Habían regresado a Cabo Verde hacia varios días, con el paso del tiempo la convivencia del matrimonio se estaba fortaleciendo, en definitiva todo había vuelto a la normalidad.

Elizabeth trataba de esperarlo en la mansión para recibirlo cuando él llegaba de trabajar o en defecto el la pasaba a buscar por casa de Alfonso y Victoria.

Federico no se oponía, Alfonso estaba desmejorando rápidamente y Lizy se estaba dando cuenta que algo no andaba bien.

Lucía a pesar de haber rechazado en varias ocasiones a Santiago de a poco iba bajando defensas y eventualmente iba aceptando alguna que otra invitación, eso sí siempre en lugares discretos pero con personas.

Pablo se dedicó de lleno a su empresa tratando de superar el rechazo de Elizabeth, aunque seguía convencido de que en algún momento ella volvería a él, de todas maneras había empezado a salir con alguna u otra chica para ver si eso era un aliciente para su dolor, pero no funcionaba, arrancarse a la joven de su corazón era casi imposible.