Perspectiva de Luka-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-Ojalá existiera un mundo en donde yo no tuviera que ser un rey y tú no tuvieras que ser una princesa. Ojalá y existiera una realidad donde yo no tenga que enfrentar una guerra y tú no hubieras dado la vida porque yo no fui capaz de conseguirlo. Un lugar donde yo no tenga que ser yo y tú no tengas que ser tuPero no existe, y esos deseos solo terminarán siendo eso... Deseos. Acaricio su cara con mi mano que se siente demasiado grande y tosca como para merecer sentir su piel inmaculada, está tan pálida que parece más una muñeca hecha de porcelana como las que venden en la juguetería del pueblo. Si no puede cumplirse lo que deseo, al menos espero que los dioses me escuchen y puedan hacerla despertar, al menos para poder despedirme de ella.Quisiera decirle que no estoy enojado y que ojalá hubiera podido tener la confianza de decirme lo que en realidad deseaba. Ojalá y hubiera tenido la confianza de decirle que no ne
Perspectiva de Tristán-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-—Padre, ¿por qué se casan las personas? — pregunté a mi padre un día, cuando era demasiado pequeño como para entenderlo, pero lo suficientemente grande como para preocuparme.Mi padre me miró como si fuera una pregunta que no tenía una respuesta, pero que tampoco se tenía dudas.—Por amor. —Se decidió a decir por fin—. Por el amor que tienen uno del otro, pero con los miembros de la realeza es un poco diferente.Ya me lo temía en ese entonces, mi institutriz era una mujer anciana que gustaba advertirme de todo lo que algún día tendría que hacer cuando me convirtiera en rey, el matrimonio era uno de sus temas favoritos.—¿En qué es diferente? —pregunte entonces a mi padre.—Cuando alguien de la realeza se casa es porque ama a su reino y sabe que podrá hacerlo más fuerte casándose. Es una clase diferente de amor.Por supuesto que tampoco lo entendí y después solo lo acepté.Sabía que algún día me prepararía fren
Perspectiva de Crisia-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-—¿Por qué no nos vamos al mundo de los muertos? —pregunto a mi madre después de que he los paseado durante demasiado tiempo entre las colinas.—Porque hay una parte de tu alma que aún está en la tierra.No lo entiendo, yo siento el cuerpo ligero e impersonal, sin rastro de su esencia terrenal. Pero si me preguntaran si estoy totalmente lista para irme, tendría que decir que no, que hay una pequeña parte de mí que se rehúsa.—Pero traspasé toda mi magia a Gofel, estoy segura.—No toda, antes de ello ya habías entregado una parte de ti a alguien que no está listo para soltarlo ni tu a él.Me siento en el pasto sintiendo que la cadena que me une a Tristán se vuelve visible.—Crisia Dalonet, ante la presencia de estas personas y de Roth, el día de hoy prometo que el regalo que nos hiciste haga que valga cada día a partir de ahora, por el resto de la historia. Prometo usarlos para que nadie tenga que pasar por lo qu
Perspectiva de Crisia-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-—Deberíamos irnos —dice Tristán recargándose en la cama con un codo.La sabana se le ocurre hasta la cintura revelando el pecho y los hombros musculosos.—¿A dónde? —pregunto con una sonrisa, pensando que lo mejor sería quedarnos en la cama para continuar lo que hemos estado haciendo los últimos días.—A ver el mundo. Cuando la guerra termine tendré que ir en una gira por todo el reino para hacer un recuento de todos los daños y carencias, para restablecer la paz y el orden, pero podrías aprovechar para perdernos de vez en cuando.Extiende la mano para apartarme el cabello del hombro. Se inclina para plantarme un beso suave en el cuello que envía toda clase de sensaciones.—Podríamos perdernos un segundo en la cascada de Madre Tierra o en la colina del fin del mundo. Podríamos ir a los mercados y a las ferias para comprarte un montón de cosas nuevas para comer.—Quieres hacer que no me quede ni un vestido —me r
