Orson Walker
Entre las cosas que había descubierto en ese hueco de la pared, recordé unas fotos de la fachada de una propiedad, las metí ya que decía que era de Inglaterra y estaba en mi maletín, bajé las escaleras principales del hotel para llegar hasta el auto que había rentado, me limpié bruscamente mis mejillas, quité la alarma y busqué, estaban las fotos de
Evelyn, de él con Brice, maldita zorra, copia de correos, los cuales no entendí pero podrían tener alguna clave, deben de servirle a Jack y a la policía. Pasé foto tras foto, papel tras papel, hasta que vi la foto adjunta a una copia sellada, giré la foto para confirmar si había algo detrás anotado, y sí, era la letra de Chase, había puesto unas señas para encontrar la casa, empezando por el letrero que dice que no se ve camino a la casa, pero está, vuelta a la derecha hasta llegar a un kilómetro, luego a la izquierda. Miré hacia la entrada del hotel.Evelyn Peterson Desperté por un olor fuerte, me moví bruscamente y solté un quejido, cuando el olor insistió en permanecer en mi nariz, cuando abrí los ojos, Chase estaba sentado sobre sus talones, guardó el pañuelo en una caja. —Chase…—mi labio inferior tembló. —Déjame ir…—él negó con una gran sonrisa. —Evelyn, ¿Por qué te dejaría ir? ¿Sabes todo el tiempo que he esperado para tenerte para mí? —negó con otra sonrisa, se cercioró de que el amarré en mis manos que estaban en mi regazo, no se fuese a soltar, apenas podía mover las piernas con la falda, noté que miró mis piernas, las moví apenas y puso una mano sobre una de ella. — ¡No me toques! —grité histérica, pero él me ignoró. —Lo único que me consolaba era que al vernos, nuestros labios se tocaban por unos segundos…—su mirada oscura caminó por todo mi cuerpo hasta dejarla en mi mirada. —El juego finalmente se ha terminado y tú er
Jack Brooks Hospital St. Thomas, Londres, Inglaterra Un par de horas después de la llegada. Tenía mis manos entrelazadas, mi frente recargada contra ellas, los ojos cerrados, pensando que ya quería salir de esta pesadilla, recordé todo el momento que había pasado con Evelyn, desde su golpe que remodeló mi nariz, hasta esa mirada hace horas atrás cuando bajó del auto frente a aquel hotel antes de verse con Chase en el restaurante. —Familiares de la señorita Peterson. —anunciaron, retiré mis manos para buscar quien era, mi madre, mi padre, Logan, Michael, mi hermana y su marido, se alertaron, todos nos levantamos de la sala de espera en busca de respuestas. —Es mi pareja. —dije inmediatamente, la mujer vestida de ropa azul, se retiró el gorro, luego soltó un largo suspiro. —Pudimos estabilizarla, perdió bastante sangre…pero lo logramos. —me miró detenidamente. —Lamento informarle que debi
Un año después… New York, Estados Unidos. La oficina siguió luciendo la misma que hace un año atrás, solo que en aquel mueble de cristal a espaldas de la silla de Evelyn, estaba adornado un par de fotos más, una de ellas, con un marco negro, con destellos plateados, la foto de Orson, era él y Evelyn, ambos reían abrazados, una rosa blanca la acompañaba en aquel pequeño florero de cristal. El segundo portarretrato, era de Logan y su ahora esposa, Maya Brooks, aquella mujer de cabello rizado, piel chocolate y ojos grises, tenían ambos la mano en el cuchillo sobre aquel pastel de boda, reían felices. La tercera foto, era de William, Ellie, Jack, Logan e Idaly Brooks en la tercer sucursal de Editorial Brooks, en Madrid, España, Idaly se había unido al negocio de las editoriales después de su divorcio exprés, así que ella estaba al mando de e
Evelyn Brooks Un año después del matrimonio. Orfanato Hermanas de la caridad, en New York. — ¿Por qué tardan tanto? —pregunté a Jack, él puso su mano en mi rodilla para que dejara de moverla repetidamente, me mordí la uña. —Apenas lleva unos minutos que salieron, tranquila. —Jack pasó un brazo por encima de mis hombros y me acercó a él, dejando un beso en mi coronilla. —Tranquila… —Estoy nerviosa, ¿No estás nervioso? —él sonrió. —Claro que lo estoy, pero debo de mantener a raya esos nervios, amor. —Yo no puedo, lo juro. Es una emoción combinada con esperanza, miedo, felicidad… —Te entiendo, yo también estoy emocionado de que nos hayan hablado para la adopción, —apretó con fuerza mi mano. —Ou, eso duele. —él me soltó preocupado.
