Luego de asegurarle a Anthea que estaría a su lado, la mandé a casa a descansar, pues la transición es dolorosa la primera vez y te deja agotado por el esfuerzo físico que realmente implica. Llamé a Nina y le dije que estaba en camino, que cuando llegara le explicaría todo por el tema de mi retraso y cuando entré en la casa, no se despegó de mí hasta que cumplí. No era nada grave, sin embargo, el que ella haya confiado en mí para algo como esto, que haya acudido a mí, que se pusiera en mis manos al aceptar que soy su Luna, me llenó de un orgullo y una emoción que hacía mucho que no sentía.El almuerzo pasó tranquilo y lleno de ánimos para mí, porque sabían lo que había estado pasando conmigo y las lobas en mi contra, y para el momento de irme, Nina y Johan tuvieron que traerme a la casa, pues me enviaron con demasiadas bandejas y bouls llenos de comida para Líam, Tayler y para mí. Ellos se fueron y me quedé sola ordenando, hasta que unos gruesos brazos me rodean la cintura y una cal
Un fuerte grito escapa de la joven y ese es el escopetazo de salida de la transición, su cuerpo empieza a ponerse rojizo mientras el peso del dolor la hace caer al suelo y su madre corre hacia ella, aunque a una distancia prudencial, pues en la agonía que causa el primer cambio, podría hacer que la lastime sin querer. Verla cómo se retuerce, cómo grita y su cuerpo cambia poco a poco, estirándosele el cráneo, el encorvado de su espalda hasta que es obligada a quedar sí o sí a cuatro patas, incluso la túnica ha volado de su persona y puedo notar el reacomodo de los huesos de sus piernas, convirtiéndolas en patas entre dolorosos y ruidosos chasquidos, me hace volver a la mía y me complica el no estremecerme. Si bien, una vez que pasa el primero, ya no vuelve a ser doloroso, la primera vez que te conviertes en tu forma de lobo, muchos dicen que se siente peor que un parto. A pesar de que han pasado cerca de ocho años desde aquella fatídica noche, las sensaciones de dolor, la deformació
Mi mirada pasa por los grupos de guerreros luchando entre sí en el campo de entrenamiento. Los distintos instructores, guerreros con experiencia y "generales" de la manada, supervisan más a fondo, dando vueltas como yo por el lugar y marcando errores en técnicas, llaves y otras cosas para ayudarlos a mejorar. Algunos no estaban de acuerdo con mi designio de que, las mujeres más fuertes y/o rápidas, también tuvieran la oportunidad de entrenar si así lo deseaban, mas no podían oponerse: soy la Luna, mi palabra es ley, y les dejé muy claro que, con mi llegada, habría cambios como éste. La manada se daba de "moderna", pero seguían teniendo algunos pensamientos retrógradas y me encargaría personalmente de que estos fueran siendo destruidos completamente. Todavía me acuerdo de la reunión que tuvimos con ellos antes de que todo esto iniciara: falta cerca de una semana para que el plazo de la amenaza de Alefrick se cumpla, por lo que decidimos informar finalmente de lo que esperábamos, porq
-Alfa...Un tanto sorprendido, el lobo, junto con todos los demás presentes, se inclinan en señal de respeto con el puño sobre el pecho, no solo por mi compañero, sino por sus padres, y Therrent vuelve a alzarse rápidamente con curiosidad sobre las palabras de Tayler.-Tráiganla. El resto, vuelva al entrenamiento, el espectáculo terminó.Dos guerreros oficiales se acercan a Yhoseline para agarrarla, sin embargo, su padre se interpone.-Alfa, por favor, me encargaré de mi hija personalmente. -¿Crées que es buena idea? No quiero que se forme un conflicto por el hecho de lo sentimientos.-No, puedo separar ambas cosas, señor. -Está bien, ayúdenlo. Todos asienten y Tayer me ofrece su mano, la cual tomo bajo la atenta mirada de sus padres y los demás lobos y nos dirigimos hacia la casa de la manada, en silencio, excepto por el constante quejido de la rubia de que no podíamos estar haciéndole eso, sobre todo su propio padre. En cuanto llegamos, nos dirigimos hacia la oficina y Liam cier
