Desperté gracias a unos ruidos que provenían del baño, no sabía la hora, nuevamente pero la vista de la ventana me indicaba que ya había amanecido, traté de abrir los ojos pero la luz del sol era cegadora, una vez adaptados a la luz pude ver a Max saliendo del baño, vestido con un traje negro y una corbata roja mientras abotonaba los últimos botones de su traje a la medida.- Te pedí el desayuno - el hombre se paró gente al inmenso espejo frente. a la cama para ver cada mínimo detalle de su semblante.- Gracias- no quería que sintiera mi mirada sobre él, así que pase de contemplar su espalda entallada a buscar un punto de la habitación para captar.- No he podido retrasar algunas citas pendientes de la oficina, tengo reuniones todo el día, no sé a que hora regrese pero puedes pedir comida, películas o cosas que se te ofrezcan en la recepción, lo que sea está a mi cuenta - deja su mirada lejos de su reflejo y lo veo titubear al verme, casi logro ver cómo niega con la cabeza y sale por
-Solo quería hablar con tu hermana, saber cómo va todo por allá- no quito mis ojos lo los suyos, no porque quiera solo para mantener mi vista en algo al descubrir que solo lleva encima una toalla sin cubrir su trozo.- Bien, ¿ya cenaste?- se pasea por la habitación tranquilamente- No, podrías cubrirte, no es cómodo estarte viendo medio desnudo- me levanto de la cama solo para tomar una de sus prendas de ropa y lanzarlas a sus manos.- Ha muchas les parecería agradable- sonríe de forma arrogante mientras toma la prenda aquel le he dado y la deja en su lugar para tomar una de su elección.- Bueno, yo no soy parte de esas muchas- me mira por un instante, casi como si quisiera descubrir la falsedad en mis palabras.- Como sea ¿quieres que ordene algo para la cena?- me doy la vuelta para mirar la ventana mientras se pone algo de ropa-Lo que sea está bien para mí- Toma el teléfono que hay a un lado de la cama y pide algo en francés, pero claro que un hombre como él sabría el idioma, mie
Desperté, un día más en la hermosa ciudad de Paris, Francia, lo mejor hubiera sido despertar por el olor a pan recién hecho o algunas campanas de alguna bella iglesia, pero no, en vez de eso soy despertada gracias los gritos de Max, estoy sobresaltada, abro los ojos en un segundo y los busco por la habitación con la mirada, puedo verlo en el balcón, luce apurado con el teléfono en su oreja, hecha unos gritos más al aire y solo entra para guardar cosas en su maleta, veo el reloj de mi teléfono, las tres de la madrugada, Max ha colgado el teléfono ahora y yo estoy más desconcertada que nunca.- Nos tenemos que ir, Lucas está en el hospital- tan sólo con oír esas palabras mi angustia crece, tomo las bolsas de ropa que había comprado y saco las prendas para ponerlas en una sola.- En mi maleta hay espació para tus cosas- asiento sin más para comenzar a empacar, tan sólo cinco minutos nos toma para tener nuestras cosas listas y cambiarnos, bajamos al living apurados donde unos señores de t
Un fuerte dolor en mi espalda me hace despertar apenas con abrir mis ojos, lo primero que veo es a Lucas dormido profundamente en su cama, trato de levantarme pero mi espalda truena provocando que un fuerte dolor recorra mi cuerpo, con mucho esfuerzo logro sentarme estirando mis piernas y brazos muy despacio.- Veo que no dormiste bien- una voz tras de mí me sobresalta.- Los sillones de este lugar no son tan cómodos como parecen, es decir deberían de serlo en este hospital de lujo, pero no es así- respondo con una mueca mientras tornaba mi cuello.- Te traje algo de ropa- Max extiende una bolsa de papel y la tomo.- Gracias, pero creo que prefiero darme un baño en la casa, no he tomado uno desde ayer antes del viaje-- Claro, el chofer esta afuera esperándote, le diré que te lleve a la casa-- Bien, gracias, sólo me baño rápidamente y regreso a verlo- miro la pequeño niño desde la orilla de su cama sin despertarlo.- No, quédate a dormir y come algo, Lucas está mejor ahora que te vio
