– Le dije que se largará – vociferaba la Omega.– Luar por favor hablemos.– No hay nada más que decir, lo odio señor Collins, lo odio hasta morir, odio como dejó sus huellas en mi, aún las siento tan profundas que no se han borrado – gritaba entre lágrimas – Sólo quiero limpiar mi alma, arrancar este sentimiento , olvidar todo lo que paso, pero a veces siento que no puedo, he podido darme cuenta que el tiempo no cura nada, solo nos enseña a vivir con el dolor y por eso lo odio, asi que solo marchase.– Luar aún te amo, usted me enseñó a amar, dejastes en mi el más bello sentimiento, aún la llevo en lo profundo de mi corazón, siempre te tengo en mis sueños y te busco cada noche en ellos con la esperanza de que se haga realidad un día, se que fui un cobarde, que debido a mi tonto orgullo hoy no estás a mi lado pero siempre serás la mejor parte de mi historia, una que contaré sonriendo, porque sin importar el pasado, sin importar el final, lo más bello fue haberlo vivido, fue haberte te
Kai llegó al departamento con Ethan, el pequeño solo de entrar preguntó por su madre al no verla por allí.– ¿Tía Cris y mi mami? – dijo acercándose a la Omega.– Está durmiendo pequeño – hablo con cariño Cristal mientras le dejaba un tierno beso en la frente.– ¿Se siente mejor? Ya no le duele la cabeza? – preguntaba preocupado.– Ya está mejor bebé pero necesitaba dormir – le sonrió – Ve y lávate para que comas la comida que te preparo tía con mucho amor, ya luego vas a ver a tu mami – el niño asintió y se marchó obedeciendo la orden de Cristal.Kai se aseguró de que Ethan no se encontraba cerca y habló.– ¿Cristal que le sucedía a Luar? – habló preocupado el alfa.– No es nada grave, solo fue un ataque de ansiedad, le solía suceder cuando éramos más jóvenes, muchas veces la vi ponerse así, se me encogía el corazón cada vez que la veía temblando como una hoja – callo unos segundos y suspiró – Ella siempre ha sido demasiado sensible, pero hacía un tiempo que no le ocurría.– Me parec
Unos años atrás: Había sido el día más frío desde que comenzó el invierno en Milan, Luar se encontraba prácticamente forrada, un tierno gorro de lana de color rosa con un par de orejitas, adornaba su negra cabellera, junto a una bufanda y guantes del mismo color, aportando un toque glamuroso a su Outfit, unos jeans maternales de color negro de cintura baja y ajustables, ya que se encontraba de seis meses por lo que se aseguró de que no le apretaba y se ajustara a su barriguita, para no hacerle daño a su bebé, unas botas altas de cuero, un jersey de color cremita una talla más grande y un sobre todo largo hasta las rodillas. Trataba de procurar mantener el calor corporal y aislar el frío y la humedad para así cuidarse a ella y a su cachorro del frío. Se encontraba caminando por las calles de Milán sin rumbo alguno, hacía unos minutos que había tenido unas palabras con Andrew debido a que el alfa aún no entendía que a pesar de haber pasado varios meses aún se encontraba deprimida por
El fin de semana llegó y Luar se sentía demasiado nerviosa, el hecho de tener a Kim Collins compartiendo el mismo espacio la hacía sentirse preocupada, aunque siempre supo que este dia llegaria, su hijo tenía derecho a conocer a su padre y el Alfa por más arrogante y egoísta que fuese tambien tenia el mismo derecho de ver a su hijo.La omega se encontraba en su cuarto caminando de un lado hacia otro, la hora que habían fijado ya se acercaba y ella sentía que su corazón se saldría en cualquier momento de su pecho.Sus manos temblaban como hojas sacudidas por el viento, mientras tenía que secarse cada cinco segundos por la manera tan horrible en la que le sudaban.– Luar amor, tranquila, todo saldrá bien – escuchó que le decía Cris desde la puerta, no se dio cuenta en qué momento su amiga había entrado.– Solo le ruego a la madre luna porque asi sea – respondió – Me da miedo de que Alice ya sepa de que estoy de regreso.– Esa esquizofrénica no hará nada.– ¿Tú crees? – preguntaba Luar d
Luar sintió como su pulso se aceleró y por unos segundos su mente quedó en blanco, por más que la tuviese delante aun no creía lo que veía.¿Acaso el estupido de Kim le había contado a su esposa sobre el encuentro que tendría con su hijo?¿O es que el muy hijo de puta decidió no cumplir con la promesa de no decirle nada a Alice?Luar sentía que en cualquier segundo tendría un ataque de pánico, el miedo se apoderó de ella y sentía como una fina capa de sudor cubría su frente, pero no, no se permitiría ver débil frente aquella bruja.– Sigue siendo la misma maleducada de siempre, ¿No me invitara a pasar? – decía con sarcasmo Alice.– Como sabes que…– Eso es lo de menos, solo he venido a apoyar a mi esposo, a conocer a su bastardito – dejó ver una sonrisa burlona.– Usted no tiene nada que hacer aquí, por favor retírese – hablaba Luar alzando un poco la voz.– Vas a asustar al pequeño ¿Ese es el ejemplo que quieres darle a tu hijo?Luar miró por encima de su hombro derecho y pudo darse
Es difícil olvidar a quien se ha amado tanto, por quien sentías que eras capaz de todo, a quien le entregastes todo tu amor, tus caricias, tus besos, tus esperanzas, tus sueños.Si pudiera olvidar ese puto pasado que me jode y me atormenta dia a dia, siento que tengo atorados los sentimientos, que vagan desde mi corazon hasta mi mente atormentandome sin piedad.Mi pasado aun duele, hay decisiones que tome, que me marcaron de por vida, preguntándome a mi misma como soportar este dolor.Aprendí en el proceso que hay amores que le sueltas la mano y los dejas ir, pero no se van porque quedan tatuados en tu alma.Pero lo peor de todo es tener que fingir que todo está bien, tener que mantener una sonrisa cuando tienes el alma rota y el corazón echo pedazos, cuando solo quieres gritar y mandar todo a la mierda y salir corriendo sin mirar atrás.Me siento tan mal conmigo misma, por sentir que no puedo olvidar a Kim, es tan irónico lo débil que podemos llegar hacer cuando queremos a alguien.T
Una hermosa sonrisa y las suaves caricias que sentía en mi rostro hizo que abriera mis ojos, delante de mí se encontraba mi pequeño que me miraba tiernamente.– Buenos dias mami, tia y yo te trajimos el desayuno – me decía señalando la mesita al lado de mi cama.– Buenos dias cariño.Lo abracé tirándolo encima de mí y haciéndole cosquillas en el acto, su risa era la melodía perfecta para mis oídos y la cura para mi alma.– Gracias mi precioso cachorro – mientras restregaba la punta de mi nariz con la de él.– Y a mi no se me dan las gracias – escuche que decía Cristal desde la puerta de l
El lunes fue un día con demasiadas emociones para Luar, desde muy temprano tuvo que dejar a su pequeño en la escuela, era su primer día con personas completamente extrañas para él.Ahora va camino hacia la empresa donde comenzará a trabajar y solo lleva en mente su carita de tristeza, sus ojitos de cachorro abandonado, se veía asustado, tan aterrorizado que le dieron ganas de sacarlo de allí corriendo, pero gracias a Cristal que los había acompañado pudo contenerse. Su corazón se sentía oprimido debido a su bebé, sus pensamientos aún se encontraban en aquel momento, de pronto sintió el claxon de un auto, que no paraba de sonar, lo cual hizo que saliera de su transe.La luz del semáforo se encontraba en verde y ella no se había percatado de eso, asi que puso en marcha el auto y siguio.Tenía que dejar de preocuparse o al menos intentarlo, si seguía así podría tener un accidente y eso solo empeorara la situación, dejando solo a su pequeño en manos de personas sin escrúpulos.Así que de