Especial
Peter

—¿Entoces... dices que no puedes? —dice Ross mientras me regala una mirada de mala muerte.

No le tengo miedo al diablo, así que niego.

—Ya te dije que no voy a hablar con ella —digo mientras apunto por el gran ventanal la tienda de computadoras.

Ross intenta ponerme ojitos de cachorro.

—¡Anda! ¿Qué te cuesta? —se queja mientras me quita el café en un intento de berrinche—: Solo tienes que echarle un poco de café a tú compu y verás como se hace la magia.

Nada más escucharlo decir tal estupidez hace que me enfade.

—¿Tienes tierra en el poco cerebro que tienes? No voy a dañar a mi bebé —digo con enfado.

Ross se pasa una de sus manos por el pelo y entre cierra los ojos.

—Ah, tranquilo. Aquí es cuando me doy cuenta que no eres mi verdadero mejor amigo —dice mientras me apunta.

Suspiro contando hasta seis y tomo una de sus manos.

—Te conozco, casi desde que saliste de las bolas de tú padre. Tus trucos de manipulación no sirven en mí —digo con una sonrisa en el rostro.

Ross vuelve a a
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo