DOMINIC
— Entonces, soy toda oídos — dice Sofia con una sonrisa sincera. Sus ojos me dan esa confianza para abrirme a ella, y contarle por primera vez a alguien, todo lo que he guardado en cinco años —. Verás que sacar todo eso que te carcome la cabeza y el corazón, te hará bien.
Como puede verle el lado positivo a todo, no me justifico. Sé que hago mal en hacer lo que hago, pero la excitación me gobierna por sí sola, y es algo que no puedo controlar.
Suspiro y pongo mi cabeza sobre sus piernas. La tenue luz roja ilumina muy poco nuestros cuerpos. Sus manos conscientes o no, acarician suavemente mis cabellos, y algo desconocido y agradable se instala en mi pecho.
— He pasado cinco años tras una pantalla viendo como Loren y Eric practican de sus orgías. Cada vez que ella me enviaba sus vídeos, el corazón se quebraba y se hundía más, dentro del pozo en el cual se encuentra enterrado y hundido en un mar de lamentos. A
SOFIAEstaba tan cómoda hablando con Dominic, que maldigo el momento en que siempre nos interrumpen. En realidad que de corazón deseo ayudarlo en ese problema. En sus ojos puedo ver cada uno de sus demonios; veo como lo persiguen y lo acechan sin compasión. Lo que hace esa mujer no lo puedo describir con palabras, es por ello, que decidí seguir con la venganza. No necesariamente debo acostarme con él. Si Dominic me enseña a seducir de buena manera, solo bastarán un par de toques y exponer a la luz los oscuros deseos del reconocido empresario. Por lo que veo, esa es la manera en la que Dominic quiere vengarse.— Es él, contesta — asiento y me tiro junto a Dominic, quedando sentada sobre la cama.√ ¿Bueno?.√ Hola, hermosa. ¿Me recuerdas?Su voz suena profunda pero calmada a la vez. ¿Tan rápido acabó la orgía a pocos pasos de nosotros? Me pregunto.√ Disculpa, soy mala para recordar. ¿Quién eres?Suelta un pequeño gruñido y mi vientre se contr
Eric esta vestido de manera formal sin corbata, dándole un toque de informalidad a su caro traje de color azul noche, luciendo extremadamente guapo. Su cabello esta perfectamente peinado y sus ojos miel brillan bajo las pocas luces de la cabaña. Su mirada permanece fijamente en mí, como tratando de descubrir algo más. Trago mis nervios con una copa de vino y decido actuar natural.— Entonces ¿Quieres el auto? Por eso me has contactado — sonríe ladeado y muerdo ligeramente mi labio inferior —. Que yo recuerde, en ningún momento te di mi número.— ¿Te parece que quiero el auto? — se inclina hacia atrás en su silla y sonrío —. Fue fácil saber todo de ti.Los nervios invaden la mayor parte de mi cuerpo, pero al pensar en Dominic, me calmo un poco.— Me has investigado — sonríe y niego —. Aquí estoy, Eric. ¿Qué quieres de mí?— Debo conocer muy bien con quien pasar un rato agradable, por así decirlo — Sonríe con malicia y enarco una ceja —. Como lo has dicho
— ¿De que hablas? — pregunto confundida. Se acerca hasta quedar a pocos centímetros de mí. Mi corazón choca bruscamente contra mi caja torácica y mis piernas no me responden para alejarme del demonio que viene listo para atacarme —. Dominic ¿Hice algo mal?.— No te hagas la estúpida, Sofia — me agarra fuerte de la barbilla y frunzo el ceño. Este idiota de mierda quien se cree —. Solo buscas la manera de traicionarme y dejarme por él ¿No es así?.Su problema es serio y tal parece que el alcohol le inunda la verdadera razón.— No, Dominic. Ya te lo he dicho muchas veces, no te voy a traicionar — sus ojos grises o negros en este momento, me miran con un deprecio que hace el corazón doler.— Pensé que eras diferente, pero solo eres una perra más qu
DOMINICSus labios, sus manos, su mirada fija en mí. Todo me provoca un temblor desconocido en el cuerpo, su lengua, sus caricias, sus quejidos, su pesado respirar; Sofia esta convirtiéndose en lo que necesito frecuentemente para saciar mi apetito y deseo sexual. Me cabrea que haya sido ella con él y no conmigo. Conozco tan bien a Eric, que sé que siendo caballero gana puntos con las chicas, siempre fue de aquella manera. Detallista, amable, alegre y agradable. Pero sobre todo calculador para llevarlas a la cama. Lo conozco como la palma de mi mano y sé cuánto le gustó Sofia desde que la vio en la galería. Solía decir que las chicas difíciles y que se hacían de rogar, son las que más rápido caen; obviamente, ganando terreno y todo para abrirle las piernas, usarlas a su antojo y hacer como si no las conociera.Me levanto del sillón y dejo la corbata suelta colgando de mi nuca: la encontraré y el castigo que le daré será poco a com
