¡Hola, hola, bellas! Aquí les dejamos este inesperado segundo capítulo del día! Esperamos que ll hayan disfrutado y que les haya gustado 🥰 No olviden comentarnos, nos encanta leerlas! Saludos, Andrea y Dannya
Luego de ver los fuegos artificiales, bailar y disfrutar un poco más en la fiesta, las ansias y el deseo que desprendía la pareja, los llevó a dejar la celebración, para subir y comenzar con su noche de bodas.Las puertas del elevador se abrieron y la pareja, que se besaba como si su vida dependiera de ellos, entró en la estancia del penthouse, comenzando a deshacerse de la ropa, dejando un rastro de prendas hacia la habitación, sin dejar de besarse. Gabriel depositó a Allie sobre la cama y miró embelesado a su esposa, la mujer de su vida, la compañera con quien compartirá el resto de su vida y no pudo evitar sonreír, emocionado. Su cuerpo lo invitaba a abalanzarse sobre ella y tomarla como si estuviera endemoniado, pero era su noche de bodas y se tomaría todo el tiempo del mundo, en aprenderse cada rincón de su cuerpo, el olor de su piel y grabaría en lo más profundo de su ser, cada suspiro, jadeo y gemido.—Eres tan hermosa —susurró, acercándose a besarla, intentando contenerse y fr
Allie se sorprendió completamente cuando se dio cuenta que iban al cementerio, pero entendió los motivos para hacerlo. Gabriel estacionó la moto, se bajó y la tomó de la mano para ayudarla a bajar. —No imaginé a dónde veníamos —mencionó. —Me pareció una buena idea —respondió su ahora esposo. —Lo es —confirmó. Caminaron tomados de la mano hasta llegar al mausoleo en el que descansaban los restos de su abuela, junto a los de su esposo. El lugar estaba lleno de flores y se conservaba muy limpio, Gabriel imaginó que Joseph se encargaba de mantenerlo así y se sintió culpable por no haber pensado en venir antes. —Abuela —murmuró, tomando aire—. Sé que nunca te he pedido perdón, y hoy quiero aprovechar para hacerlo, ya que estaba muy equivocado respecto a ti y me arrepiento enormemente de todo lo que hice y dije —suspiró—. Gracias por cambiarme la vida —Atrajo a Allie para abrazarla, pues sentía un nudo en la garganta. Se quedaron en silencio unos minutos, cada uno perdido en sus pe
Había llegado el día donde se daría lectura al testamento, por lo que Leonard se presentó más temprano de lo habitual a su oficina y en esta ocasión, lo hacía acompañado de Charlotte, en representación suya. Su secretaria se había encargado, el día anterior, de dejar la oficina acondicionada para recibir a todos los herederos, así que se limitó a poner los documentos sobre su escritorio, los cuales revisó por última vez y suspiró. —Sigo sin creer que los deseos de Martha, se hubiesen materializado con tanta antelación —dijo pensativo, con el mentón apoyado sobre sus manos, las que estaban entrelazadas. —Desde que conocí a Gabriel y Allie, supe que Martha no se había equivocado —rebatió su esposa, sentada frente a él—. Las mujeres solemos tener ese instinto, que rara vez nos falla —Sonrió. —No estuviste aquí al inicio, no viste las miradas que se dieron, ni cómo se trataban… En serio, creí que todo este asunto era un disparate y estaba seguro, que este año, tendría por lo menos, cua
Allie… Rainbow of love, lleva algunos meses funcionando perfectamente como hogar de acogida, hemos logrado que la mayoría de los pequeños que llegan, encuentren hogares en los que tengan todo el amor que necesitan o en otros casos, puedan pasar a manos de familiares que pueden darles el cariño y apoyo necesario. Escuché unos golpes en la puerta, los que me sacaron de mis pensamientos. —Adelante. —Hija, acaban de llegar dos pequeños —explicó mi madre—. Son hermanos y están muy asustados. —¿Ya llamaron a la psicóloga? —Sí, pero quería informarte por si quieres ir a verlos —contestó—. El niño tiene siete años y la niña, dos. —Vamos. Me puse de pie y acompañé a mi madre al área en la que recibimos a los niños. La puerta estaba entreabierta y una de las chicas de apoyo intentaba hablar con ellos, sin éxito. Apenas entré, se me partió el corazón al mirarlos. El niño tenía el cabello rizado hasta los hombros, sus enormes ojos verdes lucían tristes, hacía un puchero como si se co
