Chanel:Veo a los cinco hombres ingresar en el hospital, la comisura de mis labios se eleva, uno de ellos está aquí y eso solo me hace sentir como triunfadora, eso soy. Caminan hasta mí, pero en el camino se ven interrumpidos por una persona, él… Maldigo en silencio y me acerco a paso lento.— ¿Puedo ayudarlos en algo? — menciona Evan con tranquilidad.— Venimos buscando a la Doctora Chanel. — él se gira y me mira con cierta incertidumbre.— Buen día. — mi voz es suave. — ¿En qué puedo ayudarlos? — cada uno me mira con más intensidad que el otro, pero saben perfectamente lo que deben hacer.— Doctora…— dijo uno de ellos. — Nos mencionaron que era la mejor en la zona. — asiento con cautela.Puedo notar el cuerpo del hombre, está rígido y mantiene su cabeza hacia el suelo, tal vez sospecha, siento la frustración tomar mi cuerpo y sacudirlo, pero justo antes de que haga algo de lo que pueda arrepentirme, llega Rhett.— Evan. — menciona con su voz varonil. — Necesito tu ayuda. — él me mir
“Esfuérzate por mantener las apariencias, es lo primordial.” Desconocido: Porque ayudarla siempre está en mis planes, no me importa nada más, solo hacer su voluntad. Pero es tan jodida, que a veces es casi imposible. Ahora camino en busca de su habitación, mandó a llamarme, él quiere que el plan ya se lleve a cabo, quiere hacer las cosas cuanto antes, pero yo sigo estando al mando, mientras siga encerrado en esa habitación, yo decido, cómo lo haré y cuando comenzaré, no hay pérdida. La puerta se abre frente a mí, ingreso al instante, primero me cercioro de que la puerta se cierre bien, y luego dejo que el dispositivo en mis manos haga su trabajo para que la señal se vea interrumpida. — ¿Sabes algo? — me dice él, sin girarse. — No, pero hice que su plan se llevara a cabo. — se mantiene callado por unos segundos. — Ahora habla. — sigue con la venda en sus ojos, pero esta vez, no se la quité, no necesito eso en este momento. — Eso es más que perfecto. — una sonrisa aparece en sus
Narrador Omnisciente:La joven se pasea por la entrada, el reloj marca las seis y media de la mañana, solo media hora falta, para que se cumpla la fecha estipulada, luce pérdida y cansada, las bolsas debajo de sus ojos son bastante notorias, el nerviosismo que comienza a sentir es muy marcado.— Hola, Atenea. — de nuevo aquella voz, esa presencia que jamás la deja sola. — Un gusto volver a verte. — se tensa en su lugar, cierra los ojos y respira profundo.— No es real. — pronuncia con voz suave. — No eres real. — pero está equivocada con aquellas palabras.— Así lo piensas y crees tú, pero soy tan real como todos, Atenea. — un grito desgarrador se escapa de sus labios y aquella vaga presencia que la merodea solo se ríe. — Muy patética, a mi parecer.Su rostro está cubierto de sangre, al igual que sus manos, su ropa está rota y su mirada pérdida ¿Se encuentra bien? Lamentablemente no es así, ha tocado fondo y está en el borde.— Vete, ¡ahora! — pero al girarse no encuentra a nadie y al
Chanel:Regreso de nuevo al piso cuatro, tal vez la paciente ya esté despierta, debo comenzar con mi perfilación, sobre todo la criminal, es lo que más me interesa justo ahora. Así que salgo de mi oficina y camino apresurada hasta el elevador, todo se ve solo, y es de esperarse, son las cuatro de la tarde, a esta hora no hay muchos por aquí, eso solo me beneficia a mí.Estoy ansiosa por los análisis y mucho más por la información que Donovan debe darme, estoy solo a un paso, un puto paso para llegar a la meta que quiero, se siente muy jugoso todo esto; salgo del elevador y con tranquilidad me dirijo hacia su habitación, pero antes doy un pequeño vistazo hacia la habitación de las cobras, están sumergidos en un sueño profundo y todo gracias a la medicación que les he estado proporcionando.Luego de eso si me dirijo a mi destino, miro por la ventanilla, la mujer está despierta, de espaldas a la puerta y está de pie, muy interesante. Antes de ingresar veo como habla con “alguien”, pero s
