Vivir la vida satisfaciendo necesidades y disfrutarlas al máximo.
Capitulo LEsta situación le permitía estar feliz, relajada y disfrutar de su aventura, nadie la conocía, no quiso decirle a su madre para no alterar sus creencias, sobre esperar que el divorcio estuviese decretado y firmado, mientras tanto el abogado trabajaba para ello, Diego se negaba a firmar. Le dieron tiempo para que lo pensara o utilizar la separación para lograrlo por la mejor vía, sería más larga la espera, pero ella no tenía ni apuros ni necesidad de casarse nuevamente.Vivía su vida de soltera, su hijo en la institución, su madre feliz y ella disfrutando de su trabajo y aventuras. Lo hizo y disfruto al máximo, ya que su aventura con Edmundo era ocasional cada 15 días y presentándosele la oportunidad de hacer salidas eventuales con Evencio, otro educado y buen mozo adulto mayor que conoció en una de sus salidas a cenar con unas compañeras de trabajo, decidió también probar con él el sexo, no recordaba haber tenido sexo con Diego de esa forma, Evencio la deleito desde los p
Capítulo LICon la edad que tenía la señora Marta era capaz de asumir que al matrimonio de su hija le quedaba poco tiempo, conociendo el carácter de ésta. Cuando Laura Marina le menciono que se irían de viaje, sabía que no habría retorno, lo lamentó por la amistad con Rosangela y el agrado de vivir en el pueblito, tanta calidad humana y el refrescante ambiente lo extrañaría, pero ver ahora el cambio en la vida de su hija y su nieto la recompensaba, se sentía satisfecha con su vida y estar viviendo sus últimos años a su lado.Recordó con melancolía una tarde que estaban sentadas ella y la señora Rosangela tomando café y comiendo torta de fresa, se hicieron confesiones de su vida:-A los 13 años me fui a vivir con mi hermana mayor, comenzó Marta. Quería salir de la casa materna, éramos muchos hermanos y comíamos poco, papá trabajaba pero no alcanzaba para todos.Siguió con su relato:-Mi hermana me acepto con la condición que le ayudara a la crianza de sus hijos, lo hice gustosamente,
Capítulo LIILaura Marina notifico en su trabajo, solicitando permios para atenderle, también le envió un mensaje a la señora Rosangela quien se entristeció por la salud de su amiga y no poder acompañarla por lo lejos que estaban.Diego José llego a la clínica, en cuanto supo la noticia sobre su abuela salió del instituto, la señora Marta murió a los dos días siguientes, no pudo ser operada. Cuando se despidió del mundo su hija y su nieto estaban a su lado. Lloraron y decidieron dejar en manos de especialistas los actos fúnebres.Los momentos después de la partida física de la señora Marta fueron muy tristes, estando Laura Marina y Diego José en su apartamento recogieron la ropa y decidieron regalarla a instituciones necesitadas, que se encargaban de distribuirlas en otras persona, solamente se quedaron con su fotos.Los actos velatorios fueron en la iglesia, allí la acompañaron sus nuevos vecinos y compañeros de trabajo. También acudieron representantes administrativos de la instituc
Capítulo LIIILaura Marina se vio obligada por las circunstancias a regresar a la ahora parroquia llamada Paz y amor, para solventar la situación con Diego, ya no quería seguir ligada a él legalmente. Le envió un mensaje al que nunca recibió respuesta, Diego le enviaba continuamente dinero a su hijo, eso era todo lo que hacía, no lo llamaba ni se preocupaba últimamente por saber de sus estudios.Laura Marina tenía razón al no querer formalizar su estado, pero como él lo solicito tantas veces no quiso defraudarlo. Al final la vida le demostró que así sería, Diego solo se preocupaba por él mismo, ya lo había manifestando incontable veces. Cuando le comunico la partida física de su madre, solo recibió un “Lo siento” y ella le respondió con el mismo tono, “Gracias”. Al decidir regresar y cambiar su estado civil, le comunico a la señora Rosangela para verla y conversar con ella, ya tenía nuevo trabajo con otra familia y disfrutaba de hacerlo.Llego la tarde de un viernes, suspendió todas