Cuando despierto, lo primero que hago es mirar rápidamente la hora en mi teléfono, la luz de la ventana aparece iluminar más de lo que debería, casi salto de la cama en un brinco al ver que eran las cinco de la tarde, había dormido más de siete horas, tomo mi ropa para terminar de vestirme y me cambio lo más rápido posible, bajo las escaleras y escucho la voz de Jos en el comedor.- Dijiste una hora y ya pasaron más de seis- menciona al verme tan agitada mientras bebe un vaso de agua.- ¡Vámonos!- salgo apresurada - Oye yo no soy el que se quedo dormido- habla tomando las llaves si te la mesa, en el camino fui presionando a Jos para que fuera hasta el límite de velocidad permitida, llegamos en veinte minutos al hospital, lo dejo esperar en el estacionamiento por si Max se quisiera irse, subo hasta el cuarto donde apenas la entrar veo a Lucas y a su familia platicando mientras el veía la televisión.- Hija que bueno que llegaste- padre de Max es el primero en saludar.- Lo siento, q
- Para, no ahí no, no, esto es..haaa- gritaba conteniendo mi risa pero los pulmones me ardían al no darles oxigeno, controlé mi respiración y cerré mis ojos para poder respirar hasta que lo logré.- Bueno jefa, he pasado suficiente tiempo aquí, yo mejor me voy, deben de necesitar me en la casa también- menciona Jos parándose de su asiento acomodando su uniforme, Lucas rápidamente hace unas señas hasta mí y señala a la dirección de Jos.-Debes decirle que se quede, Andrea- Jos parece morra que lo señala y me mira- ¿Que ha dicho?- - Pidió que te quedarás- traduzco con una sonrisa hacia él mientras la devuelve, ha sido un rato muy agradable par ambos.-Dile que vendré a visitarlo en otro momento...y le traeré un regalo- yo sólo asiento y se lo explico a Lucas, él niño luce emocionado y asiente ilusionado para después despedirse son su manita.(...)Alonso Máximo y su familia habían llegado media hora después de la partida de Jos, ahora me encontraba comiendo con Alonso en la cafetería
- ¿A qué te refieres cuando dices, nuestra casa?- mis palabras salen atropelladas del asombro pero a Max solo parece darle risa.-¿Pensabas que íbamos a vivir con mis padres?¿Siempre? Bueno lamento decirte lo contrario, pero no es tan malo después de todo tendremos nuestro propio espacio- él hombre ríe ante mi asombro y yo solo asiento torpemente avanzando hacia la casa.-El jardín es maravilloso- exclamo al ver tantas flores coloridas.-Espera a ver la por dentro, es aún mejor- Max me guía hasta la entrada donde saca una llave y la introduce en la cerradura, nos dirigimos hasta un lugar que parece la cocina, está llena de tecnología, veo una pantalla en el refrigerador y una estufa demasiado tecnológica, veo entonces a una señora de avanzada edad que al vernos sonríe y camina hasta nosotros para después abrazarnos, la recibo entre mis brazos con sorpresa ante el acto tan repentino.-Mi pequeño Alonso, que bueno que están aquí... y tu debes ser Andrea ¿no es así? Este muchacho me ha h
Llegamos a la cocina todavía con las manos entrelazadas, paramos justo en la entrada donde puedo ver a unas cuantas mujeres, todas parecen estar platicando animadamente entre ellas, no logro escuchar de lo que se parecen reír tantos pero mientras que Sara lavaba los platos, ambos miramos todo a nuestro alrededor, en divertido tomar por sorpresa a cualquier persona. Para llamar la atención de todos Max carraspea, he inmediatamente todas se levantan de sus sillas y se paran derechas mientras Sara camina hasta nosotros de manera tranquila dejando los platos sucios de lado.- ¿Que se te ofrece, mi niño?- pregunta tan amable como siempre una vez que llega hasta nosotros.- Nana, quería que le presentes a Andrea quienes trabajan en ésta casa, necesita conocer todo por aquí y acostumbrarse a ver tanta gente dentro- Sara solo asintió con una gran sonrisa mientras miraba a las muchachas.- Ella es Julia tiene 25 años y se hace cargo de las habitaciones - me señaló a una chica morena cabello cor