Camino sin rumbo fijo. Con el enfado y las prisas me he olvidado el bolso. No tengo dinero ni llaves para ir a mi piso, el teléfono también me lo he olvidado. Menuda mierda.
¿Cómo ha podido pensar que me acostaría con su hermano? Mi vida ha dado un giro de ciento ochenta grados por él.
Comienza a refrescar. Sigo teniendo la sensación de que alguien me sigue. Noto los ojos de algún desconocido clavados en mi nuca. El miedo puede más que el orgullo.
Empiezo a caminar a paso ligero, cada vez más rápido hasta que termino corriendo. Solo paro de correr cuando llego a la casa de Ian, abro la puerta y la cierro tras de mi. Ahora me siento segura. El pecho sube y baja sin control. Debería hacer más ejercicio.
-¿Ves? Tiene un metro de margen de error - la voz de Hugo resuena en el salón.
Estoy segura de que la explicación a esa frase no me v
Saca el teléfono de su bolsillo y escribe algo en él. Levanto la mirada incrédula ¿En serio este es un buen momento para hablar con quien quiera que esté hablando?- Has dicho que querías que nos casáramos ahora - suelto un poco molesta - bien ¿Qué hacemos?-Está llegando.Entrecierro los ojos. No se a que se refiere.-¿Quién está llegando?-Emma, me estoy dejando llevar Estoy disfrutando de lo que realmente quiero y me hace feliz ¿Por qué no haces tu lo mismo?Parece un niño con un juguete nuevo. Una sonrisa radiante desentona en su rostro normalmente serio.Abre una botella de vino y me sirve un poco en una de las copas. Tiene razón. No tengo ni idea de lo que tiene preparado pero voy a disfrutar y a relajarme. Si lo ha preparado con tanto esmero estoy segura de que me va a encantar.Se abre la puerta. Incrédula me giro hacia ella. A partir de aquí puede ocurrir cualquier cosa. Ian tiene una gran sonrisa escaparate que contagi
-No...no puedo -Susurro.Al fondo suena un ohhh colectivo que hace que me sienta peor de la que ya me siento.-¿Qué quieres decir? - pregunta Ian.-¿Podemos hablar... sin todo el mundo mirándonos por favor?Me sujeta por el brazo y me saca casi a rastras. Cierra la puerta dando un portazo. Me encara, triste y enfadado. No puedo recriminarle nada porque le entiendo. Si tenía dudas se lo debería haber dicho antes de que viniera todo el mundo y él quedara en ridículo.-Explícate - ordena - ¿No me quieres?-¡Si, por dios! No es eso.. es...-¿Entonces que es? No lo entiendo Emma ¿Es por lo que ha pasado con mi hermano? Te he prometido que iba a cambiar, te he..- Para, para -me rompe el corazón verlo tan perdido. Él no es así -no es por nada de eso. Quiero decir... no se... ¿No debería firmar uno de esos papeles que ponen tu fortuna a salvo? Quizás...
Algo malo está pasando. Mientras Hugo conduce y llama a los hombres que tenía contratados para la seguridad de todos nosotros, me lanza comentarios que me paso por el forro.-Esperas en el coche a que llegue la policía - ordena.No contesto a ningún comentario que hace. Ian es mi familia, mi única familia en realidad y haré lo que tenga que hacer.Siento como el corazón se me sale del pecho casi literalmente, las manos me sudan y me tiemblan. Solo espero que no sea tarde...-¿No puedes conducir más rápido?-Si quieres que lleguemos vivos no. Emma, la policía está avisada y ya va de camino. No te preocupes.-¿Qué no me preocupe? - y no se porque motivo rompo en un ataque de ira por ese comentario - ¿Dejaste tu de preocuparte cuando el animal que violó a tu mujer la raptó? La policía la estaba buscando ¿Verdad?Espero a que conteste dispuesta a discutir y descargar todo el miedo que siento ¿Por qué no hemos llegado todavía?-Lo siento Hu
Me levanto de la camilla. Necesito ver a Ian, esté donde esté. No se que ha pasado con él, ni con Piterson pero por mi puede morirse que me da igual.Camino por los pasillos como gallina sin cabeza hasta que en una pequeña salita me encuentro con Will. Está sentado en una de esas sillas de plástico con la cabeza casi entre las piernas. Eso no es buena señal.-¿Will? - murmuro temblando de pies a cabeza - Donde...donde está Ian.-¿Qué haces levantada? Deberías estar descansando.-¿Está bien?-No lo se - admite. Tiene los ojos rojos de llorar y le tiembla la voz - se lo llevaron en parada y todavía no me han dicho nada. Eso es bueno... supongo...En parada... la última vez que lo vi no respiraba. No se donde le disparó Piterson y me da miedo preguntar... al final me armo de valor y me quito las lágrimas de los ojos.