Gabriel… Si había algo que siempre me gustó hacer, era montarme en la motocicleta y conducir por horas sobre la carretera. Sentir cómo mi cuerpo rompía la velocidad del viento, mientras este chocaba con fuerza contra mí, dándome la sensación de libertad que creía tener. Y no la tenía. Mis pensamientos siempre fueron un constante recordatorio de que debía hacer las cosas de tal o cual modo para hacer sentir orgulloso a mi padre, con la finalidad de sentirme digno de su cariño o que al menos, me prestara un poco de atención, al igual que con mi madre. Ahora que miraba en retrospectiva mi vida, podía darme cuenta de lo equivocado que estaba. Vivía el presente, postergando metas, logros y sueños, con el miedo de no alcanzarlos, pero a la vez, sin siquiera arriesgarme a intentarlo. Huyendo. Pero todo eso cambió el día en que mi abuela, la increíble Martha Britter, irrumpió en mi vida como un huracán, sacudiendo mi mundo y volviéndolo patas arriba. Sacándome de mi zona de confort y e
Hace poco más de tres años, me aventuré en este hermoso mundo de la escritura, debo confesar que nunca imaginé todo lo que implicaba crear novelas en las que se pudiera transmitir toda clase de sentimientos. He pasado por muchos momentos, que me han dejado enseñanzas y sobre todo, me motivan a continuar.A lo largo de este tiempo, considero que he ido avanzando, puedo notar una enorme diferencia de mis primeras historias a las últimas, aunque en todas he puesto lo mejor de mí y las he disfrutado al máximo.En esta ocasión, escribir con mi amiga Andrea Paz, a quien le agradezco su paciencia y dedicación, era un reto enorme, ya que hicimos algo muy diferente a lo que yo estaba acostumbrada, recibimos comentarios de todo tipo, de los cuales aprendimos e intentamos mejorar tomándolos de manera positiva. Agradezco infinitamente, a todas las personas que se tomaron el tiempo de seguirnos con las actualizaciones y que apoyaron nuestro proyecto.Esta novela me deja un gran aprendizaje y un r
¡Hola, hola! Aquí estamos de nuevo y esta vez vengo acompañada de una gran y talentosa amiga, mi queridísima, Dannya Menchaca. Estamos muy emocionadas con esta nueva historia que traemos para ustedes y esperamos que la disfruten tanto como nosotras. Como saben, no podemos asegurar cuándo comenzaremos a actualizar, pero intentaremos subir algunos capítulos, mientras esperamos que nos aprueben. De ante mano, les agradecemos el apoyo y esperamos que disfruten de este desafío. No olviden estar al pendiente, ya que estaremos avisando cuando comenzaremos. La venganza de un idiota es una novela escrita por Andrea Paz y Dannya Menchaca, registrada en SafeCreative bajo el código: 2307014723085. Se prohíbe cualquier copia parcial o total de la obra, ya que estará infringiendo los derechos de autor. __________________________________________________________________ Gabriel terminó de editar la última fotografía en su portátil y volvió a ojear cada una, orgulloso de las capturas que logró co
El día para Allie comenzó como cualquier otro, llegó a su trabajo puntual como siempre y su sonrisa inundó el lugar apenas entró. —Buenos días, Martha —saludó con entusiasmo a su residente favorita. —Buenos días, Allie —respondió la mujer un poco somnolienta. —Es hora de tu ducha —Le recordó. —¿No debería ducharme solo una vez a la semana? —bromeó Martha y Allie no logró cubrir su boca a tiempo, para ahogar una sonora carcajada, que seguramente se escuchó por los pasillos de la estancia. —Vamos a ponerte muy guapa y te llevaré a tomar el desayuno al jardín, el sol está maravilloso —propuso la joven, con entusiasmo. —Parece que ya me convenciste —respondió la mujer mayor, poniéndose de pie para ir a la ducha con la ayuda de Allie—. ¿Cómo está el pequeño Timothy? —preguntó por su hermano, mientras preparaban todo en el baño. —Aburrido. Desea tener una vida normal, y aunque ahora tenemos la opción de darle un nuevo medicamento que podría ayudarlo, su seguro de salud no lo cubre