—Todo esto ha sido una locura, ¿No? —Elske miró a la mujer de reojo. —¿Qué hiciste para involucrarte en todo esto? —Elizabeth jugueteó nerviosamente con sus manos, todavía no procesa el haber arrollado a tantas personas. —Yo... —Pasó saliva, siente la boca demasiado seca. —Yo soy la exesposa de Einar. —Elske descuidó el camino y la miró atónita. —Un día viene a buscarlo a su empresa y Bellavel me reconoció... yo... yo soy diseñadora de moda y ella me reconoció al instante. —Dejó salir el aire por la boca para tratar de tranquilizarse. —Entonces en medio de la conversación salió lo de Einar y ella lució sorprendida y lo siguiente que me dijo es que me fuera a mi país que ella se haría cargo. —Elske miró nuevamente el camino. —Einar no estaba en sus mejores momentos, eso me dijo ella y yo confié. —Limpió sus lágrimas. —Hace cuatro días me llamó que viniera y yo lo hice de inmediato, aquí me recibió ese hombre y junto a ella me secuestraron y me obligaron a mentirle a esa chica, pero no
—En la milicia, cuando un prisionero no hablaba en el primer par de horas. —Anderson le dio otro puñetazo. —Iniciábamos la tortura y ya cuando estaba cerca su muerte, solo entonces volvíamos a interrogarlo y decidíamos si viviría o moría. —Miró a Leviatán. —Me parece una fantástica idea, después de todo Dankworth estará presente el día que se llevará a cabo la sentencia. —Miró a Lain con una sonrisa. —¿Y esa esperanza que tienes de ser rescatado? Olvídala, quien intente algo tendrá un destino igual o peor al tuyo. Traigan mis herramientas. —Ordenó a sus hombres. —Eres un maldit0. —La desesperación en la voz de Lain fue evidente. —No puedes hacerme esto, Leviatán, no fue contra ti que actúe. —Pero has puesto a la legión en peligro. ¿Sabes por qué nuestra organización es la mejor? Por qué lo hacemos todo sin llamar la atención y tú la has llamado bastante. ¿Secuestrar a una mujer el día de su boda? ¿Implicar a personas ajenas a esto? ¡¿Sabes lo que pasaría si esa mujer abre la boca?!
El puñetazo que recibió el hombre hizo que vomitara la saliva. Tony le propinó otro esta vez en la boca del estómago. Sin aire y adolorido, el hombre negó exasperadamente para que los golpes se detuvieran. —¿Quién los envió? —Preguntó mirándolo a los ojos. —Te lo preguntaré esta única vez. —Antes de que Tony pudiera propinarle otro golpe más, el hombre susurró algo incomprensible. —Habla claro. —Exigió con el puño bien apretado. —Mus... Mustafh. —Pará Tony el nombre era desconocido. —¿Quién coñ0 es ese Mustafh? —Las chicas un poco más atrás se encogieron de hombros, menos Engla y Nancy. —Mustafh es uno de los colegas de Einar. —Respondió Nancy. —También estaba en el juego, él junto a Lain y los demás fueron a felicitar a Einar en la boda. —Anthony miró al hombre golpeado y finalmente recordó. —Deberíamos cambiar a Einar de habitación. —Engla los miró. —Podrían venir más. —Cambiarlo de habitación sería un riesgo. —Jadebeth se acercó a Tony. —¿O será buena idea? —Pidió la opinión
—Leviatán, creo que ya puedes salir. —Leviatán salió del baño con el móvil en la mano y en alta voz. —Que hable. —Ordenó alzando el aparato. —Papá... por favor, papá... —El color de Mustafh asemejó al de un cadáver en la morgue. —¿Qué han hecho con mi hija? —Se desesperó. —¡¿Qué han hecho?! —Verás, siempre sospeché de ti y le hablé a Leviatán de ello, él amablemente me dio cierta información de ti y uno de sus hombres enamoró a tu hija. ¿Está en América del Sur? Sí, es en América del Sur. —Afirmó a su propio cuestionamiento. —La cosa es esta, tu esposa en este preciso instante le está abriendo la puerta al hombre que la sacará del país, es tu decisión. ¿Ir con mi abogada y pasar todas tus acciones a mi nombre e ir por tu esposa o pasar de todo esto y unirte a MacLeod? —Mustatfh no daba crédito a todo lo que estaba escuchando, ¿cómo es que él ya lo tenía todo planeado? —Está bien, haré lo que me pidas, pero por favor, dejen a mi esposa y a mi hija fuera de esto. —Einar miró a Levi
