LUGAR PROHIBIDO.

Narra Maia.

Debía mantenerme alejada del humano que quería su pago y junto a Ana decidimos mantenernos dentro de la habitación con tal de no verlo, rogando a la madre naturaleza a   que él se le olvide dicho pago.

«No estoy dispuesta a darle ningún pago» pensé mirando por la única ventana que tiene este aposento.

—Maia, estoy cansada de esto, volvamos a casa, por más que lo evites tendrás que acostarte con él, ya quiere su pago, viste lo furioso que se puso—, me aconseja Ana, cómo siempre asustada.

—¿Sabes lo que nos espera a ambas si regresamos a casa?, — ella movió la cabeza afirmando, — estaremos encerradas, no se sabe por cuánto tiempo, tal vez n

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP