Sara
El sábado por la mañana, desayunamos con Chicho, Sol, Curro, Pepo y Jimena una amiga de Pepo.
Curro nos lleva al embarcadero y paseamos en su bote un rato. El clima está sensacional, nos tiramos al sol para broncearnos, alrededor del medio día me llevan de nuevo a la ciudad a conocer algunos monumentos históricos.
Campeche es una ciudad preciosa, sus casonas y edificios coloniales, la hacen parecer suspendida en el tiempo.
Esa tarde Franco me dice:
─Muero por estar a solas contigo.
Me ruborizo
Sara Esa noche, conozco al resto de la familia, los abuelos paternos de Franco, tíosalgunos primos. Su madre, orgullosa anuncia nuestro compromiso. David se aparece un momento y se desaparece. Abandona la fiesta como si no le importara la vida de Franco. Mi suegro se acerca a mí y me dice: ─Ojalá tu logres que éste par se contenten, son muchos años en que su relación es intratable. ─Señor, yo no… ─Llámame Raúl, ustedes las mujeres, son más inteligentes que nosotros para muchas cosas. Si se te ocurre algo, me gustaría verlos unidos otra
Sara Franco me presenta. Cristina se ve una chica normal, guapa, de unos 28 años. Se saludan de beso, noto que por mero formalismo. ─Cristina, ella es Sara, mi prometida. ─ ¿Te casas? Felicidades─ dice sincera─ supe lo de David… Franco… David y yo seguimos teniendo una... relación. Seguimos saliendo. ─ ¿Por qué no lo sabíamos? ─ Porque somos unos tontos, ya sabes después de que tú y él─ ella me mira cohibida. Yo procuro desviar la mirada, deseo dejarlos solos, pero Franco no me suelta la mano. ─Sara lo sabe─. Interrumpe Franco. Cristina se p
Sara Siento a Franco que entra a la habitación en la madrugada… ─Hola Sara─ susurra en mi oído. ─Hola ¿Cómo te fue? ─Solo dejaron entrar a mi mamá, no lo pude ver. ─ ¿Y? ─No lo sé, a ver qué pasa al rato. ─Ven…─lo invito a la cama y dormimos abrazados. Por la mañana nos arreglamos desde temprano, Clarita nos prepara un desayuno delicioso en la te
Sara Los presentes no paran de reír con nuestras anécdotas de la noche anterior. Pasamos una tarde excepcional compartiendo con su familia y la mía. De vuelta a la ciudad no sabemos qué hacer. Mi mamá no está de acuerdo en que me vaya a vivir con Franco. Mi papá todo lo contrario. Franco no quiere tener problemas con mi madre y yo soy un manojo de histeria. Al fin decidimos esperar a la boda religiosa. Consigo un puesto editorial en una revista decrítica social. El director me pide que vayamos poco a poco y si les gusta mi trabajo me darán la oportunidad de trabajar desde España. Unas semanas antes de la boda vienen Cristina y David a visitarnos. N
Sara La madre de Carlos está muy triste y demacrada. Me acerco a saludarle, sé que le duele todo lo que le ha pasado, se le nota en su semblante. ─Sra. Lina ¿Cómo está? ─Ay Sara...─ Sus ojos se humedecen─ No tienes idea, la pérdida de Carlos ha sido mucho más dura de lo que parece. El tomo de la mano y me doy cuenta de que un abrazo puede caerle mejor. Ella lo acepta y le pregunto si puedo sentarme. ─Claro, me da mucho gusto verte, a pesar de lomal que nos portamos contigo ¿Qué ha sido de tu vida? ─Acabo de volver de Roma. Me sonríe, sabe que ese plan era tanto de Carlos como mío. ─ ¿Estudiaste la maestría? ─Sí─ agacha la mirada. Los ojos vidriosos la delatan, resbala una lágrima, la cual limpia rápidamente con la servilleta de tela. ─Carlitos estaría muy orgulloso de ti...─Le sonrío y ella continúa─. Perdóname por haber sido tan grosera cuando murió mi hijo. Me afectó mucho su mue
Sara El martes hago una pequeña mudanza de mis cosas al departamento de Franco. Solo viviremos ahí un par de meses y lo rentaremos amueblado en nuestra estancia en España. Mis padres nos ofrecen su casa para que Franco lo rente antes… afortunadamente mi abuela les dice: ─El casado casa quiere...─y rechazamos la oferta. El miércoles, Franco, mi madre y yo nos vamos a San Miguel de Allende. Rentamos un hotel boutique para toda la familia cercana, justo detrás del jardín donde será la recepción. El jueves llegan mis suegros, David y Cristina, mi padre y Alex con su novia, la misma. ¿Cómo se llama? ¡Ups!... Luisa. El viernes es un día de locos. Pruebas, pruebas y más pruebas. Aun así, Franco y yo lo disfrutamos y la pasamos sensacional. Por la tarde después de varios intentos logramos escaparnos un rato. Feliz me lleva a la parroquia de San Miguel Arcángel, donde nos casaremos mañana. Me lleva hasta el altar... yo lo obser
Sara Al fin llega el día de la boda. Desde las 6 de la mañana empieza el trajín. Me levanto a bañarme. Mis padres están en la habitación contigua, estaban comunicadas por una terraza. Susana durmió conmigo esta noche, es mi madrina de honor. Giovanni, Lorenzzo, Rossana,Antonella y Maximiliano su esposo llegaron un día antes al DF y viajaron en autobús directo desde el aeropuerto. Los amigos de Franco, llegan un día antes. No los vemos ya que se hospedaron en otro hotel. Mi madre empieza con sus cosas desde temprano… “Que si la liga, que el maquillaje, que las uñas, las medias, el liguero, que la cosa azul, que los aretes, la cosa prestada…” Susana colgada del t
Franco Carlos me invita a aquella fiesta, lo escucho extraño, raras veces me convoca a reuniones con sus amigos. Nuestra amistad es filosófica, nos gusta salir a platicar, tomar vino, a veces mezcal. Salimos solo nosotros… nunca con parejas. Yo no salgo con nadie por ahora, pero él tiene tiempo de novio con Sara. -¿Vienes Franco? Ándale, es la última… de aquí la boda y Roma nos espera. -Seguro, paso un rato, dame la dirección. -Necesito que trates más a Sara. Sabes que es el amor de mi vida, y ahora que nos casaremos, no podré salir de farra contigo si no le caes bien… tienes que tratarla- r