La gélida brisa de la noche golpea su rostro, ondeando su larga cabellera, en su pecho no ha dejado de invadirla esa sensación de ahogo en la que cae una y otra vez, llevándola al mismo lugar en el que hace años se alejó escuchando el llanto de su hija, el cual, poco a poco se iba perdiendo haciendo un eco.
Sus recuerdos son algo peligroso, en especial porque siempre ha anhelado en ir a buscar lo que es suyo y solo suyo, lo que le pertenece, por lo que tuvo que desprenderse sintiendo que el mundo se le caía en pedazos encima.
La obligaron, en ese entonces era ingenua e inmadura, se dejaba manipular muy rápido, pero ahora ya no, ahora se había convertido en la mujer que tanto temían sus enemigos, la mujer que estaba dispuesta a asesinar y a limpiar el camino de su pequeña, porque sí, viene por ella, y va a destruir la organización que tanto le hizo daño en el pasado.
—¿Estás segura de lo que vas a hacer?
La voz masculina a sus espaldas
CHASTITY El dolor en mi muñeca es demasiado, Edmon prácticamente me lleva a rastras hasta una enorme habitación que jamás en mi vida he visto, al menos no en lo que tengo de tiempo aquí dentro de la Bratva. —Suéltame —demando una vez estando solos. Edmon me libera de su agarre posesivo y finge no hacerme caso, pone el cerrojo, tomo mi distancia entre los dos. —¿Aquí es donde sueles follar a tus putas? —inquiero admirando cada detalle que grita elegancia e impone poder. —No seas insolente, cría de mierda —comienza a quitarse la ropa. —¿Qué crees que haces? —me cruzo de brazos. —Voy a partirte el culo, tengo que reclamar el premio —dice sin apartar la mirada de mí. —¿Te va bien la sangre humana? —me s
Peligro, condena y muerte, son el castigo que imponen los Lebedev.Subestimar al borrego es lo peor que puede hacer el león, Edmon lo sabe, ahora que Chastity es la Koroleva, ha demostrado que es mujer que nació para doblegar a los grandes, en tan poco tiempo se ha convertido en un peligro para la Bratva. Luego del juego de mentiras y traiciones de los Lebedev, ella está decidida a hacerles pagar por el daño, teniendo como aliado a Lukyan Orlov.Sin saber que un nuevo líder ha resurgido de las sombras, Killian Stolkov, el nuevo capo de la mafia italiana, quien no tarda en prenderse de su belleza a tal punto de la obsesión, teniendo algo en común; el odio impenetrable hacia el UnderBoss, ¿El problema? Que tras el aviso de la nueva contienda, Edmon la considerará un veneno letal para el mundo de la mafia, adentrándola en una guerra donde estará en medio de dos grandes leyendas de la mafia.
CHASTITYDicen que subestimar al borrego es un error, bueno, los Lebedev lo hicieron, el Boss me ha ocultado cosas, la loca mayor solo me pone a prueba, Edmon, ese hijo de puta y Viera me toman el pelo, mi padre está muerto y Lukyan me contó hace una semana que hay probabilidades de que mi madre no esté muerta. Todos juegan, y ahora haré lo mismo, en una semana es la maldita boda. Estoy preparada, soy letal como hermosa, me repito esas palabras mientras monto una gruesa verga rusa.—Joder —Lukyan tensa el cuerpo.Nuestros cuerpos están sudorosos, llevamos más de dos horas follando, nadie lo sabe, ni siquiera Edmon y sus Voyevikis, Lukyan es de peso en la Bratva, no solo compartimos el mismo gusto por la medicina, es poderoso, cruel, despiadado, únicamente cambia el que sea más accesible, le gusto, me gusta,
CHASTITY Termino de ponerme los pendientes, el que la Bratva siga considerándome como alguien incompetente, solo enerva mi sangre, no lo soy y eso es algo que deben aprender de una puta vez. Respiro hondo mientras veo a la mujer que está de pie frente al espejo, una que no solo ha perdido a su padre y ha sobrevivido a la mafia más sanguinaria, sino, una que va a ser letal para la propia organización. Conmigo no se debe jugar.—Debo admitir que ese vestido te sienta bien el culo —dice a mis espaldas Ivanna Lebedev.A veces el lenguaje que emplea me parece de lo más bajo en clase para ser la esposa del Boss, sin embargo, es la mujer a la que le deposito media confianza. Frunzo el ceño, el vestido que traigo resulta ser discreto y elegante, no muy provocativo a lo que era la idea principal de la loca mayor. Su sugerencia fue hostil al quere
CHASTITY—Edmon Lebedev —dice Killian sin apartarse de mí.Eso está bien por mi, de hecho, espero que lo corra, sin embargo, la cercanía del capo me hace sentir… segura. Por lo que no me bajo del papel de perra que estoy empleando, por el contrario, cruzo mi pierna haciendo que la apertura de la tela, muestre toda su desnudez a esplendor, los ojos del UnderBoss recorren mi piel y tensa el cuerpo.—Killian Stolkov —espeta con dureza.—Una reunión —el capo gira hacia mí—. Interesante ¿no lo crees?El ambiente es pesado, no hace falta ver a Edmon para saborear su aura hostil, oscura.—Por supuesto, veo que lo estás pasando bien al lado de mi prometida —dice el hijo de puta con voz grave.
EDMON Las cartas caen, los jugadores hacen su primer movimiento y yo solo no puedo apartar la mirada de Chastity, esa maldita cría de mierda que mueve el culo sobre la pierna del Capo, cada que se inclina para colocar la carta elegida por él, el Boss intenta hacer contacto conmigo, no lo permito, sé que si lo hago me joderá la noche y quiero hacerle entender a ella, quién es su dueño.—Ficha verde —habla una de las sumisas que está para cerciorarse que no haya trampas.Ingenua, los mafiosos es lo que usamos. Comienza una nueva partida, las cartas se reparten, observo las mías con mal gesto, Viera no ha dejado de restregarse en mi cuerpo como lo que es, una puta. Hacemos la tirada, el capo hace un movimiento veloz y estoy seguro que lo ha hecho a propósito. Su mano
CHASTITY No me puedo sentir más humillada, mientras me encuentro en el auto del Capo de la mafia italiana, ya voy pensando en cómo hacerle pagar esto a Edmon Lebedev. Hacer que lo follara frente a Killian Stolkov no se lo paso, por ahora mi único objetivo es sacarle información sobre su madre, que de sus contiendas no me interesa nada.—Parece que estás pensando en cómo asesinar a alguien.La voz gruesa de Killian hace que salga de mi ensimismamiento, levanto la mirada y lo encuentro recorriendo mis piernas, una de ellas desnuda por el corte abierto del vestido.«No importa lo que tenga que hacer» me repito.—No es tu asunto.Ríe.
CHASTITYEl ambiente es hostil, nadie dice nada, tampoco es que me importe mucho, soy la Koroleva de la Bratva y aunque sea un puesto de papel, por pura apariencia, sé jugar mis cartas, Edmon ha arruinado mis planes por el momento, no hago preguntas estúpidas, conozco las leyes de la mafia, en estos meses me las he aprendido de memoria, y una de ellas es que la mafia italiana sabe pagar favores, evitar una contienda hace que mi instinto de supervivencia se ponga en alerta.—UnderBoss —habla el capo rompiendo el silenció—. Interesante, llegaste antes de lo esperado.Edmon tensa el cuerpo, no aparta la mirada de lo que le interesa, y eso es joderme la existencia. Doy un paso adelante.—Me debes una —susurro solo para los dos.