Desobedeciendo a su compañero, a ver si no se mete en problemas ahora.
Saya empieza a correr sin rumbo fijo hacia un camino opuesto por donde había visto entrar a aquellas lobas. Selene mira el paisaje a través de Saya y sus ojos, igual que cuando llegó aquí, se abren maravillados. Este lugar es precioso, incomparable con nada que haya visto antes en la Amazonía o en Tierra de Pinares. Los efectos de luces y sombras que el sol y los árboles crean al paso es un espectáculo digno de recordar por siempre, ellas incluso parecen hacerse una sola con la naturaleza, ya que Saya es capaz de percibir hasta el revolotear de las mariposas y el movimiento de algunos de los insectos más pequeños. La briza es fresca y le ofrece esa sensación de paz y libertad que tanto ansiaba, pero a medida que avanzan, las secuoyas se vuelven aún más grandes y su sentido de orientación va desapareciendo poco a poco. A Saya no le preocupa mucho esta situación, siempre fue una excelente rastreadora y Uriel le ha enseñado mucho acerca de las posiciones de los cuerpos celestes, aunque
Connor pasó todo el día en esa dichosa reunión con el consejo, aunque en todo momento pensó en Selene y en esa discusión que tuvieron antes de irse, imaginó que todo estaría bien, hasta que llegó a la mansión y se encontró con este desastre. Está claro que nadie le avisó porque es prohibido molestarlo cuando está en esas reuniones, incluso apagó su teléfono para que nadie pudiera interrumpirlo. A pesar de eso, todos en la manada tienen la orden de mantener a Selene alejada de la frontera, todos saben los motivos, ¿por qué nadie la detuvo? ¿Por qué no había custodios en esa área que le impidan el paso? ¿Por qué ella tomó ese camino exactamente y no el otro que es de la zona segura? Son muchas preguntas que rondan su mente a medida que se adentra al bosque rojo, como lo llaman. Este es un territorio tomado por Augusto, el hermano bastardo de su padre, el hombre causante de la mayor masacre de su manada hace 15 años. Desde entonces, él y Augusto llevan una lucha interminable, que ambos
El camino de vuelta a la mansión no dura tanto para Connor como fue la venida; sin embargo, para Selene resultan los minutos más incómodos de su vida. Su dolor de cabeza ha aumentado por la posición y su estómago está revuelto. No lucha en ningún momento, no dice nada, tampoco pregunta, ya que ni siquiera es totalmente consciente de lo que ha sucedido, aunque escucha gruñir a su compañero un par de veces durante el camino.El alfa entra con ella a cuestas en la casa y la mirada reprobadora de su madre lo recibe.«Te dije que ella intentaría huir, que aprovecharía el momento que estamos afuera para hacerlo y no me creíste. Pudo habernos metido en serios problemas, alguien pudo morir por su causa» gruñe Carla por el enlace mental con el rostro contraído. Connor no responde nada, pero por su mirada, es evidente que lo dicho por su madre lo afecta más profundamente. —Hermano… —Clarisse intenta decir algo mientras va detrás de él, pero Carla jala del brazo para que se detenga.Jackson, A
Connor siente cómo ella se dobla de dolor mientras las lágrimas llenan sus ojos. Selene dejó de luchar físicamente contra él desde hace unos minutos y centra su poca fuerza mental y voluntad en repeler la conexión que él le está imponiendo. Ella no quiere perder lo único que le queda de Dexter, al menos no de esta manera, sabía que alguna vez debía pasar, pero aún no está preparada para esto. Connor no tiene ni idea del daño que le está haciendo.Los ojos de ella están cerrados y el dolor recorre su hombro y comienza a propagarse por el resto de su cuerpo. Saya está inquieta y aullando en su mente, sin saber qué hacer, porque no quiere luchar contra la sangre de su compañero, pero tampoco cree que esta sea la manera.Los últimos recuerdos de Dexter pasan frente a los ojos de Selene, quemándole la mirada, rompiendo su corazón en pedazos. El dolor y el aura que Connor está utilizando en su contra son demasiado para ella. Puede ver en su mente la hermosa sonrisa de su excompañero cuando