—Señor Dankworth, ¿Puede darnos una explicación exacta de lo que ha pasado? —Einar con el semblante serio miró al frente e ignoró los flashes y las cámaras apuntando hacia él. Se centró únicamente en la mujer que le hizo la pregunta. —Por supuesto. —Asintió. —El mundo de los negocios es algo difícil y como la mayoría de trabajos tiene sus riesgos. Cómo todos ya lo saben, mi nuevo proyecto “Angel On Earth” —Reveló el nombre. —Será respaldado por Investor Berrycloth Becker Entrepice y quién siga el mundo de los negocios, sabe que será un proyecto multimillonario y exitoso. Los señores MacLeod y Mustafh arremetieron contra mi familia, amigos y contra mí para sacarme del juego. —¿Puede darnos alguna noticia del paradero de los empresarios? —Einar miró al hombre. —Creo que está de más decirlo. Todas las noticias hablan del terrible accidente aéreo que sufrió Mustafh tratando de huir y en cuanto a MacLeod, sé tanto como ustedes. La denuncia fue puesta legalmente y ha desaparecido. —¿Dej
Su dolor era enorme, su daño es gigantesco, pero el amor que siente por ese hombre sobrepasa todo lo existente. Decidió quedarse y luchar junto a él, decidió iniciar desde cero y decidió continuar amándolo sin medidas. Einar la lastimó, es cierto, pero cada lágrima que le hizo derramar está bien justificada y no puede imaginar su vida si hubiera caído en manos de cualquier otro. Nancy se miró al espejo, su gesto cansado, enormes ojeras y mirada apagada fueron el recordatorio de cuanto sufre. —Hola. —Einar besó la cabeza de su hermana. —¿Estás lista? —Nancy asintió. —Quiero hacerle una lápida. —Susurró, sabe cuánto su hermano se está esforzando por encontrar a Roy aunque todo indica que los animales lo devoraron. —Quiero despedirlo, ya es hora de dejarlo ir. —Einar la ayudó a ponerse en pie y la abrazó con fuerza. —Lo siento, siento no haber dado con su cuerpo a tiempo. —Los sollozos de Nancy le partieron un poco más él alma. —Estaré para ti siempre, nunca olvides esto. —Nancy alz
Su cuerpo sudoroso y rojo se aprecia más tenso de lo normal. Su respiración caótica y la lujuria en su mirada tienen otro nivel. Einar se hunde en su mujer con intensidad, admirando cada gesto que ella hace de manera involuntaria. —No me siento capaz. —Susurró agitada y tratando de huir de las garras de su marido. —Hoy no podré soportarlo. —Einar quien tiembla de la excitación la besó. —Por favor, ángel, siempre lo soportas. —La abrió un poco más de piernas. —Realmente necesito hundirme completamente en ti, siempre lo hago. —Engla pasó saliva, está muy excitada y su cuerpo pide cada centímetro de su p0lla, pero algo en ella lo evita. —No lo soportaré. —Lo detuvo antes de que Einar pudiera hundirse totalmente de un empellón como acostumbra. —Ángel, estoy muy excitado. —La voz bronca fue constancia de ello. —Necesito a mi esposa completamente, has estado trabajando mucho estos días. —Engla se sintió culpable al instante. —Lo sé y lo siento. —Sin saber que más hacer, se separó de él
Nancy Dankworth decidió enlistarse y ser la mejor de su grupo como agente especial y de rescate de alto riesgo de la milicia. Siempre se dice que en un mundo de fuertes la debilidad no está permitida y ella se dio cuenta de aquello de la manera más despiadada posible.Perdió al amor de su vida y al enfrentarse a situaciones difíciles no le quedará más opción que pedirle ayuda a él... Leviatán, el hombre que la ha deseado desde que la conoce. Y nada más que el Boss de la mafia escocesa. Su lealtad se pondrá a prueba cuando su pasado y su presente choquen de manera estrepitosa. Le sería fácil escoger entre un villano y un héroe... Pero ¿Qué pasa cuando eres la razón de un villano y la debilidad del otro? ¿Qué hacer al verte entre bandos enemigos? Tendrá que ser fuerte para sobrevivir a todo