Maikel.
Hola a todos soy Maikel Guerrero Rose, tengo veintitrés años humanos aunque parezco de veinte, dentro de poco seré el Alpha de Luna Roja, mi padre Roberto le preocupaba que yo tomara el control de la manada sin conocerla y sin saber cómo se maneja todo en esta manada, aunque todo eso lo aprendí con papá Darían, pero igual estuve que venir para aprender más de la manada y no me molesta ya que pronto seré el Alpha y debo conocer a mi gente, aunque ya los conozco de sobra. Ya tengo un mes viendo todo de lejos, hoy decidí ver a mis guerreros, según dice papá hay nuevos vigías y centinelas que ya pueden ocupar un cargo. —Ya me voy —Anuncio levantándome. —Ya hablaste con tu madre. —No soy un niño papá, además mamá vino. —¿Cómo es que tu madre puede venir e ir? —pregunta Dana. —Mi madre es la princesa de los demonios, ella puede ir y venir hasta podría aparecer detrás de nosotros. —Emily puede hacer todo eso. —Si mi amor —le dice papá. —Nos vemos luego —Salgo de la casona y camino para ir a ver los entrenamientos. Me gusta caminar, la verdad es que lo tomé de costumbre. Al llegar con los guerreros muchos me miran perplejos algunos se acordaran de mi otros, no. —¿Dónde está él vigía líder? —Pregunto. —Soy yo señor. —Podrías mostrarme cómo funcionan las cosas por aquí. —Si Alpha. —Aún no lo soy. —Pero pronto lo será —asiento resignado. —Quiero ver los entrenamientos. —Si Alpha sígame —Lo sigo hasta llegar al lugar de concentración. —Es aquí. —Gracias. —Los que tienen uniforme rojo son los más avanzados y así van bajando de rango, el rango más bajo son los morados —Me quedo observando una de las chicas. —Esa es una loba o una humana —Señaló a la chica quien lucha con una gran destreza. —Ella no le servirá si algún día hay que luchar en alguna guerra —Dice con molestia. —¿Quién juzga eso? —Yo Alpha.. —De ahora en adelante yo diré quién pasa a los rangos más altos —digo más que molesto. —Quiero que ella luche con el mejor guerrero de la división que le sigue. —Los verdes. —Llama al mejor de ese rango. —Señor ella no está acta para eso —Le doy una mirada severa. —Muchos creían que mi madre era el ser más débil y al final ella le demostró a todos que es el ser más fuerte de todos, con eso te quiero decir que no subestimes a esa chica. —La conozco muy bien como para saber que ella no llegará a nada —Su tono ya me estaba cansando. —¿Cómo lo sabes? —Es mi hermana —Lo miró, su tono no es de alguien que sobreprotege a su hermana si no de alguien decepcionado. —Es una causa perdida. —No lo es ya lo verás —Me acerco a ellos. —No digas que soy el próximo Alpha —Asiente. —Noriel ven aquí—. Llama a un chico, decepción es lo que siento. —Maya ven aquí —Dice llamando a la chica. —Sí señor. —Los dos se enfrentarán a un duelo.. —A un duelo y el que gana será parte de un grupo que formare —digo mirándolos. La chica que ahora se que su nombre es Maya me mira, su mirada verdosa choca con la mía, en su mirada y su alma puedo ver un pequeño destello de luz, me quedo algo anonadado. —Theo percibes algún olor en ella, por que yo creo que esa pequeña luz significa que ella es nuestra mate. “—No siento nada tu crees que sea ella.” —Sí, además esa mirada ya la había visto hace años atrás, esa chispa de luz que desprende ella solo se le puede ver a tu destinada, fue lo que me dijo el abuelo Daimon. “—Ella es mi luna, digo nuestra luna al fin la encontramos.” —Si Theo pero creo que es mejor mantenerlo en secreto, si no le sentimos el olor eso significa que no quiere encontrar a su mate. “—Pero si la amo, ya la amo, no quiero que pelee con ese lobo podría lastimarla, es tan pequeña.” —No seas tonto Theo ella es una loba fuerte puedo verlo. “—Mi luna es hermosa, le diré mi pequeña luna, verdad le diremos nuestra pequeña y hermosa luna” —Niego. —Si Theo, es nuestra pequeña y hermosa luna. —Están listos. —Sí señor —Gritan los dos. Confío que mi luna, es fuerte y ella saldrá victoriosa, la batalla empieza la primera en atacar es ella, tiene buenos movimiento y una gran destreza, sonrió al ver su cuerpo tan pequeño moverse y esquivar los golpes que le lanza su contrincante, quisiera echarle porras, pero debo mantener mi compostura. Noriel le lanza un golpe en el abdomen, Theo gruñe al ver ese acto y yo estoy que quiero golpearlo, pero