Años después Casa en los suburbios de los Brooks-Peterson El agua caía sobre sus dos cuerpos desnudos, las manos de Jack tenían sujetas en lo alto las muñecas de Evelyn, quien se encontraba recargada contra la pared, él rozó los labios de ella, provocando ansiedad. —Bésame…—suplicó Evelyn, levantó su pelvis en busca de contacto, ese movimiento hizo que él sonriera de manera provocativa. —Bésame…—dijo de nuevo, Jack atrapó su labio y lo succionó, provocando un gemido de ella, luego soltó el labio. —No me gusta que me hagan esperar... —Jack soltó las muñecas de ella, se inclinó para levantarla del trasero, rodeó con sus piernas la cintura de él, Jack llevó una mano a su miembro para ponerlo en la entrada de ella. —Vente conmigo…—susurró contra sus labios, luego entró de una estocada en su interior, Evelyn gimió, per
Años después...Boda de JackEvelyn contempló su imagen en aquel espejo de cuerpo completo, se puso el segundo arete y luego se alisó el largo vestido de noche, los nervios estaban a flor de piel, su hijo mayor, ya se había graduado y durante el camino, había conocido a la mujer que caminaría a su lado por el resto de sus vidas.Jack la contempló desde la entrada de la habitación. Su dulce y amorosa Evelyn, había sido hasta la fecha la única mujer que le robaba suspiros, aquellas canas discretas las intentó ocultar al acercarse al espejo mientras las ubicaba.―Te ves hermosa con o sin ellas. ―Evelyn se sintió pillada, miró hacia Jack que sonreía divertido.―No me avergüenzan para nada, solo que...―dejó de evadirse a sí misma, Jack caminó hacia a ella y al
Valentina Brooks PetersonCepillé una y otra vez mi cabello negro, distraída repasando una y otra vez la imagen de mi novio Jasper, con aquella mujer riendo en una terraza de un café en Toronto. Había cambiado su forma de ser hace semanas, y esa imagen, había alertado mi corazón. ¿Acaso se había enamorado de alguien más? ¿Había dejado de amarme? ¿En qué había fallado en nuestra relación? Dejé el cepillo de nuevo en el tocador y miré mi reflejo, presioné mis labios intentando controlar mis emociones, las dudas me inquietaron y esas preguntas sin respuestas solo Jasper puede darme.― ¿En qué tanto piensas? ―escuché decir a mi madre, me volví de medio perfil y vi que ella asomaba su cabeza por la puerta.―En nada. ―sonreí para poder tranquilizarla, pero por su gesto, hab&iacut
Valentina― ¿Terminar? ―el tono de sorpresa de Jasper, me confundió.― ¿Es lo que querías no? Terminar nuestra relación, ―hice una pausa al ver el gesto en su cara. ― ¿No?― ¿Por qué querría terminar nuestra relación?― ¿Tu comportamiento de semanas atrás? ¿La mujer de la terraza en aquel café? Te veías muy divertido, ―presioné mis labios y luego suspiré. ―Lo acepto, me sentí celosa al verte reír de esa manera, hace poco noté que lo habías dejado de hacer a mi lado, entonces…―me interrumpió, sonrió pero no mostró su dentadura. ―Espera, si no quieres terminar, ¿De qué quieres…?―Jasper se inclinó hacia a mí, dejó un beso tierno en mis labios, luego retrocedió para ponerse en una rodilla contra e