de tu vida, te preguntas muchas veces ¿Cuándo conoceré al amor de mi vida? ¿Cómo será ese hombre que me quitará el sueño? ¿Lo podré reconocer cuando aparezca o lo dejare pasar por no darme cuenta?Sueñas muchas veces con un encuentro mágico de esos que ves en las películas de Hollywood, pero la realidad es que la vida no es como las películas. No vas caminando un día por la calle y te tropiezas con un desconocido y le vuelcas una taza de café y él clava su mirada en ti mientras que de fondo suena una de esas canciones que te llevan a suspirar como una tonta. La realidad es que ese desconocido probablemente te diga que eres una idiota por no fijarte por donde caminas y te recrimine por haberle manchado su camisa favorita, y por más que tú trates de disculparte, él no entenderá que fue simplemente un accidente. Asi
La brisa del viento en este puerto hace que mi cabello se mueva al ritmo que este dictamina y si no fuera por el sombrero que llevo puesto, sería un enredo total. Miro hacia el frente después de acomodar un mechón que me lo impedía, y no puedo creer lo que estoy a punto de hacer. El inmenso crucero que tengo frente a mi será mi hospedaje por los próximos quince días, y con solo pensar que no conozco a absolutamente nadie, me pongo un poco nerviosa, pero necesito esta aventura, atreverme a cosas nuevas a disfrutar de mi libertad…Miro la tarjeta de embarque, mi pasaporte, y casi como diciéndome que esto será lo más increíble que hare por mi, me atrevo a subir por la rampa de abordaje del crucero nombrados “The Princess of the Sea.” Pacientemente voy siguiendo los pasos de los pasajeros que tengo frente a mi, hasta que llega mi turno de presentar los documentos que tengo en mi mano.
Me miro al espejo asegurándome que el corto vestido rojo que he escogido para mi primera noche en el crucero este perfectamente acomodado, y una vez que lo confirmo, voy por mi pequeño bolso, y salgo del camarote. No me voy a mentir, la verdad es que verme sola entre medio de tanta gente me resulta bastante incomodo, sobretodo cuando hay tantas parejas que de seguro la deben estar pasando de maravilla y disfrutando de la experiencia. Si tan solo hubiera venido con amigas, esto no sería tan raro, pero cuando todas están casadas y tienen hijos, estoy puede hacerse un poco complicado. Sus prioridades han cambiado y lo entiendo, pero siento que ya no hay nada más que les importe hasta el punto de que tengo la sensación de que se han olvidado de ellas mismas.Trato de sacudir todos estos pensamientos de mi cabeza y sigo caminando. Estoy indecisa, no sé si ir al casino o aun espectáculo… trato de tomar una decisió