Capítulo LIV.El párroco le dijo:-Te darás cuenta de muchas cosas. Debes tener calma y cordura para solucionar todo lo que sea necesario.Ella quiso decir algo y él no se lo permitió, señalándole que callara.-No te adelantare nada en absoluto, lo único es que cuando necesites testigos para hacer lo que viniste a resolver los tendrás, es más ya el intendente ha procedido a iniciar tu divorcio sin el consentimiento de Diego, los hechos demuestran que puedes hacerlo sola, vas a necesitar pasar por su oficina y legalizar los tramites. -Padre, lo que me dice es verdaderamente preocupante, igualmente la señora Rosangela me comunicó algo parecido sin darme detalle.-Debes averiguar tu sola y decidir. Tienes todo nuestro apoyo.-Bien. Visitare a Diego y cuando tenga que tomar la decisión iré donde el intendente y luego lo veré a usted nuevamente.Laura Marina le mostro las imágenes de su hijo y agradeció por su sentido pésame por la partida de su querida madre. Luego se dispuso a visitar a
Capitulo LVEn la noche anterior festejaron la gran parte de los trabajadores de la obra el cumpleaños de la secretaria llamada Gloria, según todos estarían con resaca y durmiendo.Llamo varias veces y la música no ceso, se dispuso a subir la pequeña escalera de la puerta notando que la puerta estaba entre abierta, la empujo y se adentro a la dizque llamada vivienda.Nadie de las tres personas que estaban dentro la escucho cada uno de ellos estaba en su ritual dominguero, muy entretenidos en él.Laura Marina asomo su cabeza hacia adentro de la pequeña habitación sin entender lo que veía, se acerco no más de dos pasos y lo que observo la dejo pasmada en el acto, quieta, paralizada sin emitir ningún sonido.Diego, Arelis y Gustavo entretenidos los tres en sus actos sexuales y con la borrachera completa de la amanecida no escucharon los pasos ni los golpes en la puerta por estar en sus amores aunado a la música en alto volumen.Cuando Laura Marina distinguió a Diego su garganta emitió un
Capitulo LVI Él chico que servía de chofer asintió, extrañado del poco tiempo que le llevo la conversación. Arrancaron en la moto y nadie hablo en todo el regreso.Llegaron al pueblo y fue directo a su habitación empaco lo poco que tenia desempacado y fue hasta el terminal para regresar a su casita. Al llegar a ella ya muy entrada la noche encontró la paz y el amor que necesitaba para fortalecerse y procesar lo que descubrió.Se metió en la ducha y estuvo alrededor de dos horas en la tina. El agua estaba tibia sirviéndole para relajar su cuerpo. No lloro ni quiso analizar los hechos en su encuentro con Diego, no tenía estomago ni quería pensar en ello.Salió con su piel arrugada por el tiempo en el agua, sonrió pensando cuando ella y sus dos hermanos lo hacían de pequeños en la ponchera de su casa materna.Esos recuerdos la llenaron de nostalgia, respiro profundamente y se acostó en la cama en forma transversal, con sus ojos bien abiertos y la mirada fija en el techo de su habitación
Capítulo LVIIComenzó a leer, decidió ver la televisión allí encontró unas serie corta y la vio seguida en sus 8 capítulos.Se quedo dormida allí en la biblioteca, parecía que ahora se dormiría en todas partes. Al levantarse noto que alguien la esperaba sentada en la mecedora del frente, la misma que le sirvió tanto en sus época de embarazada y donde Diego la vio sentada al regresar de su largo periodo de trabajo en la capital.Se asomo y vio a la señora Rosangela, fue hasta la puerta y la recibió.-Adelante qué hace allí sentada, por qué no entro, usted es siempre bienvenida a esta casa.-No quise despertarla, me asome y la vi bien rendida en el sofá.-Ya desayuno, hagámoslo juntas.Fueron hasta la cocina y prepararon desayuno para tres o cuatro personas. Rosangela la observaba y notaba su inestabilidad sentimental.-Solo le faltaba un empuje para que soltara todas esas emociones acumuladas por el dolor de descubrir la verdad de su esposo. Pensó Rosangela.El chico que llevo a Lau