—No te preocupes por Yen, ahora mismo salgo a buscarla. No dejes de avisarme de lo que suceda en el hospital.
No puedo creer las vueltas que da la vida, apenas ayer estábamos felices porque las cosas parecían haberse acomodado a favor de todos nosotros, y hoy el padre de Yen se encontraba internado por culpa de unos empleados y del estúpido de Osvaldo que no termina de quedarle claro que Yen ya no es su esposa y que no podrá recuperarla.
Llame a mi abuelo que por fortuna se encontraba todavía hospedado en la casa de los Sandoval, cuidando de los mellizos, por no decir que se encontraba malcriándolos a su antojo y con el consentimiento de la madre y de los abuelos. Le explique brevemente la situación y quedo de avisar a todas las personas que trabajan en la casa para que no le pasaran ninguna llamada a Yen en lo que llego a la casa por ella.
Él se encargaría de entretenerla para que no se enterara de la situación por otras personas y que pueda afectar su salud
—Me puedes explicar que fue lo que paso Dominick, no estoy entendiendo muy bien a Dayana. ¿Cómo puede ser posible que el idiota de Osvaldo siga causando problemas desde donde está, y no podamos hacer nada para detenerlo? —Ahorita no Xavier, es mi padre quien se encuentra internado y mi cabeza se encuentra en blanco. —Y es mi mujer la que acaba de tener una recaída por culpa de ese tipo, no me pidas que me quede cruzado de brazos viendo como la vuelvo a perder —grite molesto a mi mejor amigo y ahora cuñado, quien no atinaba a responderme. Su necedad en algunos casos me destroza los nervios, necesitamos actuar rápidamente para acabar definitivamente con ese tipo que no tiene escrúpulos, si eso hizo en la empresa de los Sandoval, no quiero saber a quién debe de tener de infiltrado en las mías. Me encargare de hacer una revisión minuciosa de mi personal y que caiga todo el peso de la ley sobre los que me traicionan. Voy a necesitar la ayuda de mi abuelo para que se haga cargo de la inf
Mi padre tenía dos días de estar hospitalizado, después de que despertó de la recaída que tuvo, decidimos que era mejor para él mantenerse ahí, para que lo estuvieran vigilando constantemente. Además si salía del hospital no daría espacio para que termináramos lo que Xavier empezó, con el apoyo de mi madre.Nunca en mi vida la había vista tan enojada como en esa ocasión, al grado de levantarle el castigo que le tenía impuesto a mi amigo. Dayana se encargó de mantener la cordura por todos nosotros, claro está, después que lloro como magdalena por la salud de Yen y dijo alguna que otra grosería que todo el hospital escucho.Lo único malo es que mis planes se han arruinado y la señora Shelby tiene que asegurarse de que todo quede pospuesto para cuando mi padre se recupere del todo.— ¿Cuándo vas aprender a comportarte hija?—Nunca madre, nunca.—Ya no se desgaste señora Lucrecia, nada la hará cambiar de opinión. Su hija es caso perdido, solo nos queda resignarnos y rezar para que Dios se
No cabe duda que las malas personas existen, y justo ahora se encuentran detras de nosotros nuevamente. Hacer las cosas por las buenas no es suficiente, entonces nos encargaremos de que paguen por lo malo que nos están haciendo, sobre todo a Yen que es la más afectada en lo que suceda con su familia.La señora Cristian, mis abogados y yo no hemos descansado ni un segundo para resolver esta situación. Dominick y Dayana se han hecho cargo de los que se encuentran en el hospital, acompañados de los señores Shelby, que en ningún momento nos han dejado solos.Mi abuelo por su parte ha estado a cargo de los pequeños junto con las niñeras, se encuentra más que feliz con ellos a su lado que cuando estoy yo con él. Aunque lo lamentara después cuando regrese a su casa y no tenga a nadie como han pasado todo este tiempo atrás, esperemos que no tenga una recaída que pueda perjudicarle en su salud y ahora sea yo el que tenga que estar en el hospital todo el día.—Vamos Xavier, con esto vamos a ter
Llevo una semana tratando de entender las locuras que han sucedido en mi vida durante ya casi dos años, en algunos momentos me moría de risa, en otros lloraba y por ultimo terminaba muy enojada que era capaz de arrasar con todo lo que tuviera enfrente y con quien estuviera.Sigo sin creer que había perdido la memoria durante un tiempo y durante esos períodos estuve a lado del padre de mis hijos como si nada hubiera pasado, además de que fui capaz de defenderlo y de… de... de… no más de recordarlo se me revuelve el estómago. El tipo que odio con todo mi corazón por todo lo que me hizo cuando le dije que estaba embarazada, a veces puede sonar que no dejo pasar lo que ya sucedió, sin embargo, no soy de las personas que perdonan fácilmente y hace como si nada pasara.—Esto debería de servir para escribir una novela, todo lo que me ha pasado es de ver y no creer, Dayana. Seguramente ganaríamos todos los premios que existen en este mundo.—Yo opinaría lo mismo, sin embargo, ni yo misma pued
Habíamos llegado a la casa después de pedir algo de dinero prestado en el hospital para pagar un taxi que nos trajera de regreso, aunque fueron ellos mismos quienes nos trajeron para asegurarse de que no regresáramos, terminamos riendo por esta acción que no era para menos. Creo que era una forma de decirnos que nos querían y se encontraban al pendiente de nosotros y de nuestra salud.— ¿Estás lista?—Así parece, padre.Algo en mi me decía que debía dar marcha atrás y regresar al hospital por un rato más, y que dejara que las cosas se acomodaran por sí solas. Sin embargo, aquí estaba, dando la cara al mismísimo Lucifer como le habíamos puesto a Xavier Peralta el padre de mis hijos.Todos estaban sentados en la mesa disfrutando de un delicioso manjar que sin duda disfrutarían hasta agotarse, eso quiere decir que por hoy no irán a nuestro encuentro al hospital. La primera en vernos fue Dayana quien escupía lo que tenía en la boca en dirección a mi hermano, dejando al pobre cubierto por
Este es un cuento de nunca acabar con Yen, por más que quiero que todo termine al parecer todo va hacia atrás y nada de lo que hago le agrada en lo absoluto. Por más que quiero no logro hacer nada para quedar bien y que los problemas se terminen con ella.Justo ahora estoy siendo juzgado delante de toda la familia Sandoval, no pienso seguir quedando como el malo de la película, cuando ya le demostré a Yen que quiero… la verdad es que ni yo mismo sé que quiero en estos momentos, pero de algo si estoy seguro, es que hoy mismo vamos a terminar con todo este jueguito que se trae conmigo.—Soy Xavier Peralta, el padre de tus hijos y tu esposo te guste o no. Algo que ya debes de tener claro ahora que recuperaste la memoria y que de seguro ya te contaron todo lo que necesitas saber, Yen.La cara de los presentes era más de curiosidad que de preocupación porque arregláramos nuestra situación, igual que la de mi abuelo que era de pura diversión y nada de preocupación por ayudarme. Al parecer l
No puedo creer lo que estaba escuchando, Xavier Peralta me estaba dejando ir fácilmente, ni siquiera le había dado una respuesta en concreto a su pregunta, pero él ya se había dado por vencido. Tal vez esta era una jugada y quería que me confiara y bajara la guardia para que después, atacara por la espalda. Sin embargo, su semblante era un claro reflejo de que me estaba diciendo la verdad. El tiempo que estuve sin memoria, puedo decir que aprendí a conocerlo y me quedé sorprendida por la capacidad que tiene de cambiar tan fácilmente, su comportamiento de hoy era similar al de esos días por lo que me dejaba muy confundida por no decir que me había desarmado con tan pocas palabras. Ahora no sabía qué hacer para solucionar este gran problema en el que sola me he metido, y digo sola porque ya me lo ha advertido todo este tiempo. Pensé en burlarme un poco, pero no me está dejando opción para hacerlo, al doblegar las manos tan fácilmente está noche. Tenía miedo de enfrentarlo, de que mis
Mi corazón está completamente deshecho y no paraba de llorar por dentro, por más que quiero negarlo me es imposible negarlo. Decirle a Yen que le daría el divorcio me dolió tanto como jamás imagine en esta vida, al parecer ella estaba feliz al escuchar mis palabras por lo que no podía retractarme en lo absoluto. Tal vez era tiempo de salir adelante por mi lado y solo ocuparme de mis hijos, del resto lo dejare por la paz y que sea lo que Dios es quiera. Yen estará mejor sin mí y eso es lo único que debe de interesarme en la vida, me canse e luchar por ella y por estar al pendiente de sus necesidades para que me perdone todo el mal que le hecho. Salí del despacho de los Sandoval sin mirar atrás, mi tiempo aquí se había terminado y ahora debo de hablar con los abogados para que se hagan cargo del divorcio, lo único que siento es el comportamiento de mi abuelo cuando se entere mañana de la decisión que hemos tomado hoy. —Buenas noches abogado, a primera hora del día haga todo lo que te