Los días del viaje soñado habían quedado atrás y ya todo estaba regresando a la normalidad, Federico ocupándose de los negocios, por lo general pasaba el día afuera, hasta que llegaba en la tarde para estar junto a Elizabeth.Ella aprovechaba el día para ponerse al día con la universidad ya que estaban por empezar las clases y necesitaba rendir algunos exámenes que le habían quedado pendientes del año anterior.Alfonso seguía desmejorando pero los médicos vieron que la enfermedad progresaba lentamente y eso de alguna manera retrasaba su inminente muerte, Victoria no lo dejaba ni un minuto, estaba pendiente de todo y no lo dejaba ni siquiera de ocuparse de los negocios.Así que quien asumió esa responsabilidad fue Esteban, se dividía entre su trabajo y la empresa pero sabía que eventualmente iba a tener que ocuparse totalmente de la empresa.Ahora que Federico no viajaba mucho y estaba la mayor parte del tiempo en la ciudad, Victor había logrado acercarse más a su ex esposa, al punto de
Elizabeth estaba feliz. Había rendido exámenes finales atrasados y los había aprobado a todos con excelentes notas. Mientras esperaba a su marido, empezó a tocar el piano, su destreza para el instrumento era innegable. Lo que más le alegraba era que al día siguiente comenzaría con las clases y eso le permitía salir de su casa , estar en un ámbito que disfrutaba, si bien le gustaba la vida que llevaba junto a Federico, necesitaba tener su propio espacio para no caer en la rutina en la que caen todos los matrimonios.Cuando él entró y escuchó la música, supo que su esposa estaba alegre, según lo que ella interpretaba era su estado de ánimo.El besó su cuello y le susurró._ la he extrañado todo el día... A ella se le erizó la piel, sentir el perfume del hombre y el roce de su piel era algo que excitaba enormemente.Se dió vuelta y lo besó._ Se te ve muy contenta es por algo en especial? ._ la miraba a los ojos, mientras ella se le colgaba del cuello._ pues, mañana empiezo mis clases
El día siguiente fue movilizante para Lizy, preparó sus cosas temprano, se cambió y bajó a desayunar, como era obvio ese día la llevaría Federico.El hombre silenciosamente le supervisó hasta la vestimenta, sus ojos azules, se clavaron en el suéter que dejaba entrever el prominente busto de ella, eso ya le molestó se contenía porque no quería discutir con Elizabeth pero de solo pensar que alguien mirara a su esposa le revolvía el estómago._ no tienes hambre? _ le dijo Lizy, viendo que no comía._ no me siento bien, quizás algo que comí ayer me hizo mal... no te preocupes.Ella hizo una mueca y le tomó la mano._ sino te sientes bien, porqué no te quedas en casa? puedo ir en mi auto o Ramón puede llevarme.El la miró con esos ojos azules que mostraban que se avecinaba una tormenta._ Dije que te llevaré y luego iré por tí! _ dijo visiblemente molesto.Elizabeth no dijo más nada, solo suspiró y siguió desayunando, lidiar con el volátil carácter de su esposo se le estaba haciendo muy dif
Clara que era muy observadora se dió cuenta de la actitud del profesor._ Lizy, no tomes mal lo que te voy a decir... pero te diste cuenta de que el profesor no te quitó los ojos de encima en toda la clase?_ espetó Elizabeth se rió._ Clarita! tu siempre ves cosas que no existen!._ Le restó importancia._ te ha parecido a tí, el ha sido muy amable con todos nosotros a pesar de su fama. La otra muchacha hizo una cara rara._ No lo sé, yo solo te digo lo que vi! de todas maneras no es nada malo, eres una chica muy bella es normal que haya hombres que te miren embobados._ dijo mientras le pellizcaba la mejilla y sonreía.Lizy se mordió el labio y sacudió la cabeza._ Siempre te superas Clari! las tonterías que dices, me haces reír! Entraron a la otra clase y luego al terminar, fueron a la cafetería para distenderse._ Bien, tenemos varias cosas a leer para mañana, tendré que decirle a Raul que no podré verlo hoy...puff._ se tocó la cabeza. _ oh no, Federico quería que salgamos a cenar
El camino a la mansión, fue casi una tortura para ambos, Federico no podía contener más sus celos y la pérdida de su dominio sobre ella y Elizabeth estaba angustiada por no saber que hacer para que su marido se calmara y en definitiva no pelearse._ vamos a ir a cenar? ._ dijo al fin ella para romper el hielo.El no la miraba._ no lo creo._ dijo serio._ tengo algunas cosas que hacer._ aceleró para llegar más rápido.Estacionó en la puerta de la casa, ambos bajaron y el sin decir una palabra se fue directamente a su despacho.La muchacha entendió que verla conversar con él profesor había provocado en él, un gran enojo.No quiso seguirlo ni hablarle, subió a la habitación se encerró.Federico en su despacho, seguía en un estado de furia que no podía ya casi controlar._ estoy harto de esta mujer! cuando no es Pablo Mendoza, es otro el que la acecha! ahora este tipo , que encima la dobla en edad! ._ golpeó escritorio con el puño. El estaba cansado de no poder controlar la situación y q
Ese día para Elizabeth fue realmente triste, las veces que Federico se había ido lo hizo enojado con ella, pero esta vez se dirigió a ella de manera tranquila y hasta comprensivo con sus necesidades. Cuando le rogó que no se fuera, su esposo la apartó y le habló seriamente._ Elizabeth, también tengo una vida y necesito ponerla en orden , he descuidado demasiado mis negocios._ Bien, está bien.. si alguna vez no me contestas, llamaré a Victor para saber como estás. _ ella sabía que cuando el tomaba en serio su trabajo se olvidaba de todo.El sonrió._ Victor se quedará aquí, necesito a alguien que sepa que hacer en cualquier cosa que surja, mientras él tiempo que yo no esté.La angustia que estaba experimentado Lizy, apenas la dejaba respirar._ Eso significa que te vas por mucho tiempo?_ ella trataba de tragar lágrimas pero no podía._ Elizabeth no llores._ tocaba su mejilla._ te aseguro que estarás bien y tendrás la libertad que quieres... descuida el tiempo pasa pronto.La besó y
Federico había permanecido en la oficina dándole todas las directivas a Victor, confiaba en él ciegamente y sabía que cualquier cosa que surgiera él se la solucionaría, llevaría otro asistente en su reemplazo al extranjero._ Señor.. la señora Elizabeth? ._ preguntó Victor temeroso.Federico lo miró, sus ojos desprendían una cierta melancolía o algo muy parecido._ Ella se quedará, creo que es hora que los dos tengamos un poco de espacio. _ dijo sin más.Victor quien había sido cómplice de todas las locuras que su jefe había hecho por esa mujer, quedó sorprendido. Lo miró de manera extraña._ Perdón señor, quizás sea entrometido .. acaso la dejó de amar? ._ hasta sintió pena con la situación, el apreciaba mucho a Elizabeth y sabía cuanto ella amaba a Federico y que de pronto el decidiera abandonarla, le provocó cierto escozor.El jefe lo miró disgustado._ bien has dicho! no te entrometas._ espetó Victor Parra asintió con la cabeza y salió maldiciendo a su jefe._ Al final era solo
Elizabeth volvió a su casa, era tan grande. tan silenciosa que apenas podía respirar, la partida de Federico parecía agigantar aún más ese lugar.Se preguntó que sería de ella de ahí en adelante. Se frotó los brazos como si tuviera mucho frío, siempre sentía frío cuando él no estaba a su lado.Desoyendo el consejo médico, se fue a dormir sin comer nada, no tenía apetito ni siquiera podía tomar agua. Miró la hora, era muy tarde para llamar a su tío, ella hablaba con el todos los días o lo iba a ver ya que notaba que Alfonso estaba desmejorado. _ Mañana después de la universidad iré a verlo y si me lo permiten me quedaré con ellos, aquí sola me siento peor. _ Durmió muy poco, se diría que dió mil vueltas en la cama, cuando el despertador sonó se levantó.Sentía como si su cuerpo hubiese sido apaleado.Tomó una ducha y se cambió, luego buscó su maleta y guardó ropa y algunas cosas más.Bajó, no había nadie, así que fue hasta al garaje cargó la maleta en su auto y salió.Se sentía un