Espero que en cualquier momento salgan las cámaras y me canten la canción del inocente inocente. No puede estar ocurriendo esto. No se que decir ni que hacer, no se como actuar.-No es nadie mi amor - canturrea Sarah.Camina dando saltitos como la gilipollas que es y se sienta a un lado de la cama mientras le acaricia la mano.Parezco una esta estatua. Todos nos hemos quedado petrificados menos Sarah que parece disfrutar. Siento las lágrimas antes incluso de que lleguen a mis ojos. Las siento desde el pecho, por la garganta, pero no voy a darle el gusto, no lo voy a hacer aunque lo que más quiera en este momento sea encerrarme en el baño a llorar. Con total probabilidad es el matrimonio más corto de toda la historia.Me salgo fuera porque presenciar esta escena tan íntima me duele.El médico entra y cierra la puerta y aunque no tengo ni idea de lo que está sucediendo dentro no me importa. Ian no me recuerda ¿Qué más da todo lo demás?Demasia
Por suerte el doctor vino corriendo y tras ver que todo estaba bien sentenció que era normal. El dolor se había producido por un aumento de la presión.Por mi parte, no pienso volver a estresar a Ian. Si tiene que olvidarme y ser feliz o infeliz seguramente junto a Sarah que así sea. Prefiero que viva engañado a que le pase algo por mi comportamiento.-Emma, lleva mis cosas a la habitación - ordena Ian.Agacho la cabeza y cojo todo lo que me ha pedido. Están sus padres, Will y Hugo pero la única que disfruta de mi humillación es Sarah.- Cariño - titubea su madre - yo puedo colocar tus cosas.- ¿Por qué? A ella le pago para que haga su trabajo. Que trabaje.Desde que le dio ese dolor de cabeza tan grande su actitud hacia mi ha cambiado, ha dado un giro de ciento ochenta grados y ahora me trata con la punta del pie.Era doloroso que no me recordara, pero es aun peor que me trate como si fuera inferior a él. Este es el tipo de persona q
Entra con una cara de felicidad que en nada se parece al hombre uraño que llegó hace unas horas.-Tío, que grande eres - carcajea Hugo.Su madre y yo intercambiamos miradas. Debemos tener cara de tontas porque en algún momento nos hemos perdido algo. Hace un momento le prometía amor eterno y al siguiente la mandaba a tomar viento fresco.-No se merecía otra cosa - su semblante cambia de pronto serio al verme - siento haberte tratado así. Ella tenía que pensar que te despreciaba para que firmara los papeles.-¿Me recuerdas? - pregunto incrédula.-¿Cuánto tiempo crees que podía olvidar al amor de mi vida?-¿Desde cuando?-Desde el dolor de cabeza en el hospital. Me sentí tan estúpido. Esa mujer no tenía bastante con todo lo que había hecho, quería más y yo tenía que vengarme.Por la pu
IanAunque hemos quedado directamente en el restaurante, en el último momento decido ir a buscarla a casa, nuestro primer aniversario se lo merece.Nada más abrir la puerta me topo con una corbata tirada en el suelo ¿Qué hace esto aquí? La sujeto entre los dedos para fijarme bien. No es mía.Subo las escaleras con el corazón en un puño, la respiración agitada y aunque no he llegado todavía a la habitación, cruzo los dedos para que todo esto tenga una explicación razonable y pueda reírme más tarde por la locura de pensamiento que se me pasó por la cabeza.Me paro frente a la puerta. Noto como pequeñas gotas de sudor me resbalan por la frente. Sin pensarlo, la abro de golpe.Sarah está en la cama con otro hombre. Cuando he visto la corbata, me tendría que haber ido. Podría haberme hecho el tonto como si nada hubiera pasado, ahora tengo que ver esta escena que estoy seguro ni en un millón