SOFIANo sabia a donde ir anoche y después de pasar varias horas en las frías calles, fui a casa de Maicol, mi ex novio. Nuestra relación acabo hace seis meses en los mejores términos, y sé que puedo contar con él como un verdadero amigo. Cuando éramos novios todo parecía ser más sencillo y mágico, supongo que el amor se acabo de parte y parte, y eso que, estuvimos saliendo por dos años, los cuáles fueron maravillosos. Maicol es un chico que vale la pena luchar, lástima que ya no sienta nada por él. Cuándo llamé a su puerta y vio que era yo, solo me dio una mirada de; luego me cuentas y sin más; dejó que durmiera en su pequeño apartamento.A quien voy a engañar, no pude dormir pensando en esos ojos que muestran tanto y a la vez, son más fríos que el hielo. Dominic me gusta demasiado, incluso más de lo que debería. Tengo bastante claro, que él es un hombre que solo ama y amará a una mujer, y esa es Loren. ¿Qué puedo hacer yo contra una persona que aún esta ent
Me levanto bruscamente de la cama y empiezo a pensar por donde voy a salir de esta habitación. Miro hacia la ventana y estamos en el sexto piso del edificio, lo descarto, aún soy muy joven para morir. Pero mi lápida ya esta más que hecha, por el diablo que esta peleando con Maicol en la sala.— ¿Qué hago? Piensa Sofia, eres inteligente — digo y me quedo pensando. No tengo nada con Dominic, no tengo por qué huir de él.Enderezo mi espalda y con toda mi sensualidad, salgo de la habitación de Maicol...Me devolveré unos segundos antes de ser tan estúpida y no pensar con claridad...Primero, debí mirarme en un espejo. Segundo, no había necesidad de salir de la habitación. Y tercero, ahora sí estoy muerta.Y aquí estoy frente a la mirada de dos hombres, muy guapos, eso cabe destacar. Mientras unos ojos me ven con la furia más grande del mundo, los otros me cachetean por ser tan despistada y salir en ropa interior de la habitación.Muy tarde me vine a d
Al llegar a su mansión, Dominic me mando a tomar una ducha, y luego de quedar como nueva, bajé a desayunar con él. En un principio creí que me llevaría al apartamento, pero me sorprendió al traerme nuevamente a su casa.Lo miro comer con tranquilidad, mientras esta concentrado en su teléfono; y todo lo que me ha dicho en el auto hace eco en mi cabeza ¿Será que aún esta bajo el efecto del alcohol? Puede ser, y por eso ha dicho todas esas cosas. Lo cierto es, que ya las ha dicho y con ellas, ha hecho remover todo lo que siento por él.Rayos, ¿Qué es lo que siento por Dominic Blaze?:Atracción.Deseo.Pasión.E infinidades de cosas más.— Deja de mirarme de esa manera — bebo un sorbo de agua y frunzo el ceño.— ¿Cómo? — levanta la cabeza y sonríe.— Con hambre. Además, que esa mirada tan fija sobre mí, me provoca de sobre manera — confesó y el agua bajó por mi garganta como piedras.Me gusta su directa forma de hablar. D
Lo miro a los ojos quedándome en completo silencio, tratando de entender y comprender lo que acaba de decir. Hace unos días atrás dijo que el amor de su vida era Loren, y que ella sería a la única a quien iba amar. ¿Qué me espera con un hombre que ama a otra mujer y no a mí? Yo deseo un hombre a mi lado, que me diga cada mañana lo mucho que me ama. Que sea yo la única en sus pensamientos y en su mundo. Que vea a través de mis ojos y se conforme con mi desastrosa manera de ser. ¿Que me espera a su lado? Si cada que, habla o la ve, resulta afectado y termina desquitándose conmigo... por mucho que me guste, no estaría dispuesta a tener una relación con un hombre como Dominic. Las razones sobran, pero el beneficio de la duda cualquiera merece ¿Y si le doy la oportunidad que me esta pidiendo? ¿Seré capaz de borrar esa mujer de su corazón para siempre?.— No calles, Sofia. Tu silencio me pone a pensar — me saca de mis pensamientos, tomándome de las manos. Miro sus ojos y solo veo a