Rhett: *El juego Macabro…*La noche ha caído por completo, mi vista está fija en el camino, todo se mantiene oscuro y eso solo lo hace mucho más entretenido, mis manos pican por bajarme hacer de las mías, la mujer a mi lado está muy quieta, solo mira por la ventana, no ha mencionado ni una sola palabra desde que salimos del hospital.— ¿Bosque? — pregunta con curiosidad. — ¿Juegos macabros en el bosque? — se ría frenéticamente, pero no me mira en ningún momento.— ¿Tienes una mejor idea? — no responde. — Es lo que creí. — ella no dice nada más y yo solo me estaciono para bajarme.Y lo ve a lo lejos, son un grupo de cinco, tres hombres y dos mujeres, sus pupilas se dilatan, lo noto al instante, se relame sus labios y luego sus ojos se posan sobre mí, la tengo…— ¿Cómo lo sabías? — su sed por ir tras de ellos es enorme, es demasiado notorio.— Nena…— me acerco a su piel, la cual se eriza casi de inmediato, está lista. — Estás hablando conmigo… Y sabes perfectamente que no me ando con
Chanel:Mi teléfono suena con desespero, estoy a punto de solo estrellarlo al piso, cuando siento que no estoy sola sobre la cama. Me levanto volando y lo que veo me deja casi atónita.¿¡Qué jodidos hago en la cama de Rhett!?No sé y tampoco quiero descubrirlo, rápidamente corro al baño, debo tomar una ducha, se me hizo tarde, no lo levantaré, me vale, ingreso en el baño, le pongo seguro a la puerta y me dirijo a la ducha, la cual abro al instante, el agua tibia cayendo sobre mí es tan placentero.Entonces las imágenes de lo sucedido anoche llegan a mí de golpe y una sonrisa se forma en mis labios, él organizó lo de juegos macabros, teníamos años sin hacerlo.Bueno tal vez anoche me pasé… ¡Pero oigan! Sentir tanta adrenalina, me dejó sedienta de sexo ¡Lo necesitaba!Tallo y lavo muy bien mi cuerpo, veo la sangre caer, y eso solo me hace sentir tan extasiada, los próximos juegos macabros los organizaré yo y será el triple de mejor.Salgo del baño envuelta en una toalla y veo la bolsa d
Jared:Creo que podría pasar horas y horas frente a ella viéndola hacer esto, y jamás, nunca, me cansaría, es tan perfecta, cada método que utiliza, cada cosa que hace, solo me hace recordar la vez que nos conocimos…“La vi caminando a lo lejos, lucía un perfecto vestido blanco, pero eso no fue lo que más llamó mi atención, si no sus labios… Ese feroz color púrpura estaba sobre estos, no es común ver que las mujeres utilicen está tonalidad, pero ella… Le quedaba demasiado bien ese color, desprendía tanta seguridad que solo me dejó atónito…— Soy Jared. — dije como presentación, sus ojos se fijaron en los míos y no apartó la mirada en ningún momento.— Un placer Jared, soy la residente Chanel Maxwell, y serás mi paciente. — mis labios formaron una sonrisa grande, porque ella fue quién había visto entrando al hospital.— Mi doctora…— le dije tan suavemente, e incluso toqué su rostro, ella no se apartó, si no que más bien me sostuvo la mirada.— Me dijeron que eres altamente peligroso, t
Narrador Omnisciente:La paz jamás ha reinado, sigue siendo tan vil como antes, pero se prepara, mantiene su mente abierta a nuevas posibilidades, pero ella, ya no es aquella niña, ahora es una mujer, una que está en busca de su venganza máxima y que poco a poco lo ha ido logrando. La oscuridad la rodea, las sombras la tienen, y ella encantada las recibe, porque de allí es, pertenece a ese lugar.Y él la observa cada día, deseoso de sus labios, anhelando su roce e incluso soñando con su aroma, de lejos… Siempre de lejos, y no se percata, no siempre tiene los ojos en todos lados, porque incluso, en esta oscuridad, él puede verla, destrozando todo, puede ver como la sangre la ha impregnado por completo, pero no le importa, porque aún, de esa manera, la desea tanto como la primera vez que la vio.Se ríe, grita, recordando como aquel ser pudo enseñarle todo… ¿Un monstruo se hace o nace?Hay tantas respuestas para esa pregunta, pero creo que ninguna le haría la justicia necesaria, porque s