Los años pasaron y siempre cada seis meses venía la pareja de casados, a tiempo mire que la señora venía con una linda pancita, después que una niña en brazos se miraba tan hermosa, la niña se parecía mucho a su padre. Hoy volvieron a llegar como siempre habían hecho una reservación con anticipación, pero llegaron y se miraban molestos, el cargaba a la niña en brazos y ella volteaba para el otro lado, parecía que venían peleados.

-Hola buenos días su reservación de siempre. 

-Sí Celeste gracias.

Toque la campana para que Arturo viniera por las maletas y los acompañara a su sweet. Cuando Arturo volvió me contó un chisme grandísimo parecía vieja de barrio como esas de las telenovelas, llegó y me empezó a sacudir de los hombros.

-Arturo tranquilo me vaa a revolver las ideas.

-No vas a creer lo que pasó.

-No a ver dime.

-Cuándo dejé las maletas escuché como la señora llama estúpido a su marido.

-En serio, Arturo no debes de estar contando chismes de los clientes y qué más pasó.

-Bueno el solo rodó los ojos y se fue a la otra habitación, creo que hay problemas en el paraíso.

-Arturo eres peor de chismoso que yo, ya vete a trabajar, no quiero que te metas en problemas.

-Nos vemos nos vemos.

Al rato mire cómo bajo la señora Ángela se miraba hecha una furia, trae una bolsa creo que va a la piscina. Supongo que todas las parejas en algún momento tienen sus peleas espero que lo resuelva, ya que se miran muy bien juntos, al meterse el sol doy mi ronda por el hotel, doy una pequeña caminata en mi tiempo libre, en la piscina es donde miro a la señor Ángela, estaba rodeada por tres tipos, todos le decían bonitas palabras, decidí acercarme para ver si ocupaba algo.

-Hola buenas tardes señora Ángela necesita algo.

-No querida, no necesito nada todo lo que ocupó la tengo cerca, cierto chicos.

Los chicos solo sonrieron, yo también sonreír y me retiré de nuevo mostrador, al rato mire como el señor Esteban bajaba con la niña en brazos.

-Celeste por lo que e leído hay guardería el hotel cierto.

-Sí, déjeme llevarlo, Arturo te dejaré solo acompañere al señor Esteban.

-Si claro.

Caminamos unas cuantas puertas y llegamos al lugar.

-Aquí esta la guardería, hay juego, vijilancia las 24 horas y puede venir cuando quiera.

-Bueno Estela te vas a quedar hoy aquí ok, yo y tu mamá tenemos cosas que arreglar.

-Ok papito.

Está niña es un encanto la dejó y se retiró a su habitación, cuando yo me puse en el mostrador, Arturo tenía cara de emoción.

-Que pasó Arturo.

-No me vas a creer, acabo de ver a la señora Ángela subir a su habitación con un tipo.

-No me jodas, el señor Esteban va para allá.

A los segundos escuchamos el asesor, los dos nos asomamos a ver quién era, el señor Esteban se miraba hecho una furia salió por la puerta principal.

-Crees que los halla cachado o visto algo.

-No lo sé Arturo.

-Oye Celeste hoy vas a salir tarde cierto.

-Desgraciadamente sí porque.

-Bueno te quería invitar a cenar.

-Arturo ya te dicho que no tengo interés en tener novio.

-Y como amigos.

-Como amigos te acepto lo que quieras.

-Es una cita de amigos pero es una cita.

Salimos a las 11:00 fuimos a comer con al Juli how un restaurante muy bonito por aquí cerquitas, nos conocen venimos seguido, comimos, el se retiró yo también, cada quien por su lado, él quiere llevar a mi casa y yo le dije que no, iba a caminar un rato por la playa, caminando por la playa mire un bulto primero pensé que era una foca o un animal parado, cuando me acerqué me di cuenta que era el señor Esteban, se intento levantarse un par de veces y se cayó.

-Señor Esteban- me hacerque y lo ayude a levantarse, el volteo me miró.

-Qué bonita está la noche.

Hablaba barrido se notaba ebrio.

-Señor Esteban venga lo ayude a llegar al hotel.

-No no quiero llegar con esa zorra cómo pudo engañarme.

Lo pensé un minuto, no sabía si esto era buena idea.

-Venga señor Esteban lo llevaré a un lugar donde puede pasar la noche, está cerca de aquí no es muy grande pero se sentira bien.

Caminamos los dos juntos por la playa, yo evitando que se cayera y el intentando caminar.