—Lo hice por su bien. Sabes perfectamente de lo que es capaz Augusto, Selene tuvo la maldita suerte que esta vez no pasó a mayores, pero conociendo a ese rogue, sé que tiene planeado algo más —Connor responde, aún está enfadado. —Dejando de lado las intenciones de Augusto, Connor, ¿crees que Selene va a despertar mañana y sonreírte? ¿Crees que simplemente te va a perdonar por forzarla a llevar tu marca?—No era como lo había planeado, pero después de que me desobedeció, no tenía de otra. ¿Cómo esperaba ella que yo reaccionara ante lo que hizo? Se puso en peligro, puso en peligro a la manada, no podía dejar pasar esto sin hacer algo al respecto. —Bueno, lo ideal hubiese sido sentarte a hablar con ella sobre el ataque, sobre Augusto, sobre las reglas del consejo y sobre el acuerdo que tu padre dejó —dice Jackson, haciendo que Connor se tense—. Yo no veo a Selene como una persona irracional, al contrario. Además, conocemos a sus padres, ambos son personas excepcionales, estoy seguro de
El teléfono de Connor suena de manera estrepitosa dentro del bolsillo de su pantalón, haciendo que él frunza el ceño al sacarlo de sus pensamientos. Voltea y mira hacia Selene quien sigue en la misma posición desde la mañana, ahora ya es de tarde y no la ha dejado ni un segundo desde entonces. Postergó todas sus actividades y pidió ayuda a Jackson para encargarse de las situaciones más urgentes de la manada para él permanecer con ella. La doctora volvió, debido a que el alfa le pidió que tomara la muestra de sangre de Selene para hacerle todas las pruebas necesarias. Ella debe volver dentro de un rato para dar los reportes.Connor se levanta con cuidado de la cama luego de dejar un beso en la frente de su compañera y camina hasta el balcón para tomar la llamada. No tiene idea de quién sea, pero ya ha llamado un par de veces, por lo que supone que debe ser importante y es probable que insista si no contesta ahora.—¿Blazeheart? —escucha una voz profunda desde el otro lado, apenas toma
La mejoría en Selene es inmediata con la toma del antídoto. Las manchas oscuras de sus manos y su espalda, van desapareciendo lentamente. Uriel ha vuelto a llamar un par de veces preguntando por su nieta y se ha tranquilizado al ver su mejoría. El alfa Connor aprovecha el silencio de la noche y su falta de sueño y pide a Jackson que revise el correo que Katrina le había enviado la otra vez, ya que él no quiere dejar sola a su compañera. Jackson, en compañía de Alexia, abre el correo que la madre de Selene había enviado al correo de Connor el día que él la reclamó, llevándose la sorpresa que hay muchos archivos adjuntos, no solo los documentos médicos que el alfa mencionó, sino también varios videos y fotos que tienen que ver con ella desde que es pequeña. —¿Será por eso que…? —Alexia pregunta, pero las palabras quedan atascadas en su garganta al ver un video en específico, que a ambos los deja muy pensativos. —Lo más seguro es que sí —contesta Jackson, todavía ensimismado, con la
Connor está terriblemente tranquilo, según Selene puede percibir. Puede sentirlo observándola atentamente, esperando una respuesta que quizás ella no quiere dar en estos momentos. —¿Ahora qué más da? No te importó lo que sentía antes, ¿en qué cambiará las cosas que te cuente ahora?—Me vi obligado a actuar como lo hice debido a que te pusiste en peligro —Connor trata de razonar con ella, lleva la voz calmada.Ella es consciente de lo que hizo y sabía que eso traería consecuencias cuando decidió salir, pero no pensó que él actuaría de la forma que actuó.—Y por supuesto me importas, casi me volví loco cuando me dijeron que no sabían dónde estabas. No podía contactarte, nadie podía hacerlo —Connor explica sus razones.—No me puse en peligro adrede, estaba a punto de volver, solamente me quedé unos minutos a mirar el agua —ella solloza. Connor se queda allí mirándola por un momento y luego asiente ligeramente antes de sentarse en el sillón al lado de la cama para quedar frente a ella.