Capitulo613
Al verme entrar abrazando tan cariñoso a mi cuñada, Luna no pudo evitar sonreír:

—¿Tan rápido ha terminado todo?

Me sentí algo avergonzado y, con la cara roja, le respondí:

—Luna, seguro que estabas esperando, ¿no?

Luna se encogió de hombros con indiferencia: —Yo estoy bien. Al final, la que está herida no soy yo. Pero ustedes dos, ¿cómo puede ser que ella esté herida y aun así estén...?

Miré a mi cuñada en mis brazos, seguía profundamente dormida.

La dejé con delicadeza en la cama y cubrí su cuerpo con la manta.

Solo entonces me dirigí a Luna: —Luna, tú en realidad querías que ayudara a mi cuñada, ¿verdad? Pues ya lo he hecho, así que ahora puedes estar tranquila.

Luna coqueta se sentó en la cama y, con un gesto de su dedo, me hizo una señal para que me acercara.

Obedecí sin dudarlo por más tiempo y me acerqué.

Luna me abrazó con los dos brazos alrededor del cuello y, con una sonrisa traviesa en su rostro, me dijo: —Has hecho que tu cuñada esté feliz, ¿no crees que ya es hora de que
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP