°Narrador Omnisciente°Dos personas perdidas en su deseo se besaban con alta lascivia. Sus cuerpos apegados querían desnudarse. Si aquello lo pudieran hacer en un pestañear, lo harían.Kenny ante la oscuridad, avanza haciendo retroceder a Morelia. Con la mano calcula el respaldar para no lastimarla con algún objeto. Él siente la pared y ahí es donde baja a Morelia de su cintura para que se sienta más cómoda, pero ella, caprichosamente, alza una pierna enrollando por completo la suya.Pasión, la pasión los está quemando.Kenny aprieta sus caderas mientras deleita celosamente su cuello a mordiscos. Morelia reluce un pequeño gemido, en tanto se aferra más a su espalda.Ambos están tan inmersos en sí, que, ni siquiera, se ponen a analizar en donde se encuentran.Las palabras no salen de ninguno, sus cuerpos expresan todo. Parecía ser el inicio de algo desenfrenado hasta qué...—¿Quién está ahí?La luz se enciende, los dos se miran a los ojos con enorme impacto. Morelia de lo rosa que se e
°Narra Morelia Dalas°Esos ojos cafés me están mirando, bajo esa pequeña sonrisa pícara.No es exagerado decir que se me ha detenido la respiración unos segundos.—Yo… —replico demasiado nerviosa y retrocedo un poco, hasta perder el equilibrio y caigo de trasero al suelo—. ¡Ay!Alzo mi mirada y Kenny me fija con los ojos bien abiertos.Los dos nos miramos de igual forma, hasta que una risa natural sale de él.Él se sienta de inmediato, y pasa su mano por el rostro. Su risa no se detiene. Tampoco veo su intención de ayudarme.Me le quedo viendo, y siento que esa risa es como una melodía para mis oídos.Kenny… Kenny… ¿Por qué no puedo ver esto más seguido?Debería reírme y mostrar mi vergüenza. Pero en vez de eso mis ojos se apañan.Aprieto mis labios.—¿Te gusta el suelo? —me dice con un tono burlón, luego me mira a la cara y borra todo el grandioso gesto que tenía—. ¿Estás bien? —cuestiona. Es claro que ha notado mi expresión.Asiento, él parece asustado así que me brinda rápidamente
°Narra Morelia Dalas°Ever tan brillante y distinguido, me muestra los dientes. Se encuentra vestido de un conjunto de seda blanca, haciéndole ver más fresco.—No sabía que te irías hoy, me sorprendí al ver que te ibas con tu maleta...Morelia, piensa… piensa.—... lo siento, lo siento por perseguirte. —No, está bien —me justifico, negando con mis manos—. Yo soy la que debería decir eso. Tuve un llamado urgente de mi hermano, así que tuve que comprar mi vuelo de regreso. Todo fue tan repentino que no pude, ya sabes... —Entiendo... —Con simpleza, él se rasca la nuca con un poco de tímides—. Quise despedirme antes de no volverte a ver más. Me siento nostálgico porque había prometido darte un pequeño tour, pero la circunstancia terminó así. —No, Ever, no debes sentirte apenado —replico y trato de relacionarme naturalmente. Sus ojos lo delatan. Duda si dar el siguiente paso.—¿Morelia, a qué hora es tu vuelo?—Dentro de dos horas. —Entonces... —él toma mis dos manos con emoción—. Pod
°Narra Morelia Dalas° Recupero poco a poco la visibilidad de mis ojos. Siento el ligero remezón de lo que parece ser un auto. «Kenny..., Ever…» Debido a que estoy alerta, mi mirada se abre con impacto, despertándome por completo. Sin embargo, una voz y unas manos cálidas me toman por sorpresa. —¿Te encuentras bien? Miro a Collins que se encuentra a mi lado. —¿Cómo es posible? —replico e inicio a recordar lo que sucedió. Collins pasa su mano sobre mi cabello para acomodarlo. Nos encontramos en la parte de atrás de un coche. Solo somos él y yo. —¿Te sientes bien? —vuelve a decir—. Te desvaneciste de la nada, estaba preocupado. Me inclino hacia atrás alejándome de su mano con recelo. —¿Por qué estás aquí? Collins parece angustiado de lo que tiene que decir. —Yo debo aclararte muchas cosas... Mientras dice eso, detallo los paisajes que pasé hace unos minutos al llegar aquí. Estamos cruzando esa carretera estrecha, usada como doble sentido. Quiere decir que solo
°Narra Morelia Dalas° —Qué ¿Qué está sucediendo? —interrumpiendo, Matt sale de la parte de atrás del Mercedes. Él me mira y arruga el rostro—. Morelia ¿Cómo es que…? Fijo a los tres con enorme decepción. Mi corazón llora, arde y se hace añicos. Es una sensación horrible. —¿Qué significa esto, Collins? —La voz furibunda de Kenny contraataca, en cuestión de segundos. Collins lo ignora, se arrodilla ante mí y me ayuda a levantar. —¡Te acabo de preguntar algo! Collins me enrolla en sus brazos en forma de protección. —Tranquila, todo saldrá bien —me susurra. Mis ojos siguen impregnados en los de Kenny. No sé si los entiende, pero le digo muchas cosas. Es la primera vez que lo veo de forma diferente. Mis labios tiemblan, quiero llorar desconsoladamente porque el mundo perdió a Kenny: Un empresario excepcional. Su familia perdió a Kenny: Un tío y hermano considerado. Yo… yo lo perdí:El amor de mi vida que tanto admiraba. Esta persona en frente es solo un cascarón. Un cascarón
°Narra Morelia Dalas° “Debes mantener la mente despierta, sin olvidar cada detalle” “No confíes en nadie” “Las mentiras se olvidan” “Las mentiras pueden sonar verdades, y las verdades como mentiras” “Los gestos. Las mínimas palabras vagas de alguien quebrado pueden ser significativas” Y todas estas…, todas estas frases fueron las que salieron de Kenny durante todo este tiempo que me mantuve a su lado. Cada vez que él tenía la oportunidad, derramaba cada una de estas sabidurías como si me estuviera preparándome para algo. Considero que hay muchas cosas extrañas. Estaba furiosa, estaba enojada por las mentiras que él me había dicho, pero luego dándome cuenta de esos pequeños detalles, las comprendí. En el recorrido que había tenido con Ever, me había dicho varias cosas que me hicieron dudar de su exclusión en todo este problema. “Pronto inauguraremos otro Crucero en Washington” Ever, mientras disfrutábamos del paisaje en un mirador frente al mar, había dicho que su padre est
***Horas antes…***°Narra Kenny Stewart°“Pensé que eras distinto Kenny, pero claro, solo me había enamorado de un calculador, mentiroso, y sobre todo obsesivo hombre”¿Qué significaban esas palabras?«Morelia… de verdad… ¿Quién eres?»Me quedo pasmado al ver como ella se aferra más a Collins buscando protección.«Quise, pero no. No puedo soportar ser el Villano también para ti»“Pensé que eras distinto” sus palabras invaden mi cabeza en un tajante eco, “solo me había enamorado de un calculador, mentiroso y sobre todo…” de nuevo esos bruscos disparos persisten, y de repente, mientras miro que ella se va con él, aquellas exactas palabras… se vuelven mías.“Pensé que eras distinta Morelia, confié en ti, pero claro, solo me había enamorado de una calculadora, mentirosa, y sobre todo obsesiva mujer…” Un flashback me decía que yo, en realidad, era quien le había dicho eso alguna vez.«¿Qué quiere decir esto?»Ni bien veo que se están retirando, doy un paso. Alzo la mano como queriendo sos
°Narra Kenny Stewart° La mirada de Morelia es angustiosa. —Kenny... —menciona mi nombre con la voz temblorosa. Aquello me hace enfurecer mucho más. Mi entrecejo se arruga con potencia. Te salvaré Morelia, nadie podrá tocarte más. —Espera Morelia, por favor, no me temas —replica Collins, no sé qué es lo que exactamente ha sucedido, pero parece que se justifica por algo. Ella torna su rostro hacia él—. Has comprendido mal la situación. Yo... Collins la suelta lentamente, como tratando de mostrar que debería confiarse. —Sea lo que sea, no le creas Morelia —me atrevo a decir con tono recio. Su mirada regresa—. Cree en mí, mírame a los ojos. —Señalo los míos—. No debes confiar en él. —Lo lamento, Morelia —insiste, él—. Debes escucharme. Yo no quería que todo acabara así. —Collins. —La voz temblorosa de Morelia, me indica que está a punto de llorar—. Oí absolutamente todo. Morelia se aleja por completo de él. Él parece avergonzado y sin palabras. —Pe-perdón, Morelia —