Ya casi se acerca el final!!
Me percaté de que Tiara se encuentra pálida y me preocupa. Desde que veníamos en el avión se tuvo que levantar dos veces para ir al baño y se ve muy mal. Ella piensa que le cayó mal el desayuno, pero se ve nerviosa y oculta algo. Se ve preocupada, la conozco, pero como hay muchos testigos no la interrogaré. Le daré su espacio por ahora y luego a solas la atacó a preguntas. Ha llegado la camioneta que alquiló mi papá. Apenas son las 1:00 de la tarde, el calor es fuerte y nos acomodamos. Llegaremos a mi casa, ahí están los carros y luego a su destino. Empiezan a hablar todos a la vez y parece una gallera. Al mirar a Tiara la vislumbré moviendo mucho sus manos en su regazo, pero disimulé mirando hacia la ventanilla. Mis ganas de averiguar me corroen, el tráfico no ayuda y agarré la mano nerviosa de Tiara. Ella alza su mirada, me da su media sonrisa y acaricié su mano. Al llegar, todos se bajan y empiezan a guardar sus cosas en sus carros. El primero en despedirse es Oliver, está adormila
Tiara Gracias a lo despistado que es mi tío, la puerta está sin seguro. No busqué la llave con estos nervios. Solo quería escapar de la mirada de confusión de Ken y con mis miedos a la superficie que no me ayudan a pensar con claridad. En la cocina está mi tío y al darme una mirada me regaló una sonrisa. —¡Hola, Tati, bienvenida! —su efusividad me descoloca—. Estoy cocinando algo rápido —tiene un cucharón en mano—. Fabian me llamó que vendrías antes, él dejará a Dorian y enseguida regresaría a comer. Me ha puesto al tanto de que te encuentras mal, pero deja que pruebes esto y te sanas. No soporto más este peso y me deslicé al suelo. Mi tío silenció, recuesto mi cabeza en la puerta y cerré los ojos. Las lágrimas se escapan a chorro, siento una mano en mi cabeza y al abrir los ojos me reciben los preocupados del tío. Se acuclilló y sus brazos me refugian. Me rindo en su calidez y me ahogo en llanto. —Ayúdame, vamos al sofá, Tati —me ayuda a levantar y me sentó en el mueble. Se f
Cuando mis nervios se apoderan solo hablo bobadas y me sonrojo. Él camina hacia mí, me sostiene las mejillas y sus ojos en los míos me anclan. —Un hijo no cambia nada, te amo y si estás esperando un bebé los amaré a ambos. Somos jóvenes y esperaba ser padre en buen tiempo —abrió sus ojos enormes—. Mis planes eran para cuando nos invadieran los alíen, tal vez, pero si viene uno lo cuidaremos —su seguridad me hace enternecerme—. Jamás me niegues este proceso, no tengas miedo en incluirme en las mejores y peores situaciones.—Te lo dije, Tati —escucho a mi odioso primo. —Lamento sumarme: Te lo dije —mi tío lo secunda y ahora falta Dorian. —No lo dije, pero lo pensé —giré a verla y le saqué la lengua—, también cuenta —alza sus manos Dorian y sonrió mi amiga.Me abraza Ken, me siento mejor con su apoyo incondicional. Es bueno saber que no saldrá corriendo.—Perdóname esa y muchas más —dije ignorando a mi odiosa familia.—Juntos siempre, somos un equipo. —No me suelta Ken, como si creyer
Kendrick Voy de camino con Tiara, hoy es un día muy especial. Por supuesto, cumplimos tres meses de novios y pronto será mi esposa. Ella no quería regalos, ni nada de sorpresas porque estoy gastando mucho en ella y se equivoca si piensa que me quedaría sin algo en mente. Por ella bajo las estrellas, ahora más que el fruto de nuestro amor está en su vientre y por ellos soy capaz de todo. Tiene dos meses y está con náuseas, pero aun así come como lechona. Me quedo bobo al ver su apetito, pero la acompaño a comer. Díganme si eso no es amor verdadero. Nos dirigimos hacia el nuevo trabajo de Fabian, lleva un mes tatuando y queda en la avenida 167 en Bayamón. Uno de los socios, se llama Ted, es un aficionado a los videojuegos y rápido se conectó con Fabian. Esa unión lo ayudó a conocer a los otros socios. Gracias al talento de Fabian está ahí y no solo por conexión. Tiara cree que lo vamos a buscar para almorzar juntos y celebrar. Mi Sirena se equivoca, me haré mi primer tatuaje en honor a
Se ve que son duros y desconfiados, pero jamás malas personas. Mi hermano Fabian pasa por ficha y tiene arte. Estoy muy feliz que continuara a pesar de su dolor. Fabi suelta a Tati, se acerca a ellos y los abraza. —Gracias, les debo mucho —habló Fabi y les agradece—. No soy sentimental, pero me han tocado, malditos.—¡Se acabó la lloradera! —gritó Brandon y le dio un cantazo en el hombro a Fabi—. Ahora dame el autógrafo, Kendrick. Luego de tomarnos la foto grupal, el autógrafo y charlar nos hemos ido. Tiara invitó a todos a la boda, se me adelantó y ellos aceptaron. Está muy feliz por la oportunidad que le brindaron a Fabi. Nos encaminamos hacia la casa de su papá. Allí cenaremos y luego le daré su otra sorpresa. Desde que me enteré de que estaba embarazada no hubo Dios que me apartara de ella y fue una pelea dura con su papá. Estaba muy molesto, pero no cedí. Ella duerme donde este pecho amanezca. Mis padres nos cedieron la casa de Dorado, detrás de la playa. Le encanta el apartame
Tiara Es el gran día, no se emocionen aún falta para mi boda. En eso está muy dedicada mi suegra y Marjorie. Hoy es mi primera colección, gracias a la obsesión de Ken de explotar mi talento. Aún no se perdona no haber estado en mi proyecto de la universidad y la esposa de su socio está en el mundo de la moda. Uso sus conexiones, no puedo negar que estoy muy contenta. Estoy dando todo de mí en este sueño y me aseguro de vivir cada detalle. Me encuentro en la cocina preparando bacon y tostadas. Mi odioso está colando café, el olor es insoportable y dejo a fuego lento la estufa. Me voy corriendo hacia el baño, deposito un poco de jamón que hace apenas cinco minutos comí. Siento que me agarra el cabello Ken, me pasa la botella de alcohol y la acerco a mi nariz. Eso me ayudó, agradezco vivir con él y que sea tan protector. Ken me acaricia la espalda, me da mi tiempo de recomponerme y una vez mejor tapé el alcohol. —Estoy mejor, amor, pero el olor del café es horroroso —dije con berrinch
Rápido saco los dos sobres de mi cartera, los sostengo y me bajo para poner punto y final. Al caminar veo lo decaída que está la vivienda, el pasto crecido y el carro de mi madre está estacionado en la entrada. Tomo valor, toco la puerta y nada. Volví a tocar varias veces, se escuchan unos pasos y maldiciones. Por instinto nos apartamos de la puerta y abre en ese justo momento. Revelando a mi madre tan perdida, su pelo que siempre cortaba militar está más largo y le sale una pequeña coleta. La Leona tiene su cabello salido del moño y una bata gastada. Al verme en su expresión se nota el repudio. Ella me da su mirada fría y posa sus ojos en mi vientre. Sin pensar pongo mis manos de escudo, protegiéndome de miradas venenosas. A mi lado Dorian se tensa, está alerta y me agarra el hombro. —Putita, ahora con cría —lo que suelta de su boca es pudrición—. Eres la perfecta puta. Sus palabras son dolorosas, pero he aprendido a ignorarlas. —¡Hola, madre! —le doy una media sonrisa y ella sonr
Se despidieron de mí con la preocupación en todo su rostro y sonreí a medias. El doctor buscó a una enfermera que me preparó para la ecografía, además me ordenó sacar la sangre y orinar. Estoy agradecida porque se descartó embarazo ectópico y solo espero los resultados de los análisis. Ken se aseguró de traerme comida de la nana, me limpié la boca con la servilleta y recibí la visita de mi papá con Marjorie, histéricos. Ken apartó la bandeja y les dio espacio.—Hija, ¿no quieres que llegue a los cien años? —cuestionó mi padre y se lanzó a besar el vientre, luego me dejó sin aire con su apretón—. Mi corazón no aguanta tantos sustos, Tiara —me besó la frente y no ocultó sus lágrimas.—Papá, estamos perfectos, solo quedan los análisis y estoy segura de que vendrán positivos —limpié sus lágrimas y Marjorie sostuvo mi mano.—Gracias a Dios que los protegió, si no estaría presa por arrancar la cabeza a esa madre malvada —afirmó Marjorie y me abrazó.El doctor hizo aparición con su carpeta e