No es justo tener que detener mis planes de libertad justo cuando todo empieza a ir bien. Así como no es justo no poder disfrutar cada segundo del momento más sublime de la vida de una mujer. Tener un hijo era algo con lo que soñaba antes de que sucediera nada más en mi vida. Simplemente amo a los niños y el matrimonio me hizo soñar con eso a corto plazo, y luego esos sueños se perdieron. Entonces comencé a experimentar esos momentos en los personajes de los libros. Incluso podía imaginar su barriga creciendo y sus amantes involucrándose. Y Dios mío, mi imaginación podía ir más allá cuando cada bebé nacía trayendo alegría, fortaleciendo el amor y uniendo a las personas. Y ahora, no estoy lejos de esa realidad. Él podría estar aquí dentro de mi útero, creciendo y fortaleciéndose cada día y… ¿Erick? Será el mejor padre del mundo entero. Sonrío ante ese pensamiento. Pensar en él me hace consciente de que no puedo, de hecho, no debo ocultarle este hecho por mucho que frustre mis planes. M