Maximiliano FreetmanLe había dicho a Ivanna, que todavía la amaba y que nunca había dejado de hacerlo; también que pensaba hacer todo por recuperarla sin importarme pasar por encima de Jordan. Esas palabras las tenía encerradas consumiéndome día a día, después de esa terrible mañana cuando Ivanna y Valerie, entraron a mi habitación y me consiguieron en la cama con Gianna. Han pasado ocho años de ese suceso y todavía no puedo entender como Gianna, logró engañarme esa noche. ¿Como pude confundirla con Ivanna? Si apenas hacía solo unos minutos que Ivanna y yo, estábamos sobre esa misma cama abrazándonos y besándonos apasionadamente. Nuestros cuerpos se estaban dejando llevar por la pasión. Mis manos recorrían todo su cuerpo, al igual que ella hacía lo mismo con el mío. No sé, en qué momento la había despojado de su blusa y estaba perdido entre sus pechos. Los dos gemíamos, mis labios y mi lengua devoraban su piel, estaba perdido entre esa pasión que me costaba controlar cuando ella
Ivanna KridmmanMaximiliano estaba completamente fuera de sí, por una llamada que recibió del hospital. Samuel, tomó a Ashley y subió las escaleras dirigiéndose a la habitación de mi pequeña, para que esta no se alterara. Andrew, cuando notó a su hijo en ese estado intervino tratando de tranquilizar a Maximiliano.─ Maximiliano, trata de tranquilizarte ─ le dije acercándome a él, yo puedo trabajar mañana contigo en esas dos cirugías.─ Gracias, Ivanna. ─ Me dijo acercándose más a mí. ─ Debo ir al hospital para que todo esté listo para mañana con la otra pediatra que falta para el embarazo múltiple ─ Pronunció y me guió hasta su cuerpo abrazándome y con un rápido movimiento, sin darme cuenta a tiempo posó sus labios sobre los míos en un rápido y fugaz beso. Quedé perpleja, todos tenían sus ojos puestos sobre nosotros. Maximiliano, no le prestó mucha atención a la situación y salió de la casa. ─ ¿Qué le sucedía, se había vuelto loco? ─ Me pregunté.Valerie fue la primera en reac
Ivanna Kridmman. Los días transcurrieron igual. Yo, comencé mi trabajo en el hospital y la niña seguía presentándome el desfile de caballeros para la búsqueda de mi nuevo novio. Maximiliano, se estaba estresando con la situación de la búsqueda de un novio, hasta que uno de ellos dijo que encantado se casaría conmigo y me llevaría a vivir en su casa de New York. Eso fue un shock impactante para Ashley, quien lo miró mal y lo descartó a una velocidad bárbara. Se giró hacia Maximiliano y hacia mí y nos dijo que no me iba a buscar más novios ya que todos me querían llevar del Condado de Norfolk. Ese hecho y la decisión de la niña de su abandono en la búsqueda de un novio para mí fue un gran alivio.Mi padre estaba siguiendo el tratamiento preoperatorio ya que la fecha de la cirugía se acercaba. Ashley, seguía con su sicoterapia y en los exámenes solicitados por el neurólogo lo más denotable era que no presentaba secuelas de sus convulsiones; así que todavía nos preguntábamos que era
Ivanna Kridmman.Mi mirada se posa en las líneas que reconozco es la letra de mi hermana Gianna, no puedo evitar tomar una fuerte respiración para iniciar la lectura y escucho a Maximiliano, hacer lo mismo.Hoy es lunes de escuela. Ivanna, como siempre iba toda desaliñada. Ni siquiera le gustaba maquillarse y yo, odiaba que siempre estuviese así. Quería que se preocupara un poquito más por su apariencia y la moda. Pero su ropa era siempre un poco holgada y por igual, en la escuela los chicos babeaban por ella. Decían que era dulce y sincera, aunque su inteligencia no les gustaba mucho. Adrián, todos los días se la comía con la mirada. Thyler, siempre trataba de llamar su atención. Noah, siempre muy atento y suspirando por ella. Pero Maximiliano, él era el peor; la amaba tanto como ella a él y lo peor de todo era que yo, también amaba a Maximiliano. A pesar de todo lo que yo hacía con mi apariencia él, a quien amaba era a mi hermana. Mi ropa y maquillaje siempre estaban a la
Jordan McCarthyEn serio tengo que buscar ésta mujer a las once de la mañana en el aeropuerto cuando yo tengo tanto trabajo. ¡Dios! para que dije que sí, esto va ser la locura.Malditos vuelos, de paso se retrasan; una hora más y todavía la modelo no llegaba. Revisé que los datos que me había aportado Valerie, fuesen los correctos. Es la primera vez que me dejaba llevar por la osadía de una niña. Mentira esto siempre me sucedía con Lissie, cuando deseaba cumplir un deseo de algunos de sus pacientes en el área de cáncer infantil.Suspiré al poder visualizar a la modelo.─ !Ah! si estás aquí, pensé que no vendrías ─ mencionó observándome de pies a cabeza.─ Hola, prometí ser tú anfitrión ─ pronuncié acercándome a ella sonriendo y le di un beso en su mejilla, saludándola y tratando de bajar la tensión. ─ El vuelo se retrasó un poco por mal tiempo y llego tarde a la primera sesión de esta semana, así que el estudio debe ser una locura. ─ Sonrió caminando y pasándome por un lado para
Jordan McCarthy Estaba desesperado por llegar al condado y deseaba darle una sorpresa a Ivanna, la extrañaba demasiado y cuando llegué a la casa de sus padres; allí estaba ella con una sonrisa sorprendida recibiéndome entre sus brazos, solo deseaba besarla, abrazarla y hundirme en ella. ─ Te he extrañado mucho, cielo ─ musité apoderándome de sus labios, le informé que le había comprado algunos conjuntos de ropa interior de ese famoso desfile; por supuesto, que ropa interior que estaba dispuesto a vérsela sobre su cuerpo en ese fin de semana. Le informé a mi novia que había dispuesto del apartamento olvidando solicitar su opinión, sólo yo soy un bocón y juro que no estaba preparado para la noticia que recibí en ese viaje, el mundo se me vino encima. Después de ser hijo único, con una madre fallecida y adoptado por un buen hombre al cual consideraba más mi padre que a mi propio progenitor, recibo la noticia que mi madre no ha fallecido, que me hicieron pasar por muerto y hasta un
Jordan McCarthy─ ¿Abuela te has vuelto loca? ─ mascullé enfurecido observándola y rodeándola con mis brazos para tranquilizarla, a pesar de su edad era una mujer corpulenta y fuerte que había aguantado por años hasta la violencia de mi padre, defendiéndome a capa y espada y luego defendiéndolo a él, ante las autoridades y hoy me estaba dando cuenta que esta vez no sería la excepción, para la defensa de mi padre.─ Ella, debe ser la culpable de que tú padre, esté en este lugar en este momento ─ mencionó con rabia tratando de soltarse de mis brazos.─ No es así, abuela. Él, ni siquiera sabe que ellos están aquí ─ Pronuncié y mi abuela me observó. ─ Fuimos a buscarlo para exigirle una explicación y cuando llegamos a su oficina él, estaba inconsciente y sin embargo, gracias a ellos mi padre en este momento está vivo ─ expresé con rabia.─ Ella, fue la que te abandonó cuando se fue con ese hombre, dejando a mí pobre hijo hundirse en su dolor y en el alcohol ─ dilapidó sin contemplac
Jordan McCarthy.Entre besos nos despojamos de nuestras ropas, sonreí al verle uno de los conjuntos de lencería que le había comprado y que encajaban perfectos en su cuerpo. Sentí mi erección al dolor solo con esa imagen, pero el deleite de desprenderla con fuerza de su cuerpo no me lo perdería. ─ Jordan, cielo. No traje más ropa interior ─ susurró observándome cuando los encajes de su panty quedaron en dos porciones de tela en mis manos.─ ¡Ummm! Entonces por todo el camino de regreso podré irte tocando ─ sonreí lanzando al suelo alfombrado los dos pedazos de tela rasgados. ─ ¿A riesgos de accidentes de tránsito? ─ Musitó buscando mis labios los cuales correspondí con desesperación apoderándome de su lengua, mientras comenzábamos un baile frenético con ella. La mano de Ivanna, se fue a mi miembro eréctil, para masajearlo en un suave vaivén; mientras mis dedos se apoderaban de su clítoris. ─ ¡Ahsssss! ─ Ese sonido tan enloquecedor que emitían sus labios.─ Te quiero, Ivanna.