SerenaLas lágrimas son el medio al que estoy recurriendo, para sacar de mi interior la frustración que me consume todos los días. Es por esto, que como todas las noches después de haberme encontrado con Ian, lloro sobre la cama mientras Bratt duerme.Todo lo que había avanzado, se ha hecho añicos, por lo que fingir delante de los demás se ha tornado difícil.El recuerdo de aquella mujer aferrada a Ian, las palabras de él y el imaginarme a los dos haciendo el amor todas las noches me torturan de una manera muy dolorosa. Me siento perdida y que mi vida carece de sentido cada día que pasa.Es que, ¿de qué me sirve seguir existiendo si estaré atada a un matrimonio que no quiero?Con quejidos y lamentaciones que se ahogan en la almohada, me quedo dormida.***La claridad provoca que me remueva incómoda entre las sábanas, pero estoy tan adormilada que me quedo con los ojos cerrados. Casi entro en una nueva etapa del sueño, cuando la voz de Bratt me despierta por completo, pero me hago la d
SerenaNo sé cómo he llorado tanto. Es que el dolor en el pecho me presiona muy fuerte, debido a eso, lo único que me apetece es dejar salir mi sufrimiento en llantos sonoros.¿Cómo es que Bratt y Lilia tuvieron el coraje de hacerme algo como esto?Bratt tiene problemas serios, ¿acaso es adicto al sexo? Es que no asimilo que él no tenga un filtro. ¡Con Lilia! Una mujer casada, quien tiene un hijo con su esposo, pero que también es mi amiga.¿Cómo se atrevió él a pasar ese límite si supuestamente me amaba? Es que no lo concibo.Me siento traicionada. No solo eso, siento que no tengo ningún valor para nadie, que mis sentimientos no importan.—Me quiero divorciar de Bratt, pero si lo hago, el abuelo le hará daño a Ian. Él es inocente y no es justo que pague por mis errores —digo para mí porque no tengo con quien desahogarme. Podría recurrir a mis padres, pero no quiero decepcionarlos. Mi otra opción sería Ian, mas de él debo mantenerme alejada.«Bombón, te amo tanto que siento que me vol
SerenaToda esta semana me la he pasado pensando en una vía para deshacer mi matrimonio con Bratt, de manera que el abuelo no pueda hacerle daño a Ian; pero ¿cómo puedo evitar esto último?Sería una estupidez ponerle una demanda por extorsión, puesto que no hay forma de que yo le gane a un Nisson.—Me siento atrapada —susurro, resignada—. Por lo menos Ian ha hecho su vida y se encuentra bien.Estuve revisando sus perfiles y al parecer ya dejó el modelaje, para dedicarse a su verdadera carrera.Estoy muy feliz por él, puesto que me había mencionado que es lo que en realidad quería hacer, pero que le habían cerrado todas las puertas y no tuvo más opción que recurrir al modelaje.Entonces no es justo que su sueño se vea arruinado por mi culpa.Observo los documentos que yacen sobre mi escritorio y hago una mueca de disgusto porque no quiero trabajar. Es increíble que, de ser una maniática del trabajo, ahora es lo menos que quiero hacer. A decir verdad, no tengo ganas de nada.Siento que
SerenaEl ruido a mi alrededor se percibe tortuoso y confuso, sumándole las preguntas a las que no tengo respuestas; asimismo, las acusaciones, insultos y burlas.No entiendo qué sucede, pero siento que voy a colapsar en cualquier momento, si estas personas continúan rodeándome de esta manera tan asfixiante.—¡Déjenme en paz! —grito, alterada y con los nervios de punta.Necesito que se vayan...Miro a mi alrededor desorbitada y solo soy consciente de que me graban y me fotografían, aparte de los ataques de su parte.Con pasos titubeantes, trato de huir de aquí, mas ellos me lo impiden al interceptarme.«Qué alguien me ayude, por favor».—¡Eres una maldita vergüenza para las mujeres! —grita una señora a quien desconozco.—¡Deberías morirte! ¡Eres tan desagradable que por eso tu marido se buscó a una mejor que tú, perra!«¿Qué sucede? ¿Por qué estas personas me atacan?».—¡Déjenme en paz! —espeto, más alterada y al borde del llanto.El mareo se torna insoportable, entonces ocurre lo ine