Perspectiva de Crisia-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-Una conmoción de voces hace que me despierte. Un murmullo como enjambre de abejas me hace levantarme de la cama y asomarme por la ventanilla.En la entrada del castillo, pasando el puente hay una multitud de hadas que gritan desesperadamente.—¿Que está ocurriendo afuera? —pregunto a uno de los guardias del castillo que venía en mi dirección.—Es la enfermedad de los narklets —El hombre parece turbado—.Le pido al guardia que busque a Rowel mientras que le pido a varios guardias que me acompañen a la salida. En poco Rowel me da alcance cuando estamos llegando a las puertas de reja del castillo.—Princesa, ¡Ayúdenos por favor! —gritan las voces desesperadas.Están apiñados unos con otros, tienen en su cuerpo manchas que parecen costras ennegrecidas.Miro en dirección a Rowel y me preocupo de ver su gesto tan serio.—Son más de 150 —me dice en un susurro al oído—. Ha habido casos aislados durante todo el año, per
Perspectiva de Tristán-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-—¡Arriba! —grita un soldado apuntando con un faro improvisado que Gofel ayudo a construir. Tiene muy poca luz de elfo pero es suficiente para los “Sigue Hadas” se estabilicen. Debemos acabar de ellos antes de que lleguen a los soldados que tienen que lidiar con los “No Muertos”.Cruzan por el aire, pero esta vez no provienen en dirección al renio de Dalonet a través del mar. Vienen de Roth y no entendemos cómo es que eso es posible.Somos muy pocos los que sabemos cómo usar el equipo de reconocimiento, corremos entre las pequeñas barricadas con ostras que hemos construido por la playa y apuntaos con las almas de rayos a una distancia prudente. Una de ellas se escapa sobrevolando por encima de mí. Escucho el chasquido de algo que se funde por un escupitajo de ácido cae en una de mis piernas.No me da tiempo de rosear agua o arena para evitar que llegue a mi piel, doy media vuelta y apunto al pecho donde el rayo
Perspectiva de Crisia-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-Nos quedamos en silencio hasta que vemos en la lejanía los barcos que partieron hace días.La brisa de mar los arrastra hasta que uno de ellos se acerca lo suficiente. Nosotros acercamos nuestra pequeña embarcación lo más cerca que podemos para que ellos tiren una cuerda de la que baja Kiara.—¿Qué haces aquí? —pregunta una vez en nuestro barco cuando ve a Doli— ¿Que hacen las dos aquí?Pregunta de nuevo cuando me ve a mí también.—Si se dirigen hacia allá van a encontrarse en el infierno —si voz es tan sombría que me causa escalofríos. Kiara, siempre decidida y sería parece que los ojos se le han abierto y sus pupilas vienen cargadas de algo desconocido.—Lo sabemos —responde Doli—. Es por eso que vamos allá.—Necesito el grimorio de los elfos para enfrentarme a "eso" —explico aguantando las ganas de preguntar dónde está Tristán, porque tengo miedo de saberlo.Kiara me mira profundamente. Se queda quieta unos
Perspectiva de Crisia-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-La playa está llena de niebla que huele a azufre.Ayudo a Doli a desviar el barco hacia el este donde recuerdo que es la zona donde el bosque inicia arriba de una pequeña pared rocosa que lo separa del mar. Es más complicado embarcar ahí, pero vale la pena si no queremos que nadie se entere de nuestra llegada.Conseguimos anclar el bote, pero nos preocupa que pueda hacerse añicos si una corriente muy fuerte lo golpea contra las rocas.Doli tenía razón, aún queda mucha vegetación, pero las hojas de los árboles están salpicadas con hongos que le dan tonalidades amarillentas y rojas. Huéspedes indeseados que les drenan poco a poco la vida, pero que las mantiene en pie al mismo tiempo. La energía de este bosque me hace sentirme triste, late tan débilmente que me parece que está hablándome, pidiéndome que lo salve.Hace demasiado frío mientras caminamos entre los árboles, hace tanto silencio que me sobresalto cuando