Tener que contar algo tan delicado en mi vida y más a una persona que tal vez duraría unos pocos meses en mi intimidad. Alan estaba haciéndome sentir algo tan real que a veces lo veía como un matrimonio que pasamos todas las etapas juntos hasta las más difíciles.
Elevó mis hombros —No nos llevamos, lo normal de una relación asi—le comenté rápido.
Frunce su ceño—No creo que sea normal cuando le gritaste eso en la empresa y tu madre los detuvo—insiste queriendo averiguar lo que realmente pasaba entre los dos..
Mi padre había sido un verdadero monstruo conmigo, nunca tuvo la delicadeza de poder tratarme como su hija y mi infancia fue tan complicada que apenas tenía amigos. Los días que pasaba en esa casa, habían tiempos en los cuales apenas podía salir de mi habitación y escuchar los gritos de mis padres. A veces
Retrocedí haciendo varios pasos hacia atrás—Esto no está bien—niego de nuevo.Vuelve hacía mí, Alan parecía estar decidido a qué todo funcione y más conmigo. Estaba siendo la mujer más afortunada del mundo al tener un hombre así y que pudiera ser la persona quien me apoye en todo este mal momento.—Oye—me pide para que lo miré—Solo necesito que me digas puedo avanzar en nuestra relación porque ahora me siento un imbécil—sostiene abriendo sus brazos.Suspiró—Si, es que no sé amar—susurró.Toca mis mejillas, sonríe—Yo tampoco pero podemos descubrir juntos que es amarnos, ¿te parece?—me pregunta mirándome.Muevo lentamente la cabeza—Si, vayamos despacio—le pido.Sus brazos me rodearon por la cintura, puse mi rostr
Salgo de esa oficina con mis nervios de punta, escuchó que la puerta detrás mío se cierra y giro viéndolo parado sonriendo como si nada—¿Qué tienes para decirme?—preguntó.Observó para todos lados sintiéndome perseguida y lo primero que me sale en ese ataque de pánico que tenía fue algo que nunca imaginé—Creo que estoy embarazada—digo tapándome mi boca. Sabía que esa reacción la hacía por los malditos celos y lo veo acercándose rápidamente.Me termina de abrazar—Es la mejor noticia que he recibido en toda la mañana, ¿cuándo te hiciste el test?—me preguntó buscando una respuesta clara.Mis manos van hacía mi panza y miré hacia el suelo—Hoy pero puede ser un falso positivo—susurró para que no se cause tal emoción.—Esta
—No, no. ¿De qué hablas?—preguntó desesperado como viendo algo en mi y su mirada reflejaba otra cosa.Me río en su cara porque jamás creí que alguien pudiera actuar tan bien que parecía real, tuve unos momentos de debilidad frente a él y ahora me daba cuenta de todo. Lo señaló—Que Mariana es tu amante y aprovechaste todo lo que le sucedía a mi familia para tener vía libre en tu herencia, ¿no es así?— pregunté mirándolo.Se agarra su cabeza, golpea fuerte el escritorio que tenía a su alcance y retrocedí pero eso no le bastó. Alan me perseguía con su mirada—No fue así, Mariana tiene que cerrar ese negoció con la empresa y estás viendo fantasmas dónde no los hay. ¿Por qué le diría que estamos esperando un hijo juntos?, ¡tú y yo, est
Lo puedo observar negar con su cabeza y tomar distancia de mi, su rostro de confundido fue como decirme todo porque a pesar que él me vendía el verso «está todo bajo control» , sabía que no lo estaba y eso me daba más bronca.—No lo harás, Harper. Ya veremos cómo lo solucionamos, somos una familia—sostiene.Largó una carcajada, caminó hacia la puerta para salir de esa oficina—No seremos una familia hasta que tengas el coraje de enfrentar a todos los que nos imponen cosas y a esa mujer, Alan Frank—le digo enojada.Después de esa pequeña discusión y un poco una confesión de lo que me había pasado en mi intimidad, pude sentir un poco de alivio y no presión. Salí de esa oficina con mi dignidad bien en alto y busque la paz en la casa de él, fue un refugio que lo necesite.Nos manteníamos bien en cu&aacu
Estando media hora en mi habitación bastó para escucharlo de nuevo—¡Ábreme!—gritó furioso.Los ruidos en la puerta eran cada vez más fuertes y lo único que me salió fue caminar hacia ahí, darle un poco de espacio para intentar hablar como dos personas civilizadas —¿Qué quieres?—preguntó mirándolo.—Quiero que hablemos porque aunque digas todas esas locuras que salen de tu cabeza, somos una familia y lo seremos en verdad, Harper—sostiene.Suspiró porque no podía ser más cabeza dura ese hombre, lo vi parado esperando una explicación de mi parte y sin ganas de reprocharle nada, me senté al borde de la cama y junte mis manos encima de la rodilla—Es todo tan difícil para mi—aseguró mirando hacia el suelo.Siento que a mi lado sé hunde y observó de reo
Todo ese día me estuvo queriendo llamar Drake pero no quise atender a nadie, había recibido una invitación a una fiesta de los antiguos alumnos de la Universidad y no era de mi gusto. Recuerdo no tener tantas amistades en mis años de Universidad, la persona que era más conocida solo fue Alan Frank por su linaje familiar, su fama de seductor y galán que con los años no lo perdió.Sabía que todos esperarían a Alan Frank en esa fiesta, Drake me envió un WhatsApp diciendo “Tu marido ya acepto la invitación y está en el grupo. Ven también y tapa un par de bocotas 😂” , solo lo deje en visto y apague la pantalla del celular.Después de varias horas de meditar que haría y revolver en mi cabeza recuerdos de los más extraños que tuve en esos años de facultad, me llevaban a seguir rechazando esa invitación. No estaba con &aac
—Esta bien.Esa fue mi respuesta para darme cuenta que me estaría arrepintiendo más tarde. Pensé en Drake que no lo había visto demasiado y sería la excusa perfecta esa fiesta para encontrarnos.Se aparece en mi habitación con ropa normal, hacía tanto tiempo que no lograba ver Alan relajado y sin traje. Sonrió, camino hacia él y le tiró su remera para pegarlo a mi cuerpo—No me tientes, Harper—susurró.—¿Por qué no nos quedamos en la cama?—preguntó rozando nuestros labios.Cierra sus ojos esperando un beso, saque mi lengua y lamí sus labios—Ay dios—exclama y se aleja para no empeorar las cosas —Te haría mía ahora pero no podemos, vamos—dice estirando su mano.Me había puesto un vestido corto, unos zapatos negros y el cabello recogido, un collar que mí madre me
A la mañana siguiente, bajé las escaleras con cuidado, podía oír voces viniendo del comedor y varias empleadas murmurando entre ellas. Una se puso a mi lado cuando termine de bajar todas las escaleras y estaba decidiendo por dentro si continuar el camino o directamente ir a la cocina para desayunar. —Buen día, señorita. La miró rápido —Buen día, ¿qué está ocurriendo allá adentro?—pregunte señalando el comedor.Suspiró profundamente y camino hacia mí—Volvió el hijo más rebelde del señor Frank y no cayó para nada bien esa noticia—murmuró.Niego con mi cabeza y después la vuelvo a mirar para comprender a lo que se refería, habían partes de la historia que me estaba perdiendo porque nunca me comentaron sobre otro miembro de la familia—¿Hay otro más?¿El de anoche también es de la familia Frank? —pregunté desesperada. —Si, disculpe debo seguir limpiando.Alan me había mentido sobre esa parte de su familia y en cambio yo fui lo más sincera posible para contarle mi pasado. Solo le oculte a