Taís y yo nos miramos asustadas, mientras que mamá, quien se ha quedado parada en el umbral de la puerta, nos observa con semblante relajado.—Hubo un tiempo en que notaba la manera tan tierna en que mirabas a Bratt —rompe el silencio y camina en nuestra dirección—. Fue cuando supe que te habías ilusionado con tu amigo apuesto y encantador. »Es que Bratt, aparte de atractivo, era un chico dulce y caballeroso. Por tal razón, me pareció normal que tú también cayeras rendida a su encanto; al fin y al cabo, eran unos jovencitos ingenuos. Mamá suspira y se sienta cerca de donde yacen mis pies.—Después ustedes se separaron y pocas veces se veían. Él se convirtió en un mujeriego y tú empezaste a tener tus novios. Entonces comencé a sospechar que tu enamoramiento había terminado. Por eso me sorprendí mucho cuando nos dijeron que estaban enamorados y que querían casarse.—Te equivocas, mamá, siempre amé a Bratt —refuto.—Una pregunta, cariño, cuando estabas con tus novios ¿extrañabas a Brat
BrattMe siento extraño.Quizás melancólico o un maldito imbécil. En mi vida, he tenido la dicha de tener a mi lado a dos mujeres maravillosas, mas a ninguna valoré.Serena fue mi primer amor. Ese que es puro e inocente y que nació de una travesura. O quizás ya la amaba y no me atrevía a reconocerlo. A veces pienso que lo de aprender a besar fue solo una excusa para probar sus labios.¡Si tan solo no hubiera sido tan cobarde aquella vez!Luego ambos tomamos caminos por separado y sentí que mi mundo se derrumbó. Sin embargo, seguí cometiendo pendejadas. Luego me animé a decirle acerca de mi amor por ella, pero había llegado tarde.Eso me dolió bastante, razón por la que me cerré a la posibilidad de volver a amar y de mostrar mis verdaderos sentimientos.Luego conocí a Victoria. Una mujer hermosa, segura de sí y muy inteligente. Hicimos química al instante y, a los pocos días de haber salido, tuvimos un buen sexo.Mientras me acostaba con ella no lo hacía con ninguna otra; supongo que u
SerenaMiro el mensaje de Ian, una y otra vez, con una sonrisa de tonta en la cara, o así creo que me veo.Él es tan lindo…—Por lo menos tengo una razón para sonreír en medio de este infierno. —Suspiro.Salgo de la habitación y doy vueltas en toda la casa, entonces me siento en el jardín, para admirar las rosas que me regaló papá ayer y que mamá me ayudó a sembrar.—Si sigo aquí encerrada, me volveré loca —musito.Vuelvo a entrar a mi perfil, solo para leer el mensaje que me dejó Ian. Por un momento siento la necesidad de desbloquearlo de mis contactos del teléfono para llamarlo, mas me freno.Ian ya tiene pareja y sería mucho atrevimiento de mi parte buscarlo. Mejor no hago tonterías.Miro al cielo y una extraña tristeza me embarga, ya que Bratt también cumplió años ayer. ¡Hasta eso compartimos! Recuerdo que mi mamá y la suya dieron a luz el mismo día. Solo que yo nací de noche y él en la mañana, así que es mayor que yo por varias horas.—¿Todo bien, mi niña? —me aborda mamá, quien
BrattObservo a Jael con ganas de estrangularlo, pero en su lugar, decanto en sorber mi whisky.—Bueno, esa es la razón para odiarte —dice como si nada.—¡Eres un maldito cabrón! —exclamo. Este puto es un imbécil y aparte está loco—. ¿Qué culpa tengo yo de esa pendejada?—Eres su hijo —responde el muy patán.—¿Y...?—Lo sé, fui un tonto; pero Taís me está ayudando a ver ciertas situaciones con más claridad y desde otra perspectiva.Ajá...—¿Ella es tu entrenadora física o tu maldita coaching de vida? —interpelo fastidiado. Desde que Jael empezó a ir al gimnasio de Taís, todo lo que este cabrón menciona tiene que ver con esa mujer.—Ella me está guiando para sacar una mejor versión de mí; ya sabes, necesito reflejar de manera externa lo que llevo en mi interior.—Ya... —Asiento con la cabeza, como si de verdad esta pendejada tuviera sentido para mí—. Sé lo que te sucede, primito. —Sonrío malicioso—. Te gusta la mulata y por eso le sigues la corriente en todas sus tonterías. Ni que ella