ella no se deja y le devuelve los golpes, pero al doble. “—Esa es mi luna”. —Calma Theo o nos van a descubrir. Mi luna, digo Maya da un brinco y le propina un golpe a Noriel que lo hace retroceder, el golpe da en la cara haciendo que Noriel sangre por el labio. Sus ojos cambian de color eso significa que su lobo ha tomado el control, se va sobre Maya y le propina varios golpes que la hacen retroceder, pero ella se protege, al Noriel no poder con los puños levanta el pie y le propina una patada a Maya, en el vientre haciéndola retroceder con brusquedad, su cuerpo choca conmigo, la tomo antes que caiga. —Estás bien...Maya.Mi nombre es Maya tengo veintitrés años lobunos aunque parezco de menos, pertenezco a la manada Luna Roja, rango que ocupó en esta manada soy una loba vigía en entrenamiento, pero desde que entré no he podido avanzar y eso se lo debo a mi querido hermano quien es el vigía líder y no es que lo haga por sobre protección, si no por decepción, soy la decepción de la familia Datén, si mi padre y mi madre están más que decepcionados de mí, ¿el por qué? ni yo misma sé, por más que he tratado de ganarme un lugar en mi familia ellos siempre me echan a un lado como si no valiera nada para ellos.Soy una loba gama lo que para mí familia es una decepción, una desgracia y sobre todo una humillación, ya que todos son lobos de sangre pura y guerrera, según ellos ningún lobo me querrá y mucho menos lo hará mi mate, por ello tomé la decisión de pedir un brazalete para esconder mi olor, mi esencia para que él no me encuentre, en esa parte me deje llevar por sus comentarios, he querido demostrarle
Maikel.Ver a Maya peleando contra un hombre me llena de orgullo, es una chica que no se deja, sus ojos empezaron a brillar se veía enojada, peleaba como si su vida dependiera de ello, y eso me gustaba.Empezó a pelear con una gran fuerza increíble que me dejó con la boca abierta, en cuanto la vi caer pare la pelea, ya no quería ver que la golpearan, me acerqué a ella. —¿Te encuentras bien? —Le pregunté y la ayudé.—Si, gracias —Dice nerviosa. —Con permiso —Camina hacia dentro de la cabaña.“—Creo que sabe que somos su mate”.—Tú crees Theo.—Si.—Espera no te..No me deja terminar cuando ya está dentro de la cabaña.—La tendremos difícil Theo, al parecer no nos quiere cerca.“—Pero vamos a conquistarla ¿verdad? Sí algo le pasó le vamos a demostrar que somos diferentes”.—Así es Theo, le demostraremos que somos diferentes a todos esos lobos que ella conoce.—La quiero en mi equipo —Le digo a su hermano sin mirarlo.—Está seguro que quiere que forme parte de su equipo, como vio no pue
Maya.Lo único que quería hacer era correr después de escuchar todo aquello, me dolía que mi hermano pensara que yo era incapaz de dar una buena batalla, o que pensara que Noriel era mejor opción que yo, para ellos siempre era así, alguien siempre era mejor opción que yo, podría ser la mejor guerrera, pero para ellos no era nada, creo que hasta el cero era más importante que yo. Si mi hermano tenía ese concepto de mí que podía esperar de él, me había esforzado tanto pensando que al fin tendría una oportunidad para ser parte de algo, pensé que al fin podría salir de las garras de mi hermano y esa bola de idiotas pero no, una vez más me habían echado a un lado.Camine por el frondoso bosque tratando de olvidar ese trago amargo, algunas lágrimas se me escaparon pero no iba llorar por eso, se que si quiero ser alguien en la vida debo salir de mi vínculo familiar, tal vez ahora que se quien es mi mate deba partir, ya no me importa nada aunque no quiero que nada le suceda a Amélie.“—Debemo
Maikel.Después de quedar profundamente dormido por no se cuanto tiempo sentí mi pecho apretado y un fuerte dolor se instaló en el.“—Mi luna esta sufriendo” —Me dice Theo con voz preocupada.—Seguro que es nuestra luna.“—Si Maikel, es mi luna siento el enojo de su loba”.—¿Qué vamos hacer Theo si vamos con ella nos delataremos, ella sospechara que sabemos que es nuestra mate.“—No me importa Maikel, solo quiero que mi luna este bien”.—Y yo también Theo, pero no podemos aparecer así nada más, maldición juro que él que le este haciendo daño las va pagar con su vida. “—Voy hacerle cosas peores de lo que le han hecho a mi pobre luna”.Me contengo para no aullar de la impotencia que siento, camino en la habitación de un lugar a otro, mis manos las convierto en garras, tiro todo lo que hay en un buró.—Que sucede mi pequeño —Escucho la voz melosa de mamá a mi espalda. —¿Dime que es?—Es mi luna mamá —digo enterándome las garras en la palma de mi mano y derramando algunas lágrimas, siento
