Leonardo le llamó a su papá para que se preparara junto al padre de Aixa y se vinieran de inmediato para la dirección que él les daría.
Pero no les dio mayores detalles.
Aixa quiso hablar con él pero éste ya había colgado la llamada, ella está muy preocupada porque todavía no sabe que a los niños ya los han localizado y ahora con esa llamada se ha preocupado aún más porque piensa que algo malo ha pasado.
Su madre y la enfermera Licha no se han despegado de ella y en cada momento le tienen que estar dando una fusión de té para que se tranquilice porque está muy nerviosa y fuera de Sí.
Mientras tanto el joven Daniel en la cárcel está muy contento porque según él ha hecho una buena obra al darle la dirección a Leonardo de la casa de Marcela y solo está a la espera de que su primo le ordene a las auto
- ¿Papá en dónde estás? tenemos que hablar con urgencia.Gritó el padre de Leonardo cuando dentró a la mansión.¡Papá! volvió a decir cuando no escuchó respuesta por parte de su padre.- ¡Qué raro! será qué mi padre no está en el despacho y ya se fue a su habitación a dormir.Pensó el señor para sí mismo y se fue a la cocina a servirse un vaso con agua. Pero también se le hizo extraño que en la cocina no hubieran señales de que alguien haya cocinado para la cena, pero de inmediato pensó que tal vez la señora de la cocina no le había dejado nada listo para comer porque pensó que él cenaría afuera.Puesto que le urge hablar con su papá, se fue para su habitación a buscarlo pero no lo encontró allí entonces se preocupó
Tal y como Leonardo lo planeó con la policía, en cuanto Marcela se fue para el baño, él se quedó solo en la sala y entonces les dio la luz verde a los elementos policiales para que entraran al predio de la casa.Ya era casi de madrugada cuando lo hizo y seguramente los hombres que tiene contratados Marcela para que le cuiden el pellejo ya deben de están cansados porque son los mismos que estaban durante el día.Se descuidaron un momento y cuando menos acordaron ya tenían encima a los policías, los hicieron tirarse boca abajo en el suelo y los amarraron con las manos hacia atrás para quitarles las armas.Todo eso lo estaba observando Leonardo desde una ventana, cuando vio que ya no había peligro alguno entonces les abrió la puerta a los elementos y cuándo Marcela bajó de nuevo se llevó la sorpresa de que fue capturada por la policía.- Leon
- Toma hijo, aquí están los documentos ya firmados.- Gracias mamá.- No me lo agradezcas, tu sabes que estoy aquí para ayudarte en todo lo que sea necesario con tal de que te deshagas de esa mujercita.- Qué lástima que su hijo no se podrá deshacer de mi, señora Zulema.Dijo Aixa haciendo acto de presencia, pero sin los niños porque se los dejó a su mamá.- ¿Qué haces aquí muchachita pobretona?Deja de perseguir a mi hijo y déjalo que sea feliz con esta bella dama que ahora tiene a su lado.- Usted está muy equivocada señora. Leonardo y yo seguimos y seguiremos siendo esposos para siempre.- Así es mamá, Aixa y yo jamás nos vamos a separar.Dijo Leonardo quitándose del lugar donde estaba sentado al lado de Licha y acercándose a Aixa para pasar un brazo por su cintura.<
Leonardo fue a hablar con su primo Daniel y le explicó que no le podría ayudar como se lo había prometido porque Marcela no tenía a los niños en la dirección que él le dio.El joven Daniel se mostró muy arrepentido por todo el daño que hizo y le pidió perdón a Leonardo, también le pidió que le dijera a Aixa que aunque él no merece el perdón de ella pero que por favor lo perdone.Cuando Leonardo le comentó acerca de lo que sucedió con el abuelo Miguel, este estaba muy acongojada y le pidió a Leonardo que hiciera justicia con su propia mano, que vengara la muerte de su querido abuelo.- Le prometí a mi abuelo que yo mismo mataría a quien lo asesinó, pero al final no tuve el valor de hacerlo. Creo que yo podré ser muy cruel, pero no asesinaría a un miembro de mi propia familia.- ¿De qué
- Aixa Raquel Lozano, ¿acepta por esposo al señor Leonardo Bustamante, para amarlo y respetarlo en las buenas y en las malas, en la salud y en la enfermedad? - Sí, acepto. - Los declaro marido y mujer, puede besar a su esposa. Sí, Leonardo le pidió matrimonio a Aixa de una forma muy graciosa. La niña comenzaba a dar sus pasitos y él le dio el anillo junto a una nota y la mandó para donde su mamá. La niña muy emocionada llegó donde ella estaba cocinando y le entregó la cajita donde estaba el anillo. - Tata mami.- Dijo la bebé y le señaló con su pequeño dedito el lugar donde Leonardo estaba sentado, y luego se regresó para donde su papi. - ¿Quieres ser la esposa de este "Maldito Arrogante"? Aixa sonrió al leer el papel y muy emocionada corrió hasta donde estaba su hombre y quedando a horcadas sobre él lo besó. - Claro que sí acepto ser tu esposa mi amor bello. Pero no entiendo porque me lo pides si ya estamos casados. - ¿Te pedí yo que te casaras conmigo? - No. - Bueno eso sig
- Abuelo por favor no me haga eso, yo no me quiero casar con una desconocida. Le rogaba Leonardo al señor Miguel Bustamante, quién le está obligando a casarse para poder nombrarlo como heredero de sus múltiples empresas. - Pues si no lo quieres hacer no lo hagas, pero yo ya di mi última palabra y está en ti si acatarla o no. Le respondió el abuelo. - Papá ayúdame a convencer a mi abuelo para que me herede los negocios sin necesidad de obligarme a hacer algo de lo que yo no estoy de acuerdo. Suplicaba Leonardo a su padre en aquella oficina donde están reunidos los tres. - Hijo, sabes que a mí no se me da muy bien esto de los negocios y por eso me estoy jubilando temprano y tú eres el indicado para que sigas con el legado de las empresas "Imperial's" . Ya conoces a tu abuelo y sabes que no dará marcha atrás a esta condición que te a puesto, porque él quiere que al momento de que tú tomes el mando de las empresas seas un hombre qu
El día previsto para realizar la boda llegó, habían muchas personas en la ceremonia pero lo curioso de esto es que los que se van a casar aún no se conocen. Aquí se verán por primera vez y todo eso se debe a que Leonardo no quiso asistir a la cena que prepararon para las dos familias en donde los presentarían. El joven Leonardo entró del brazo de su madre, quién a regañadientes asistió a esa boda pues a ella no le agrada para nada la decisión del abuelo de no tomar en cuenta a Marcela para esposa de su nieto. Poco después hizo la entrada nupcial la novia, esta viene del brazo de su abuelo, quién con un nudo en la garganta y dolor en su corazón le entregará su nieta a otra familia pero todo por el bien de ella ya que él pronto partirá de este mundo. - Vaya, para ser la primera vez que veo a mi futura esposa puedo decir que se ve mucho mejor de lo que me imaginaba. Se dijo Leonardo en su mente cuando la joven se acercó a él. En todo el desarrol
- Disculpe señorita, puedo hacer una llamada desde el teléfono fijo-. Preguntó la inocente Aixa a una de las muchachas que a diario llegan a hacer el aseo. - Claro que sí puede hacerlo señora. Le respondió la muchacha amablemente, pues como ya saben que en ese hotel solo se hospedan las personas con alto nivel económico entonces ellos tienen la orden de hablar con respeto cuando se dirijan a los huéspedes. - ¿Podrías ayudarme por favor, es que no sé cómo se maneja eso-. Comentó la joven Aixa y la muchacha creyó que ella se estaba haciendo la que no podía solo para molestarla a ella. Pero de igual forma su deber como empleada de ese lugar era orientarle y así lo hizo. Aixa llamó a su abuelo y le comentó que aquí la está pasando de lo mejor, aunque lo extraña mucho a él pues nunca se han separado por varios días. Sólo lo hacían durante el día que la chica salía a trabajar pero por la noche siempre regresaba con él a casa. - Ay hijita, que Dios te bendig