Capítulo 68
Al escuchar estas palabras, Marta respondió con gran disgusto: —Creo que realmente te han lavado el cerebro por ese tipo. Ni en un mes, ni en toda su vida, Juan llegará a ser solamente una persona con una vida medianamente acomodada.

Patricia sonrió muy traviesa y no pudo evitar darle una suave palmadita en el pecho: —Dime si apuestas o no.

Marta rápidamente se cubrió el pecho, entre risas y lágrimas, y dijo: —Está bien, ¿cómo quieres apostar?

—Como dije antes, si Juan se convierte en una figura importante en Crestavalle dentro de un mes, definitivamente gano yo.

—En ese caso, Juan será mi hombre, no podrás competir conmigo por él ni dejar que eso afecte nuestra amistad.

—Por el contrario, si pierdo, te lavaré la ropa gratis durante un año, ¿qué te parece?

Al decir esto, Patricia parpadeó con sus grandes y bonitos ojos.

Al ver su expresión tan confiada, Marta también se sintió muy competitiva y dijo: —Está bien, acepto la apuesta, pero hay una sola condición: no puedes usar tus recurso
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo