Alejandro se disculpa por el bochornoso espectáculo, y recibe una amonestación de parte de Alfonso, y Diego…mientras que Aurora ahora requería de nodrizas para cuidar de sus bebés, pues ella sola no puede con tres bebés…mientras que Cecilia ahora está a su lado contemplando a sus bebés que duermen dulcemente…-Felicidades Aurora-Gracias Cecilia – dando una sonrisa – no pensé que fuera a tener tres niños – mirando a sus bebés dormir – ¿Cómo podré alimentarlos?-Creo que necesitarás de nodrizas – sonriendo – son tres niños, y no creo que quieras debilitarte-Claro que no, no quiero dejar solo a mi esposo – sonriendo – creo que tendré que pasar mi cuarentena acá en el palacio, mi padre no dejará que me mueva-Puedes quedarte en mi habitación-No, no podría, esta habitación es de uso de la reina – sonrojándose-Está bien, pero designaré una de las mejores habitaciones para ti-Gracias – escuchando un sollozo y se gira a ver a una de sus niñas mirándola fijamente – pequeña, tu y tu herman
Esa tarde Sofía se dirige al palacio real, para pedir una audiencia con la reina consorte, Cecilia como reina podría negarse a ver a esa mujer, pero simplemente acepta verla, y Sofía es conducida a la sala de té de la reina en donde al ingresar ve a Cecilia sentada en un diván mientras arrulla a su niña, Sofía también lleva a su hijo, pues quiere que la reina consorte le dé su bendición al pequeño de cuatro meses.-Doña Cecilia, Doña Sofía de Baleztena – la joven entra y hace una reverencia a Cecilia-Doña Cecilia…-Lo que tengas que decir, dilo y vete – Sofía se queda pasmadaSofía entra y toma asiento, Clara se acerca y sirve las dos tazas de té y Lorena toma en brazos a Cristina quien apenas se mueve un poco para continuar dormida-Pido a su majestad le conceda una bendición a mi hijo…Cecilia apenas mira al bebé en brazos de su madre y empieza a reír, cosa que consterna a Sofía pero hace que sus dos damas se asusten, porque esa risa no es para nada amable.-Lo siento – secando las
Los días fueron pasando, Alfonso hace la invitación real a todas las familias nobles y de la corte real para que presenten a sus hijos menores de dos años, para que Cecilia como reina consorte, les conceda su bendición.Carlos y Sofía se preparan para ir a la ceremonia, se visten de forma apropiada, y visten al pequeño Mateo para la ocasión, Carlos cree que por haber tanta gente en dicha ceremonia, Cecilia no le hará el desaire al bebé como en días anteriores, pero oh, Carlos no tienes ni idea de que tu hija no quiere saber nada de ti…El matrimonio Baleztena llega al palacio, los guardias le permiten el paso y ellos ingresan a la sala del trono en donde al llegar ven a la familia del Duque del Infantado recibiendo la bendición real de parte de Cecilia, pues el Duque tuvo trillizos, un niño y dos niñas…Cuando Cecilia finaliza, una joven madre junto con su esposo se acercan y luego de hacer una reverencia entregan a su bebé, una pequeña y dulce niña quien recibe un besito en la frente
Cuando Alfonso se dirige a ver a su esposa, la encuentra dormida, y a su lado a su pequeña niña, así que se acerca y toma a la bebé en brazos, y la deja en su cuna, para luego acostarse en la cama y abrazar a Cecilia, quien abre sus ojos y se encuentra con los ojos de Alfonso, mirándola con deseo.-¿Eh? ¿Qué pasa? ¿ya es hora?-No…aún quedan unas horas de oscuridad – apretando su abrazo a Cecilia-Alfonso…-Mariana me dijo que podría llegar a volver a amar – Cecilia se sonroja de golpe- ¿Eh?Tomando el rostro de Cecilia entre su mano – ¿y qué crees, mi reina? Volví a enamorarme – besando a una sorprendida CeciliaCecilia corresponde aquel beso, que va creciendo en intensidad, Alfonso baja el camisón de la joven para dejar descubiertos sus hombros, y así se acerca y posa sus labios en aquella piel, haciendo que Cecilia se estremezca debajo de él, Cecilia trata de procesar toda esa información que es nueva para ella, porque aunque no sea virgen ella no sabe nada acerca de la intimidad
-Javier…-Jimena, basta…- ¡¿Crees que esto me gusta?! ¡mi esposo, mi esposo, quiso violar a esa infeliz!- ¡Porque por lo menos su majestad es hermosa! – Jimena queda en shock – ¡ella si es mujer, en cambio tú! ¡que no se te olvide que si eres mi esposa es por ese arreglo de mis padres con tu madre! ¡porque yo ya tenía a mi amada!Jimena queda en shock, y una lágrima cae de sus ojos, pues claro que recuerda a la joven mestiza de la cual Javier estaba enamorado, pero por eso mismo era repudiada por la familia Escalante.-¡Tu deber fue darme un hijo, y cumpliste! ¡mejor coge tus cosas y lárgate de mi casa y de mi vida!-Señor Vizconde por favor quédese quieto, la herida es grave es una fortuna que no cortara la vena…-Javier, no estás hablando enserio- ¡Claro que estoy hablando enserio! ¡Lucía era el amor de mi vida, yo quería hacerla mi esposa, pero mis padres y tu madre arruinaron todo!Jimena apenas baja la cabeza y empieza a llorar, cosa que fastidia aún más a Javier – ¡mejor lárg
-Carlos…-Sofía…mientras Cecilia no me perdone nuestra familia estará en el desprestigio- ¡No es justo! ¡somos los condes de Baleztena…!-Mientras Cecilia…- ¡Entonces hablaré con ella! ¡soy su madrastra me debe respeto!-Sofía…entiende, Cecilia no te considera su madrastra- ¡Pero, soy su madrastra!-Lo sé, pero ella no te considera nada suyo, entiende, ella es la reina…con una orden de ella dejaremos de ser noblesSofía apenas suspira resignada.-Carlos, pero si seguimos así…-Confiemos en que Cecilia, me perdoneSe escucha un llanto y Sofía se dirige a ver a su hijo, lo toma en brazos y empieza a llorar, porque se ha dado cuenta de que si su familia está a un paso del desprestigio es por su culpa, no por culpa de Carlos, sino porque ella fue la que destruyó la posibilidad de que los Baleztena estuvieran en lo más alto de la sociedad de España…-Mateo, ¿Qué vamos a hacer? Si Cecilia no te da la bendición caeremos en el desprestigio – el bebé apenas succiona su manito……La pareja s
Las semanas fueron pasando, Alfonso no solo llevó a Cecilia a las costas de Asturias, sino también a recorrer toda España, para que su pueblo se familiarizara con la nueva reina del imperio, todo estaba bien en el matrimonio real, de día la pareja perfecta al ojo público y en las noches ambos se dejaban llevar por la pasión que quemaba sus cuerpos……Cuando Cristina tuviera poco más de tres meses, Alfonso y Cecilia empiezan a planear el bautismo de la pequeña, para que así la bebé fuera consagrada al primer y más importante sacramento de todos…Cuando se desata una epidemia de viruela…-Esto no es bueno – diciendo el médico – esta es la quinta familia en morir…Los médicos se desesperan ha sido el brote de viruela más grave que han visto en sus años ejerciendo la medicina, los medicamentos no funcionan y la ciudad se está llenando de cadáveres que se pudren en las calles y casas.-¿Qué haremos?-Envía ahora mismo a los mensajeros, que avisen a todo el imperio, envía un halcón a Madrid
Durante todo el trayecto hasta Galicia, Cecilia no deja de pensar en su esposo, mientras que los Escalante se mueven a su palacio personal para tratar de estar seguros de la viruela, pero lo que no saben es que su peor peste viaja con ellos…Alfonso se ha quedado en Madrid, para vigilar a sus habitantes y asegurarse de que la viruela no mate a muchos, él no es tonto, sabe que la enfermedad ha llegado a la capital, pero no puede dejar que cunda el pánico, pero también sabe que debe cuidarse, por Cecilia, por Cristina, por el imperio…Cecilia llega a Galicia, y es instalada en el palacio, guardias se apostan en cada rincón del palacio, y todos se preparan para el encierro.-Cristina – mirando a su bebé – confiemos en que tu padre estará seguro-Majestad…- ¿Qué pasa Felipe?- ¿Desea que hagamos algo por usted? – Cecilia da una sonrisa-Solo cuídense…dentro de unos días Alfonso enviará las vacunas, y estaremos seguros-Nos preocupa su salud Doña Cecilia – diciendo Santiago-Estaré, bien d