Maikel.Y sin mediar palabras estrella sus labios contra los míos, los muevo de manera delicada eso espero ya que nunca he besado a nadie, no soy ningún experto en besos ni nada de eso. Nuestros labios se mueven al compás y en sincronía, rodeo su cintura y la pegó más a mi cuerpo así profundizando e intensificando más el beso, un pequeño gemido se le escapa al tocar mi lengua con la suya. No quiero que este beso se acabe nunca, pero en algún momento tenemos que respirar y eso es lo que nuestros pulmones piden en este momento, aire.Me separo de ella lentamente y pego mi frente a la suya. —No es un sueño ¿verdad? —Susurra.—No mi pequeña, es real —Vuelvo a atacar sus labios y soy correspondido con la misma intensidad, nuestros labios se mueven de forma demandante, cada uno quiere más del otro, Theo gruñe al tocar nuestra lengua, al igual que un gemido se escucha de ella.Nos volvemos a separar. —Maya me odiara por hacer esto —Dice con voz agitada.—¿Maya? —Pregunto algo confundido.—
Abre sus ojos y se los talla, parpadea y me mira. —Hola —Le digo con media sonrisa.Se levanta de golpe y me mira.—¿Qué me pasó?—No lo sé, te desmayaste seguramente no desayunaste bien o me equivocó —Si ella no sabe de nuestro beso es mejor así, no creo que esté preparada para asimilar lo que yo sé.—¡Me desmayé! —Toca su cabeza. —No lo recuerdo, bueno solo recuerdo que empecé a luchar con Amélie y luego ya nada… Amélie te dijo algo.—¿Algo como qué, no recuerdo es más no hable con Amélie, es tu loba verdad?—Sí… seguro no te dijo nada —niego.—No, te desplomaste y te atrape así que te deje dormir… qué te parece si lo dejamos por hoy y vamos a comer tengo hambre.—Tú y yo… comer juntos, los dos.—Si los dos, tú y yo como dos amigos, no te gustaría ser mi amiga.—Tu amiga, pero si tú y yo somos…Traga grueso. —¿Somos qué? —Digo al ver que no articula ninguna palabra.—¡Pues seamos amigos si quieres!—Genial vamos a comer —Me levanto y le extiendo mi mano para que la tome y levantar
Maikel.—Eres tan lindo… —Carraspea. —Es decir es muy tierno y lindo de tu parte —Dice nerviosa.—Gracias creo —Le sonrió.—Maikel hijo que bueno encontrarte por aquí, espero y ahora si vengas a quedarte donde perteneces —giro mi cabeza hacia la persona que me habla, los padres de papá Roberto están frente a mí. —Aquí es donde perteneces siempre debiste estar con los tuyos no en la manada suprema y mucho menos con tu madre.—Así es, después de todo eres el siguiente en el linaje que bueno que no sacaste los genes de tu madre —Miró a Maya y le sonrió.—En primer lugar buenas tardes ex alpha Sebastián y ex luna Mariana, segundo punto para mi fue un gusto permanecer en la manada suprema y tercero y más importante estoy orgulloso de la madre que tengo y para mi es un honor llevar parte de sus genes ahora si me disculpan estoy ocupado con una amiga.—¿Cómo puedes hablarnos así somos tus ab…—NO SON NADA MIO —Hablo con tono fuerte, ellos querían apartarme del lado de mi madre, una vez que m
—Creo que se resistirá —Dijo otro.—No podrás contra nosotros seis, es mejor que cooperes te haremos el menor daño posible —Su tono de voz no me gusto para nada.—Es mejor que empecemos con esta perrita —Me sentí asqueada, tenía un mal presentimiento de la situación.—Cúbranle los ojos —Uno de ellos me tomó del hombro, mientras el otro se acercó hacia mí.Le di un rodillazo en sus partes y de inmediato sentí un fuerte golpe en el abdomen, esto me dejó sin aire.“—Déjame salir Maya —Me pedía Amélie.—No Amélie ellos son más no podrías con ellos somos inestables.“—Y eso que podemos hacer un esfuerzo déjame salir —Negué.Sentí una fuerte bofetada. —En tu vida vuelvas a tocarme maldita perra.Escupí la sangre que salió de mi labio. —Si me van a matar háganlo ya —En verdad quería que acabarán con mi existencia.—No, te haremos algo mucho peor que matarte, de que serviría mandarte al olvido así no te traumaras por lo que te haremos.—Háganlo ya si tanto les place —Grite.Una ráfaga de go