¿Y ahora qué? ¿Qué se supone que haga o diga? La verdad estoy bastante nerviosa y perdida, no estoy segura de qué debería hacer ahora, ¿presentarme? Sé que ellos ya saben quién soy, no es como que Tayler no lo haya dejado perfectamente claro en la charla de recién. "Compañera", "Luna", digamos que no fue muy sutil... Y entonces el pelinegro me saca de mi duda hablando primero.-Bueno, ahora que eso se solucionó, me gustaría hacer la presentación formal. Mamá, papá, ella es Angelique Rosh, mi compañera y Luna. Angi, ellos son Morgan y Lisbeth, mis padres. -Es un placer conocerlos. Ambos se mantienen serios y en silencio por un momento mientras observan la mano que les extiendo y me pongo nerviosa ante su silencio. Estoy por pensar que algo ha hecho que nos les agrade o similar, cuando de un momento al otro, la mujer empuja mi mano fuera de su camino y tira de mí para abrazarme contra ella con fuerza. Ok... Esto no lo esperaba. -Por la Diosa, estoy tan feliz de que puedan estar junt
Su sonrisa es suficiente respuesta a mi pregunta: por supuesto que eso es lo que quiere. Maldición, es una locura, pero no puedo negarme, ¿o sí? Por suerte, Tayler sale a mi rescate. -Papá, acabamos de estar entrenando con los guerreros, ¿no te parece que ya fue mucho por hoy?-Por favor hijo, eso no fue nada y tú lo sabes. Ninguno ha sudado siquiera una gota y podríamos seguir por horas... Aunque ellos no. -Con todo respeto, me preocupa más lo que la manada pueda pensar de que su anterior Alfa y su actual Luna se enfrenten. ¿Qué pasará si uno da un golpe más fuerte de lo esperado y causa una herida "grave"? No quiero que piense que no quiero darle gusto, sería un honor, no obstante, no sé si sea buena idea que sea delante de todos. Además, quiero mantener mi secreto por ahora, por lo que sería solo mano a mano.-Y estoy bien con eso, quiero ver con mis propios ojos de lo que eres capaz, y si prefieres que sea en privado, por mí también está bien, entiendo tu preocupación. -¿Le par
Con mi cabello y cabeza colgando, me doy cuenta de que ahora parezco un mono y noto que tanto Lisbeth como Tayler se han estado riendo por la situación que, francamente, es más allá de bizarra. No los culpo...Alzo mi cabeza y me topo con la mirada calculadora de mi suegro sobre mi persona, como si estuviera pensando en qué hacer. -Eres bastante ligera, muy delgada aunque fibrosa, ¿cuánto pesas? ¿Setenta y cinco kilos? -Ochenta, el músculo pesa mucho más que la grasa. -Eso es cierto y no veo grasa en ti. -Esto es bastante ridículo, ¿no? ¿O solo me parece a mí?-Estaba evaluando tu técnica: tienes buen agarre y tu fuerza es considerable, aunque imagino que no estás usándola toda. Por la forma en la que siento tus talones firmemente clavados en mi costado, y el aumento en cuanto te levanté, sé que te estás conteniendo bastante. Para mí, eres liviana, por eso pude ponerme en pie aún así, sumado a que no estás usando toda tu fuerza. Sospecho que podrías romperme las costillas si utili
El silencio se hace en la sala y el padre mira a ambas mujeres fijamente un par de segundos, para luego volverse hacia nosotros. -Ha costado, no lo negaré, sin embargo, han aceptado vivir bajo las reglas de la manada y cesar en todo lo que han estado haciendo. -¿Estás seguro? -Sí Alfa. -No quiero dudar de tus palabras, pero basándome en los hechos, me cuesta creerlo. ¿Cómo podemos estar seguros de que cumplirán? Therrent se mantiene en silencio por un momento y suspira finalmente con cansancio, como si la respuesta le doliera... Y lo que dice sí, debe haberle dolido el tener que hacerlo. -Porque si no lo hacen, yo moriré. -¿Cómo? -Así es, Alfa. Ellas estaban como locas, la situación era como locas y les dije que o aceptaban o nos íbamos. Empezaron con que no era posible que hubiera aceptado algo así, que era una locura, que tenían derecho a hacer lo que quisieran, a dar su opinión y me cansé de las faltas de respeto reiteradas de su parte, así que les pregunté si querían que