Tres días pasaron con éxito y otro mes estaba por culminar, en eso la mente de Vega estaba buscando la oportunidad de ver a Darío en un museo de pintura; supo por su informante que su hobbie es la pintura, desde donde se encontraba, vio la noche en los cristales posteriores del techo del mismo lugar noto que no había mucha gente, solo los que les encanta coleccionar o distraerse trayendo a su familia.
Respiró hondo, dejando un mechón de cabello tras su oreja, se miro en uno de los múltiples vidrios, que había en cada esquina del lugar y detallo su atuendo algo más casual un jeans Negro, con una blusa azul oscuro de lentejuelas tacones plateados, cortesía de los regalos que le ha dado Izan aún sin verse, le manda muchas cosa que agradece.
Al ver su rostro lo nota limpio con su marcará de pesta&ntild
Otro mes se fue y con ello el verano, a pesar de que la ciudad de Londres no fluye el sol como es debido; sino manteniendo la atmósfera siempre en nublado, las personas van y vienen de hacer sus deberes desde temprano; como el ir a trabajar, al médico, gimnasio o hasta cuidado para el cabello y este último lo está disfrutando Vega en un SPA exclusivo, para el cuidado desde los pies hasta el cabello, nunca pensó que su vida cambiaría de forma tan radical, su sonrisa se expande al ser atendida por dos mujeres una arreglando su cabello y otra haciendo pedicura. Tiene una mascarilla de color verde, para limpiar las impurezas de la piel, junto con dos rodajas de pepinos en sus ojos, soltó un suspiro por bajo al sentirse consentida gracias a Izan, que no ha perdido detalle en consentirla. A veces la hace rodar los ojos, por ser
Un ruido fuerte hace que la pelirroja se levanté de golpe de su habitación; al momento gruñe por el dolor de cabeza le llegó al levantarse de esa manera solo mira su habitación en completo desastre tiene que limpiar hoy o sino tendrá un montón de basura debajo de sus pies, pero el sonido vuelve a oírse, por lo que se pone de pie bostezando a la vez, vio por reflejo de la cortina de su ventana que era de día abrió la puerta quitando el seguro y se aproximó al ruido era extraño recibir visitas, sabiendo que su Padre estaba en su cuarto seguramente dormido de tanto licor que bebió anoche o eso pudo ver antes de irse a dormir siendo las tres de la mañana, Izan no quería dejarla ir, pero le tuvo que decir que no podía dejar a su Padre solo y no tuvo más remedio, que brindarle el apoyo de mandar a uno de sus guardias a traerla de r
Por su parte en la mansión Price; un hombre mayor abrazaba a su esposa con total cariño desde la espalda de la dama que veía desde su terraza el jardín que tenían; a pesar de no tener muchas flores, solo arbustos con formas de notas musicales o incluso ángeles como la fuente que tenían en la parte principal antes de llegar a la entrada de la mansión. Su sonrisa era única y más por las palabras de su esposo que le hablaba al oído, dejando que su rostro se sonroje por cada palabra; en el momento que se giró para encarar al caballero que le dio su amor incondicional sin tener nada en el bolsillo supo, que su vida sería duradera al lado de un gran hombre que Dios le permitió tener, le tocó su mejilla recibiendo el tacto rasposo de su barba grande; pero bien cuidada sus ojos brillan al verla a ella, cosa que no puede evitar demostr
Otras semanas pasaron y el crucial mes llegó, para que el plan de Vega se ejecute para los dos Magnates, ahora mismo se encuentra con Hugo su mayor cómplice; dándole los ajustes del plan que va a necesitar realizar hoy, dentro de la empresa J&E Cook Fabrics; su sonrisa se ensancha al chocar su copa con su mejor amigo; que sonríe ante el avance que han dado.— Te felicito Vega has podido manejar a uno de los Magnates a tu favor, tanto así que pudiste colocar un micrófono en el escritorio del hombre, dándonos la información que necesitamos. — comento feliz de lograrlo. La pelirroja lo ve y rueda lo ojos, conociendo de antemano que no fue fácil y toma asiento en el mueble amplio de ese apartamento, que posee su amigo.&n
La noche llegó tan rápido, que nunca imagino Vega sentirlo tan cerca solo faltaban horas; para terminar, se vio una última vez en el espejo de su dormitorio se tocó su mejilla evidenciando el gran trabajo que hizo en su maquillaje, además del vestido negro corto hasta los muslos sensual para su chico rudo, sonrió con suficiencia la pelirroja nada podía fallar, se miro nuevamente al espejo pequeño que tiene, para soltar las siguientes palabras. — Bueno hoy es el día, brilla Vega Hill; al pasar esta noche serás rica y nadie te detendrá. — susurró, solo para ella antes de oír un golpe en su puerta. Bufo por lo bajo y se giró, para no seguir oyendo ese sonido, encontrándose del otro lado a un hombre alcoholizado, como siempre tanto que le causó repulsión, el olor que desprendía su piel; contuvo una respiración profunda para ver cómo estaba demasiado e
Conforme, pasaron por el amplio pasillo bien pulido, como elegante; Izan abrió la puerta con su clave, que posee su oficina en la misma puerta cerca del cerrojo, trato de ver la clave con disimuló, lo que grabó en su mente en caso de ser necesario. Cuando; estuvieron cómodos en el gran sofá amplio, que posee del lado derecho, fue dónde aprovecho cada uno para entrar en acción, en este caso el empresario tomo la iniciativa de inclinarse para mantener a Vega, más cerca del respaldo del sofá negro muy cómodo para todo visitante, que llegue a estar en el. Por lo que besos iban y venían, el bolso de ella estaba sobre la mesa de centro por momentos lo miraba, sin dejar de besarse con Izan, hasta que él comenzó a bajar el cierre de su vestido negro, además de tocar sus muslos con su otra mano, que hacía erizar la piel de la dama, pero una mano fue colocada en el pecho de Izan; alejándolo de repente. &nbs
Una hora después… La respiración de Vega va en aumento, sus manos tiemblan por momentos al seguir manejando con rapidez todas las calles y veredas de Londres, debe llegar cuanto antes al apartamento de Hugo, sino todo será un desastre maldijo por lo bajo al sentirse de ese modo; pero cerro sus ojos por un leve momento y luego condujo, no bajaba la velocidad de 150 km/h; agradeció al imbécil de su ex por enseñarla a manejar autos, para cualquier ocasión que lo ameritara. La noche estaba iluminada, sin casi nadie en la calle, solo unas que otras personas que vienen de fiestas o bares en la misma zona. Próximamente siga su recorrido, hasta lograr estacionar el auto una cuadra antes del edificio de Hugo saco su bolso y rápidamente ingreso, el guardia la observo cosa que la dejo pasar sin problemas al conocer quién era ella, fue practico para Vega; que al llegar al ascensor toco el botón solo dos segundos le tomo de espera y la llevo al piso de su compañero de trabajo. Al estar e
La rabia y desesperación que sentía Vega, no era nada normal, habían pasado quince minutos, pero no hubo rastro de Darío estaba comenzando a sospechar; pero decido calmarse esperándolo en la puerta del lugar, tuvo que ocultar el carro por un callejón; sin salida a dos cuadras de donde ella estaba; se encontraba sin armas, solo con un cuchillo en el muslo de su pierna derecha, en caso de tener alguna novedad, que la llevaría a defenderse. Se encargó; unos minutos antes de hacerse un corte en el labio y otro en la frente, para dejar en claro, que la situación era crítica como lo mencionó vía telefónica, el frío estaba poniéndose más fuerte que se cruzó de brazos; tratando de acobijarse, cuando exhaló el aire en sus pulmones pudo oír, el rugir de un auto aproximarse eso la dejo más tranquila; tanto que se tiró al suelo, antes de ver el carro deportivo de Darío estacionarse, sus ojos los preparo para llorar, porque en la mente de la pelirroja, era iniciar su teatro, para lograr te